-despues de que Lucy y Helena pelearán, y que Helena haya colgado la.llamada con los Wayne, quien las interrumpió fue Daphne-
Lucy: ¿Qué pasa?
Daphne: Bueno, la Cámara de los Secretos se abrió hace cincuenta años, ¿no?
lucy: Al menos, eso lo obtuvimos de Malfoy y Alex, pero no sé si sea cierto
Helena: Y este diario tiene cincuenta años -dijo con poco interés-Lucy: ¿Y?
Daphne: Vamos, Lucy, despierta ya... Sabemos que la persona que abrió la cámara la última vez fue expulsada hace cincuenta años. Sabemos que a T.M. Ryddle le dieron un premio hace cincuenta años por Servicios Especiales al Colegio. Bueno, ¿y si a Ryddle le dieron el premio por atrapar al heredero de Slytherin? En su diario seguramente estará todo explicado: dónde está la cámara, cómo se abre y qué clase de criatura vive en
ella. La persona que haya cometido las agresiones en esta ocasión no querría
que el diario anduviera por ahí, ¿no?
Lucy: Es una teoría brillante, tanto que te compararía con la Gryffindor amiga del hermano de Helena, como se llamaba? Herfefeni Fefer Fefer?, No se, pero tiene un pequeño defecto lo que dices y es que no hay nada escrito en el diario.
-Pero Daphne sacó su varita mágica de la bolsa-Daphne: ¡Podría ser tinta invisible! -susurró. Y dio tres golpecitos al cuaderno, diciendo- ¡Aparecium! -Pero no ocurrió nada. Así que empezó meter la mano en la bolsa y sacó lo que parecía una goma de borrar de color rojo- Es un revelador, lo compré en el callejón Diagon
-Frotó con fuerza donde ponía «1 de enero». Siguió sin pasar nada.-Lucy: Ya te lo decía yo; no hay nada que encontrar aquí -dijo de forma burlesca- Simplemente, a Ryddle le regalaron un diario por Navidad, pero no se molestó en rellenarlo.
-Helena no podría haber explicado, ni siquiera a sí misma, por qué no tiraba a la basura el diario de Ryddle. El caso es que aunque sabía que el diario estaba
en blanco, pasaba las páginas atrás y adelante, concentrada en ellas, como si contaran una historia que quisiera acabar de leer. Y, aunque estaba segura de no haber oído antes el nombre de T.M. Ryddle, le parecía que ese nombre le decía algo, como si se tratara de un amigo olvidado de la más remota infancia-
-Pero era absurdo: no había tenido amigos antes de llegar a Hogwarts, más que sus hermanos y algunos Sidekicks que conoció de los miembros de la liga de la justicia, ninguno de ellos poseía la sabiduría o el entendimiento de lo mágico. Sin embargo, Helena estaba determinada a averiguar algo más sobre Ryddle, así que al día siguiente, en el recreo, se dirigió a la sala de trofeos para examinar el premio especial de Ryddle, acompañado por una Daphne rebosante de interés y una lucy muy reticente, que les decía que había visto el premio lo suficiente para recordarlo toda la vida-
-La placa de oro bruñido de Ryddle estaba guardada en un armario
esquinero. No decía nada de por qué se lo habían concedido, Simplemente estaba alliz sin más-Lucy: Menos mal, porque si lo dijera, la placa sería más grande, y en el día de hoy aún no habría acabado de sacarle brillo.
-Sin embargo, encontraron el nombre de Ryddle en una vieja Medalla al
Mérito Mágico y en una lista de antiguos alumnos que habían recibido el Premio Anual-Lucy: buenos parece que venimos aquí para nada
Daphne: Lo dices como si fuera algo vergonzoso -dijo algo herida-
-El sol había vuelto a brillar débilmente sobre Hogwarts. Dentro del castillo, la
gente parecía más optimista. No había vuelto a haber ataques después del
cometido contra Justin y Nick Casi Decapitado, y a la señora Pomfrey le