Hollywood Of The Dead

Chapter 31

- Hey. - la voz salió suave, tímida al igual que sus pasos, lentos y vacilantes.

Jade no dirigió su mirada a la recién llegada. Seguía recorriendo lo que había debajo de ella. Se encontraba sentada en lo alto del muro, sus pies colgaban y una de sus manos sujetaba una cuerda para mayor seguridad.
Miraba el refugio. Observaba a los pocos que aún se encontraban fuera de sus cabañas. Pero también estaba atenta a lo sucedía fuera del refugio.

La noche era hermosa.
El paso de los meses le dio descanso al planeta, la contaminación se redujo y las noches eran casi perfectas para Jade. El gélido manto oscuro manchado con numerosos y gigantes cuerpos celestes, aunque para ellos eran sólo puntos luminosos.

- Yo... ¿puedo sentarme? ... voy a sentarme. - advirtió al no obtener respuesta o una mínima señal.

El silencio no fue incómodo, pero tampoco agradable.

- ¿Qué haces aquí? -

- Ah... mmh, yo... me dijeron que podía encontrarte aquí, es tu ¿guardia? -

- No. Me refiero a qué haces aquí en el refugio. - Jade la miró.

El cuerpo de Tori se relajó y sus músculos lo agradecieron. ¿Cómo era posible que una mirada podía relajarla tanto? Aunque esa mirada estaba cargada de muchas emociones y sentimientos.

- ¿No es lo que querías? -

- ¿Y si la respuesta es no? -

Tori tomó aire al mismo tiempo que apartaba la mirada. - Entonces diré que es lo que yo quería. Quiero. - corrigio. - Verte. Estar así... a tu lado. -

- Pero te irás. - su tono era duro, acusador. - Nos separamos. Pudieron regresar antes. Pudiste regresar antes, pero decidiste no hacerlo. Decidiste tomar la tarea de salvar la humanidad - reprochaba. - , y arrastraste a Jason contigo. -

- No, no me acuses de eso. Jason quiso venir por su cuenta. Sería puesto en un grupo al cual tu y los tuyos rescatarían, pero se opuso. Fue su decisión. -

- Jason era un niño. Es un niño. - casi hablaba entre dientes.

- Jason es lo suficientemente maduro para tomar sus propias decisiones. -

Tori tenía razón, Jade lo sabía, pero aún así, Jason es su hermano. Jade siempre se preocuparía por él, independientemente de cuan maduro sea él o la edad que tenga.

- Yo no quiero discutir contigo, Jade. -

- Entonces cállate o vete. -

No, Jade no había cambiado.

Eso pensó Victoria.

- Yo tampoco puedo hacer eso. - el murmullo fue perfectamente escuchado. - Entiendo que estés completamente enojada... yo solo quería verte. -

- ¿Es así? -

Tori sintió la intensa mirada de Jade. Sintió. - Todo lo que necesiba era una escusa para verte... Cat, Robbie, Andre, Zikowitz, Kate, Marco y Raúl, todos tienen a alguien aquí. -

- ¿Zikowitz? - Jade sintió calidez al ver a Vega sonreir y soltar una pequeña risa ante su comentario.

- Bueno él dice que su familia está donde sus alumnos estén. - sus labios se apretaron sin querer borrar la sonrisa. - Dice que en verdad se siente viejo para seguir adelante... él a sido un gran pilar para nosotros y en verdad me causa un gran pesar el dejarlo aquí. -

- El viejo estará bien en el refugio. Todos aquí son cautelosos, pero amables. -

- Sí, él... ya habla maravillas de este lugar... -