🩰
Seré franco, no esperaba encontrarme en la situación que estaba ahora. Sí, he salido con chicas y sí se cómo son cuando su "mejor amigo" está mal... «Siempre te dejan plantado LJ». Y sí, esa parte era cierta. Siempre me dejaban por fuera.
Pero ella no lo hizo. «¿Por qué?» esa pregunta resonaba en las paredes de mi mente desde que dejamos a Akin con su madre. «¿Por qué Mikaela Vangoberith no me rechazó». Necesitaba respuestas pero no sabía si era buen momento o no.
Vimos el coche de la Sra. Waldorf dar la vuelta e irse, en ese momento Mikaela me sonrió y le devolví la sonrisa. Ella era preciosa en toda su extención; su rostro ya no tenía ni un solo rastro de haber llorado en su lugar, había una cálida sonrisa. Cuando ella volteo la vista hacia la avenida, me percate que aún traía mi chaqueta puesta. Ese detalle me hizo sentir reconfortado ya que a nadie le di mi chaqueta.Era una de mis favoritas, era negra de cuero, me la regaló mi mamá antes de... Morir. «Ahora no, LJ, ahora no» me repetí a mi mismo.
-LJ, ya viene el autobús -me dijo Mikaela, y fue justo allí cuando me desperté de mis pensamientos.
Le pagué su pasaje y nos montamos en el autobús de retorno. Le ofrecí la ventanilla y de nuevo me rechazó, así que me senté yo. La ventana estaba abierta y, para estas fechas de Septiembre, el invierno se aproxima, así que había una brisa fría que me traspasaba la carne y me pegaba en los huesos, pero claro, preferí callarme a quitarle la chaqueta a Mikaela.
Por un buen rato, ninguno de los dos habló. Sabrá Dios que pasaba por su mente, había Sido un día largo que no pensaba nunca en acabarse.
-Gracias por acompañarme -esas palabras me sacaron abruptamente de mis pensamientos.
La miré pero ella estaba viendo hacia adelante, como si estuviera viendo a algo... O a alguien.
-No hay que agradecer... Aquí estaré para ti -«Aquí estaré para ti... ¿!ES ENSERIO LJ!?». Sí, era una frase muy cliché pero ¿Qué podría decir? Ni siquiera estaba seguro si ese agradecimiento era para mí o no.
No sabía que tema de conversación sacar y no estaba muy seguro de que si ella quería hablar. Después de unos minutos saco su teléfono de su bolsito, reviso los mensajes y luego lo guardo.
Todo esto me traía bastante confundido, era una chica muy callada y un poquito rara. Pero eso era lo que más me atraía de ella. Sí, era muy hermosa, eso no lo niego, pero hablo de esa rareza, esa extraña rareza que tenía. He salido con varias chicas y no lo había encontrado en ellas. Esto que ella tenía, era algo de ella y eso la hacía especial... Eso hacía que mi atención solo se fijará en ella.
🩰
Sabía que debía decir algo más, es solo que... LJ es intimidante. Es alguien bastante callado, como yo y estaba aterrada de decir algo que no le cayera bien.
La verdad es que si quería irme con Mónica para saber que le pasó realmente a Akin pero no quería dejarle solo, no sé, sentía que... Lo estaba desplazando.
Fue un día largo y además, seguramente sentía dolor por la paliza que recibió por culpa mía y con este frío terrible que hace en las noches...«Este frío terrible... MIKAELA Y ¡TU TIENES SU CHAQUETA!». Pensé aterrada mientras tocaba la chaqueta con mis manos. Trate de quedarme muy quieta para que no pensará que estoy loca, pero la realidad era que sentía mucho miedo y muchas preguntas llegaron a mi mente «"¿Y si tiene frío? ¿Y si piensa que me la quedaré para siempre? ¿Y si cree que Akin es mi novio? ¿Y si...?».
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Vangoberith, La Bailarina de Cristal
Novela JuvenilMikaela Vangoberith está reprimida a sentir amor y pasión por el baile desde la muerte de su padre. Inevitablemente, conoce a LJ y ambos se unirán para superar su dolor y miedos al hacer lo que le apasionan.