Capítulo 10: Rescate

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Narradora...

Ya pasaron varias horas desde la captura de Wirt y Amber. Los muchachos se hallaban durmiendo en sus tiendas, hasta que...

Flor: *le suena la alarma del cel* ¿mmm? ¿Pues que horas son? *agarra el cel* ¡¿Qué?! ¿7 de la mañana? pero... si todavía está oscuro. *sale de la tienda viendo el cielo, y para su sorpresa era cierto. Estaba oscuro, pero más de lo usual, lo único que alumbraba era la luna* ¡muchachos despierten!

Nanda: *saliendo* ¿Qué pasa Flor? ¿Qué haces despierta a esta hora?

Flor: ¡son las 7 de la mañana, y no ha salido el sol!

Cauhtli: imposible. ¿no tendrás la hora del cel descompuesta?

Ethan: no lo creo *saliendo* mi cel también dice esa hora.

Teodora: y el mío

Mily: el mío también

Sebas: todos dicen esa hora.

Ana: bueno, la hora está bien, pero el cielo no *mirando* ¿Qué estará pasando?

Jeremy: Wirt y Amber tampoco han vuelto. Dijeron que a esta hora estarían de regreso.

Angie: oigan... como que aquí falta alguien... *contando a todos* ¿y María no se levantó?

Shaiel: yo la busco *va a la tienda de esta*

Ben: ¿creen que el que Wirt y Amber no hayan vuelto, tendrán algo que ver con esto? Parece más bien por arte de magia

Teodora: *intentando llamarlos* no contestan...

Ana: *saliendo de la tienda de Wirt y Amber* será porque están aquí, y apagados *con ambos celulares en las manos*

Shaiel: *regresando*Oigan... ¡María no está tampoco!

Flor: ¡¿pero que fue lo que pasó?!

Sebas: esperen *cerca de la tienda de la otra desaparecida* aquí se ven unas pisadas. ¿se habrá ido?

Nanda: ¿y si sabe en dónde están? Si las seguimos tal vez los encontraremos.

Teodora: unos de nosotros debemos ir a buscarlos, y que el resto le ponga guardia al campamento en caso de que vuelvan.

Ethan: buen plan. Yo me ofrezco para ir

Nanda y Angie: nosotras también

Jeremy: los acompaño

Sebas: yo igual

Mily: cuenten conmigo

Shaiel: cualquier cosa llámennos, pero alumbren, por lo que veo parece una noche eterna.

Ana: tengan mucho cuidado.

Angie: lo tendremos. ¡Andando!

El grupo ya arrancó camino. Y en lo que dijo Shaiel era cierto. Parecía que habían congelado la noche, hasta la luna seguía en su punto más alto, alumbrando las penumbras de la noche. Wirt y Amber por otro lado, no hallaban como desatarse.

Wirt y Amber: *forcejeando*

Amber: ¡es inútil! Son muy gruesas

Wirt: pero de todos modos tenemos que salir. Los muchachos pueden estar en peligro *forcejeando pero las zarzas se apretaban más* ¡no puedo soltarlas!

Amber: parece que cada vez que nos movemos se ajustan más *viendo el cielo* ¡ya deberían ser como las 7 de la mañana! ¡El sol no ha salido!

Wirt: creo que como La Bestia tiene a María poseída, sacó los poderes de la linterna y la reemplazó con una luz falsa. Pero... *se deprime* pienso que todo esto es culpa mía.

La Leyenda de Etherwood IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora