Love will tear us apart.

Capitulo 30: El amor no es un privilegio heterosexual.

-Emily, te hablan. -Grito mi madre.

Salí para ver de quien se trataba era Paola, me alegre mucho en verla.

- ¡Paola!, dios no puedo creer que estés aquí. -Grite de emoción.

-Emily, pase a verte por un rato, ya quería verte, estar contigo. -Rio bajo.

Me abrazo, y nos dirigimos hacia el campo que estábamos acostumbradas a ir. Ahí platicamos, reímos, bromeamos, pase un rato agradable con ella, como todos cuando estoy con ella, le platique sobre mi atracción que sentía hacia Sebastián, hasta que surgió un tema que me sorprendió bastante.

-Emily, ¿Puedo confesarte algo? -Pregunto Paola.

-Claro que sí, sabes que puedes confiar en mí. -Sonreí.

-Prométeme que después de esto, no te vas a alejar de mí y que no te burlaras. -Dijo preocupada.

- ¿Qué hiciste?, ¿No lo hare?, dime que tienes.

-Est... Estoy enamorada de ti Emily. -Trago saliva y tomo aire.

No sabía qué hacer, me sorprendió mucho que me dijera eso.

- ¿Enserio?

-Sí, desde que estábamos en la primaria, cuando nos sentábamos juntas, quería negarlo pero no pude Emily, no sabías lo celosa que estaba cuando hablabas con Edwin, o cuando me platicaste que fuiste novia de Alex, y ahora de Sebastián. -Comenzó a llorar.

- ¡Dios!, Paola esto no me la esperaba, pero tranquila no me burlare tu secreto está guardado conmigo, no me voy a alejar de ti. -Sonreí.

-Gracias, me siento bien al decirte eso. -Rio.

Ambas nos miramos a los ojos, sonreímos y seguimos hablando.

-Sabes que a la mierda nuestra religión.

Se acercó hacia mí y me beso, me deje llevar fue algo sorprendente, y ese beso me encanto, mi corazón latía a gran velocidad, fueron 15 segundos de adrenalina.

Al acabar me miro a los ojos, pero salió corriendo.

- ¡Paola!, espera... ¡Joder!, ¿Porque lo hiciste? -Grite desesperada.

Trate de alcanzarla pero mis intentos fueron en vano, decidí irme a mi casa a pensar en lo que iba a hacer, no cene, solo estuve en mi habitación.

¿Paola?, ¿Siento algo por ella?, en mi mente de vinieron muchos recuerdos de ella, todo lo bueno que ha hecho por mí, todos esos momentos que pasábamos juntas. ¿Puedo sentir algo por ella?, claro que sí, pero mi mente estaba confundida.

No podía poner mi mente en otra cosa más que en Paola, al día siguiente me vi forzada a ir a la escuela, le quería contar a Abigail sobre eso pero... me sentiría incomoda, además lo tomaría mal, pero al que se lo conté fue a Sebastián, no le dije nada de aquel beso, solo le dije que sentía una atracción hacia Paola.

Sebastián me apoyo en todo, me dio buenos consejos, y me ayudo a contárselo a Abigail, de mi posible decisión con respecto a Paola, Abigail se sorprendió bastante y tenía temor, ¿Porque?

(...)

Cada día que pasaba con Paola era especial, ambas queríamos intentarlo, solo que tenía muchas dudas.

Una noche Paola me invito a cenar, cuando llegamos al restáurate tomadas de la mano, la gente nos veía con mucho asombro. Ambas nos sentamos en una mesa y cuando llego el mesero note que no era muy feliz con su vida.

Así que fui con él para platicar un rato mientras Paola iba al sanitario.

- ¿Porque tan triste?

- ¿Cómo sabes que estoy triste? -Pregunto.

-Se nota en tu mirada, ¿Quieres platicar de algo? -Estire mi mano.

-Sí, gracias... Mira yo arruine mi vida por una estupidez que hice, y mira ahora veme de mesero.

- ¿Cuál fue la estupidez?

-La curiosidad, me acosté con una mujer que no amaba, ahora tenemos un hijo y los dos tenemos que luchar para que el este bien, no tenemos una profesión, ambos acabamos la preparatoria. -Soltó en llanto.

-Lo siento mucho. -Interrumpí.

En ese momento llego Paola, y el mesero se alejó. Paola y yo tomamos por un rato, yo llegue al grado de no poder sostenerme, así que Paola me llevo a su casa.

Cuando estábamos en su casa, en su habitación, pasaron cosas que no debían pasar, ella puso una canción en su celular, Mondo Bongo - Joe Strummer & The Mescaleros. Ella y yo empezamos a bailar ¿Extraño no?, al acabar me recosté en su cama, ella se subió arriba de mí. Si a si es... estuvimos a punto de...

Empezamos a besarnos, ella se paró y empezó a quitarse el suéter de ahí otras prendas, me sorprendí al ver todo de ella, sus piernas que parecían que un escultor las había creado con todos los detalles perfectos, ella prosiguió, yo tome conciencia mientras pensaba en alguien, así que decidí parar con esa locura.

Decidí tomar mis cosas y retirarme de su casa, me sentía muy apenada, cuando llegue a mi casa mi madre estaba en la sala esperándome.

- ¿Dónde estabas? -Pregunto mi madre.

-Estaba con Paola.

-Apestas a alcohol, y además ya viste la hora.

-Sí, son las 2 de la mañana, madre quiero acostarme, mañana me regañas me castigas y me haces todo lo que quieras, pero por ahora déjame tranquila. -Dije histérica.

Mi madre se quedó callada, así que fue hacia mi habitación, pero no podía dormir, estaba cansada quería dormir pero no podía.

En ese momento tome una decisión la cual era alejarme por un rato de Paola, pensaba que sería lo mejor así que puse en marcha esa idea.