ORPHIC (Kpop Multifandom)

CAPÍTULO 6

JENNIE POV

Las mañanas dentro de aquellas murallas eran distintas, era la primera noche que dormía allí y yo, acostumbrada al silencio absoluto de mi habitación en aquel ático de la ciudad, no me había dormido hasta casi la madrugada.

Tampoco había podido aprovechar la mañana para descansar, a primera hora los negocios ya abrían sus puertas y persianas y las calles estaban de lo más animadas, incluido por los niños que se iban al colegio.

Así que me desperté temprano, aunque cuando yo lo hice, ni Somi ni Momo estaban ya en la habitación.

Tardé un poco en ubicarme donde estaba y todo lo que estaba ocurriendo, había pasado todo tan rápido que no me había parado a asimilarlo y era algo que todos deberíamos hacer.

Me levanté y me vestí con unos pantalones de asalto y un top verde militar que dejaba a la vista los tatuajes de mi cuerpo, esos que siempre me dijeron que me darían millones de problemas laborales y, en realidad, no había tenido ni uno solo.

Me coloqué las botas negras y me hice una trenza a un lado, desde la raíz de mi pelo, maquillando un poco mi rostro para esconder las ojeras y los claros signos de la ausencia de sueño.

Cuando estuve lista, salí de la habitación y bajé las poco conseguidas escaleras de esa casa de madera, hasta ir a la cocina donde estaban todos repartidos, acabando de desayunar y preparándose para trabajar.

-EunWoo te ha dejado un mensaje en el walkie – me avisó Mingi limpiando su taza de café.

-Yo me voy con MoonBin – dijo SeungWoo colocándose la metralleta en el hombro – luego os cuento qué tal me ha ido, suerte hoy.

-Un honor – suspiró SeHun cerrando la nevera y mirándolo sonriente – por si me muero, digo.

-Pues un honor por si me muero – se despidió SeungWoo sonriente de todos nosotros y saliendo por la puerta.

Sonreí débilmente y me acerqué a mi walkie para ver ese mensaje que decía Mingi que EunWoo me había dejado mientras dormía.

-¿Y Somi? – pregunté yo toqueteando los botones del walkie.

-Trabajando en el laboratorio – me contestó JungKook – yo también me voy, me han puesto una guardia de exterior – caminó hacia la puerta – un honor por si me muero – se despidió de la misma forma que SeungWoo.

Todos reímos un poco por la broma y apreté el botón de iniciar el mensaje de EunWoo a mi walkie. Al apretar el botón, sonó su voz somnolienta y cansada al otro lado, ronca y sin ganas.

-Buenos días, Coronel – saludó – la Comandante quería verte, pásate por la carpa cuando puedas.

Dejé el walkie de nuevo en la encimera y cogí la taza que me daba Momo para que desayunase algo antes de irme.

Miré por la ventana a la casa donde estaba viviendo MinGyu, no estaba ahí, la casa estaba vacía, si no recordaba mal, les dirían a los cinco delincuentes que se hospedaban ahí, de encargarse de algo importante en esas murallas. Por MinGyu me parecía buena idea, pero a los otros cuatro no los conocía de nada y no estaba muy segura.

-¿Yo también tengo que decir eso que os decís al salir? – preguntó Jay – voy al instituto, yo no me voy a jugar la vida – sonrió.

-Si vives aquí, lo dices – le dijo SeHun – sino coges una tienda de campaña y al jardín, crack – bromeó.

-Vale, vale – rió Jay caminando con la mochila en la espalda – un honor por si me muero – se despidió y todos le sonreímos.

-Yo me voy también – les dije bebiéndome el café de un sorbo – tengo que hablar con SiYeon y tengo que comentarle un par de cosas de mi hermana.