cap.6: tonto moviendo

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Todo era incómodo, estar todos juntos era incómodo.

El pequeño Jon se sentía incapaz de estar cerca de su compañero, su versión adulta era amable, pero no como siempre, era algo distante.

El pequeño Damian había días que se negaba a comer, o levantarse. Cuando lo hacía solo se quedaba al lado de su yo adulto, buscando protección de esa persona, entrando por la noche para dormir a su lado, llorando en silencio en un abrazo cálido.

La chica frecuentaba el departamento, trayendo cosas a la versión adulta de Damian, varias cosas, siempre incapaz de mirar al pequeño Wayne.

- quiero hablar contigo- fue la voz adulta de Damian, que llamo a su pareja que estaba dando lavando los platos.
- ¿que sucede?- cuestiono sin mirar a su pareja, los niños dormían.

Solo apretó los labios el joven árabe, mirando a su pareja para luego respirar profundo y soltar.

- no estoy enojado contigo- fue lo que soltó el mayor.
- no tienes que mentir- soltó el menor sin mirar a su pareja.
- Jon, escuchando mi corazón y lo que diré- pidió calmado- no estoy enojado contigo.

Jon solo bajó la cabeza, para apretar la esponja de los platos y no contestar, estaba molesto con el mismo por herir a dos niños y a la persona que amaba.

Damian solo se acercó y abrazo a Jon con amor, quien reacciono y abrazo a su amado con tanto amor que solo lloro en silencio, escuchando un "sigues siendo un llorón" de parte de él mayor.

Al día siguiente el ambiente tenso desapareció entre los adultos, pero los niños seguían igual.

Un corazón roto, no importa que tanto lo cosas, pegues o parches, siempre tendrá una marca. Y si ese corazón ya venía roto, solo un moviendo en falso podía convertirlo en fragmentos.

El corazón del pequeño Wayne era pequeños fragmentos, que ambos adultos sabían que alguien tendría que reparar.

- ¿y si cambios la línea de tiempo?- fue la voz de pequeño Kent, que hizo a todos mirar.
- ¿a que te refieres?- cuestiono su yo adulto.
- si, sabemos todo lo que pasó. Lo que sucedido y eso, podemos evitar esto- explicó Jon tratando de dar sentido a sus palabras- me refiero que cuando regresemos, evitar este futuro- dijo esta vez mirando al Damian, quien solo levantó la cabeza.
- ¿a que costo?- cuestiono el pequeño Wayne.
- eso no importa- dijo Jon.

Ahora ambos niños estaban en desacuerdo, Damian ya había aceptado su destino, lo único que estaba feliz era que iba tener a Jon a su lado, pero también lo ponía triste.

- ¡SI cambiamos la línea, puede que no estés a mi lado! - soltó desesperado Damian, acepto perder a su familia, pero no a Jon.

El niño de ojos verde solo empezó a llorar, no podía aceptar eso. No quería perder a Jon.

Su versión adulta se iba acercar si no fuera por la mano de su Jon, que le dio a entender que deje en las manos del pequeño Jon.

El niño de ojos azulados se acercó y abrazo tan fuerte como pudo.

- yo siempre estaré a tu lado, sin importar que- confesó feliz- cambiaremos este futuro y yo seguiré a tu lado, junto con tus hermanos y padre- dijo sonriendo, para luego ver a su versión adulta que iba a quejarse por último- Sabes, algo que tengo más que claro. No importa que haga Damian, Dick, Tim y Jason lo amarán tal y como es. El señor Wayne se que adora a Damian, pero no sabe como expresarlo. Así que cierra tu estúpida boca y no me contradiga- fue lo último que dijo a su yo adulto, que solo bufo, mientras que la versión adulta de Damian solo trataba de no reír.

Ahora todo era más alegre, bueno algo.

Ya no había esa tensión en el aire, todo era calma y paz.
La chica volvió a aparecer, se notaba de mal humor, cosa que llamó a los dos adultos.

El pasado en el futuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora