Señor, divorciémonos [ABO] (Finalizada)

Capítulo 73

Su voz era baja y profunda, no muy clara en la escasa lluvia, como el suave susurro de un laúd en el oído. Las secuelas del sonido se prolongan y se prolongan.

El corazón tranquilo y fuerte de Song Qing latió de repente con violencia, como si alguien le hubiera dado un puñetazo sordo de forma inesperada.

"¡Está cambiado!" Lo soltó como si fuera una papa caliente, sus ojos se desviaron a un lado.

"Está lloviendo mucho, siento que me voy a mojar aunque salga con paraguas". Shen Yuguan se inclinó hacia atrás con un margen muy ligero, ahuecando su taza de té con fuerza en la palma de la mano, levantando los ojos para mirar rápidamente a Song Qing, y luego se volvió bruscamente, como un niño que espera ser castigado por un error,

"Ah, ¿Ya lo has cambiado? Me iré entonces". Tras decir eso, dejó inmediatamente la taza de té que tenía en la mano, enderezó las esquinas de su arrugada ropa y se preparó para salir.

"Olvídalo..." Song Qing oyó que la lluvia arreciaba y dijo con los dientes apretados: "Puedes irte cuando deje de llover".

Los pies de Shen Yuguan dejaron de moverse, y se volvió con una cara vacilante, "Serás infeliz".

"..." ¿Shen Yuguan fue a inscribirse en un curso intensivo de adivinación por el arte del té?

Song Qing guardó la caja de medicinas y dijo: "Como quieras".

Shen Yuguan rió suave y silenciosamente, sintió que el dolor en su cuello no era tan insoportable, "Me iré tan pronto como la lluvia pare".

Song Qing no se molestó en ignorarlo, cogió la caja de medicinas y subió las escaleras.

"Tú..." Song Qing le interrumpió: "Me voy a la cama".

Después de todo su trabajo, sentía un dolor de cabeza y estaba aún más enfadado con Shen Yuguan, así que podría volver a descansar.

Cuando empujó la puerta de su habitación, le llegó una brisa fresca, mezclada con aire acuoso. La ventana había estado abierta antes y se había olvidado de cerrarla, por lo que la lluvia entraba en la habitación con gran fuerza.

El viejo edificio de al lado, que había quedado desatendido, había adquirido de repente un aire humeante, con personas de la mudanza con impermeables que entraban y salían con muebles grandes y pequeños.

De repente, recordó que hace dos días, cuando charlaba con la hermana Li, ella mencionó esta noticia y exclamó repetidamente que el propietario original del viejo edificio había tenido suerte al encontrarse con un generoso propietario que compró el edificio por casi la mitad del precio de mercado.

Me pregunto qué clase de persona es el nuevo vecino. Mientras Song Qing pensaba, dejó de cerrar bruscamente la ventana.

No será...Shen Yuguan, ¿verdad?

No. Song Qing descartó inmediatamente su sospecha.

A diferencia de él, el poder y la posición de Shen Yuguan estaban en Frost City, por lo que no podía venir aquí sin más.

No podía esperar a caer de nuevo en la cama, despejando su cabeza de pensamientos innecesarios y sólo queriendo conseguir un sueño cómodo.

≪ •❈• ≫

Cuando Lian Yan llevó a Song Yan al piso de abajo, Shen Yuguan seguía sentado en el sofá, con la columna vertebral erguida y el cuello envuelto en una gasa tras otra, como una momia, lo que resultaba bastante gracioso.

Shen Yuguan se acercó al oír la voz y sus ojos vieron a Lian Yan. No pudo evitar tener un aspecto sombrío durante unos instantes. Pero al momento siguiente, la Song Yan en sus brazos robó toda su atención, y todo su cuerpo se ablandó incontrolablemente.

Lian Yan no tenía nada que decir a Shen Yuguan, y era como si no hubiera esperado que estuviera aquí, así que tuvo que sentarse frente a él.

Era Song Yan quien tenía curiosidad, sus grandes ojos redondos miran a la persona que tenía delante, le resultaba familiar, pero no tenía ese olor tan reconfortante.

La mirada de Shen Yuguan era demasiado intensa, se dio cuenta y se recompuso un poco, diciendo: "El té de jengibre está muy bueno, gracias".

Lian Yan: "Mm, está bien". El ambiente era repentinamente incómodo hasta el extremo.

"Bueno..." Song Yan ya estaba aprendiendo a caminar, y en cuanto Lian Yan la puso en el sofá, impacientemente torció los brazos y las piernas y se arrastró hasta el lado de Shen Yuguan.

Cuando Song Yan tocó a Shen Yuguan, aplaudió felizmente y siguió diciendo palabras sin sentido en voz baja.

El corazón de Shen Yuguan se calentó mientras preguntaba: "¿Puedo abrazarla un poco?"

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Traducción: Yunno
Corrección: Ogalde