Hollywood Of The Dead

Chapter 27

- Si vas hablar hazlo ahora. -

- Quisiera abrazar a mi hermana. -

Jade volteó y antes que pudiera decir algo, Jason ya se encontraban abrazándola.

~

Ambos hermanos estaban sentados sobre el muro, miraban el exterior y una gruesa manta los cubría a ambos.

- Entonces... ella podría ya no despertar. - la voz de Jade salió baja, suave. Solo eran ellos dos en la madrugada.

Jason asintió y apretó los labios. El silencio reinó siendo sólo interrumpido por los sonidos de la noche.

Jason le habia contado el estado actual de Tori a Jade, contó también cómo fue la primera y las demás que le siguieron.

- Cuándo ví a Vega por primera vez, ella estaba tallanto a Beck. -

Jason rió suavemente. - Lo sé, llegaste a casa con un muy mal humor a pesar que le vaciaste un vaso de café por toda su cabeza. -

Jade volteó a mirarlo. - Yo nunca te conté eso. -

- Ella lo hizo. - se encogió de hombros.

- ¿Qué más te contó? -

- No puedo contarte. -

- ¿Por qué? -

- Código de amigos. -

- ¿Vega es tu amiga? -

El niño asintió con una sonrisa.

- Ya veo. Has caído en los encantos de los Vega. -

- ¿Tú también? -

Jade hizo un rápido encogimiento de hombros. - Al final tengo esta especie de amistad con Trina. Y luego está papá Vega, convive con él y se convierte en un papá oso Vega. -

- Wow, te llevas bien con la que llamabas irritante y sin talento Vega. -

- En mi defensa, las circunstancias lo exigen. - Jason rió. - Eso no te salva. ¿Qué más te contó Vega de ese día? -

- Ya te lo dije. No puedo decirte nada. -

- Dame una buena razón. -

- ¿La has visto enojada? - casi susurró, e incluso, movió sus ojos para asegurarse que Tori no estaba ahí.

- Quizás. No lo sé. -

- Bueno, te digo que no es agradable. -

- ¿Tanto así? -

- Sep. -

Nuevamente el silencio llegó. Ambos sumergidos en sus propios mundos.

Jade, miró de reojo a su hermano. Jason había crecido. Él siempre fue alguien muy inteligente y avanzado para su edad. Agradecía tenerlo de vuelta. Prometió cuidar de él cuando su madre se fue, y Arthur, no era el padre que siempre estaba ahí para sus hijos.