Hollywood Of The Dead

Chapter 30

Sentado frente a la cámara, su cabeza gacha y de fondo un silencio inquietante.
Su apariencia era deplorable. Su piel pálida enfermiza, ojos hundido y con grandes bolsas negras debajo de ellos. Sus labios resecos y quebradizos. Una casta barba descuidada en su rostro semi esquelético.

- ¿Por dónde empiezo? - su voz salió cansada, ronca. - Todo fue un error... Fawn, mi hija... mi esposa... me quitaron todo. No sé quién seas, pero tienes que prometer que cuando la veas la matarás, tienes que matarla, de lo contrario todo estará verdaderamente perdido. Fawn no es una niña, ya no más. Su realidad está distorcionada, ella no sabe quién es, ella está perdida. - miraba la camara tan fijamente, casi sin parpadear. Como si estuviera loco. Cansado quizás. - Encontrarás toda la informacion que dejo así como pistas para llegar a mi. Tienes que encontrarme. No me importa quién seas. encuentrame antes que ellos. Encuentra la cura y traemela. - se escucharon pasos fuera del laboratorio en el que Alan se encontraba, ¿corrian? eran varias pisadas apresuradas. Él miró sobre su hombro. Silencio. -  Existe sangre especial, así como la de mi esposa e hija. La de Jannette, de algún modo pudo convatir todo el virus y se convirtió en lo que es, no como el gato, murió tiempo después. La de Fawn, todo su cuerpo, sus células combatiron de algun modo, y se fucionaron, ¿o se adaptaron? ella... el virus mutó, la dejó concervar su cordura, sus pensamientos y recuerdos, Fawn pasa desapersivida entre los SPC 1, 2, 3 e incluso los SPC 4. Humana. Pero no lo es. Con el tiempo, su realidad, sus recuerdos se distorcionaron. Ellos lo tomaron y se aprovecharon de ello, lo distorcionaron todo. Crearon a un ser, como solian llamarla, perfecto. - rió con amargura y sin gracia. - Crearon a un ser sin nada. Ellos no lo ven. Están cegados. -

multiples disparos se escucharon, él se sobresaltó. Gritos de miedo y dolor. La puerta se abrió y entro un hombre en bata blanca, no se miraba mejor que Alan. - Esta es nuestra oportunidad. - Nathan empezó a moverse en toda la habitacion. Apresurado, guardaba lo importante. - Sí hubiera sabido en aquel entonces. Me estoy volviendo loco. Si tan solo Jannette hubiera tenido más precaución. ¡Una mujer brillante! Pero descuidada. - murmuraba sin parar.

×××

- El gobierno se enteró. - Jason miró directamente a su hermana. Deseaba no entrar en más detalles e ir directamente al grano. Esperaba que ella lo entendiera.

- ¿Por qué no me sorprende? - murmuró alguien. Igualmente no se le prestó atención.

- ¿Por qué están aquí? - la pregunta de Jade salió más exigente de lo que pretendía. - Porque en realidad no creo que sea para hacernos saber que sí seguían con vida. -

- Por supuesto que sí. - Una voz que no había estado presente en la sala respondió, al mismo tiempo que las puertas de la sala terminaban de abrirse. Los primeros en ponerse de pie fueron el grupo de Jason, él incluido. No fue hasta que Cat corrió con entusiasmo que los demás reaccionaron.
Literalmente, Cat se le tiró encima, haciéndola retroceder dos pasos, para luego caer ante el peso de los demás que se abalanzaron.

- ¡Ya muévanse, animales! - Kate empezó a moverlos con brusquedad. La ayudaron Eguipar y Dimitri, junto a las otras dos recién llegadas, Camil y Annie.

- ¡No era necesario jalarme del pelo! ¿¡Sabes cuánto duele, bruja!? - le reclamó Cruz a Kate.

- ¡La estaban aplastando, idiota! - le respondió Marco.

- Tu también estabas ahí. -

- Sí, pero yo estaba abrazando a Estefan. -

- Entonces eran tus manos las que estaban en mi trasero. - Estefan miró a Marco. Todos lo hicieron.