Bea: ¿Sabes cómo sucedió?-murmure girándome para mirarlo-
Alex: Por lo que escuche un vecino vio todo, Austin estaba esperando luz verde, entonces arranco en amarilla y un auto que venia del lado derecho salió, porque estaba estacionado y lo choco.-mordí mi labio mientras miraba el piso-
Bea: Me siento tan estúpida ¿Qué tal si no vuelve…?-no pude terminar la frase- Lo trate tan mal, realmente me arrepiento.
Alex: Yo también, fui un… idiota al dejarlo solo… Oye ¿Qué sucede?-pregunto poniéndose de pie, mire hacia la puerta de la habitación de Austin donde tres doctores entraron-
Michele: ¿Qué pasa?-le pregunto a un doctor que justo estaba por entrar a la habitación-
Doctor: Algo salió mal, no responde, pero tranquila intentaremos hacer todo lo posible… solo hay que tener fe y esperanza.-eso era todo, Michele volvió a derrumbarse en un llanto que inundo todo el pasillo del hospital-
Bea: ¿Cómo que no responde?-dije alterándome-
Doctor: Estamos seguro que tuvo un golpe en la cabeza, esto podría dejar lesiones, tiene una costilla fisurada y un pie esginzado… pero no sabemos si podría despertar.-mi mundo comenzó a derrumbarse-
Bea: ¿Cómo que no saben si podría despertar?-murmure con la voz quebrada-
Doctor: Lamentablemente está entrando en un estado de coma.-dijo en tono bajo- Lo lamento mucho, disculpen.-Alex paso una mano por mi hombro, me di vuelta bruscamente y lo abrase-
Bea: No quiero, Alex, no quiero perderlo… No para siempre, esto es una pesadilla.-murmure sollozando sobre su pecho.
Los días pasaban y era la misma rutina de siempre, estar en clases, salir de la academia e internarme en el pasillo del hospital a esperar. Quería que realmente despertara, esto me mataba, estaba decayendo. Entrar a su habitación y verlo dormido, y saber que estaba muriendo.
Narra Austin:
Podía escuchar, sí, pero no veía nada, más que una manta de oscuridad frente a mis ojos. No entendía lo que las voces decían, eran como murmullos. Sentí como los dedos de mi mano derecha se movían, era la primera parte de mi cuerpo que sentía. Luego mis pies y luego mis ojos, comencé a abrirlos lentamente. Todo era blanco, mis ojos se volvieron a cerrar a causa de la luz que entraba por algún lado del lugar de donde estaba. Volví a abrirlos y recorrí mi mirada por el lugar.
- ¿Austin?-escuche la suave voz de una chica a mi lado, la mire y ella llevo sus manos a su boca- ¡oh por dios! ¡Haz despertado, haz despertado, gracias a dios!
Austin: ¿Dónde estoy?-estaba confundido, cansado y muy, demasiado, confundido –
Bea: En el hospital... Estabas en coma... Hace casi tres semanas.
Austin: ¿Que? Casi un mes.-acerco su mano a mi cabello y me acarició-
Bea: Si, Aus, pero... Estas aquí.-sus ojos se llenaron de lágrimas- creí que te perdería.-su voz se quebró, entonces recordé todo, no todo pero si lo que había pasado últimamente en mi estúpida vida-
Austin: Eso es lo que querías ¿o no es así?-ella negó con la cabeza mientras las lágrimas caían de sus mejillas, apretó sus labios para no romper en llanto pero aun así no lo evito- no llores... Por favor.-busque su mano hasta que la encontré, rose sus dedos y luego tome su brazo y tire de ella, rápidamente me abrazo o algo así.-
Bea: No digas eso.-contestó sollozando - no puedo estar sin ti, Aus, te he extrañado demasiado no te imaginas cuanto.-beso mi mejilla tres veces y luego mi frente –
Austin: Yo también te extrañe.-murmure, ella se separó de mi-
Bea: Te amo.-murmuro secándose las lágrimas de sus mejillas-
Austin: Eso es lo más lindo que he escuchado hasta ahora.-intente sonreír-
Bea: Debo llamar al doctor para decirle que has despertado.-las lágrimas aún seguían cayendo de sus mejillas, tome su mano y la apreté-
Austin: ¿Sabes? Ha sido tan extraño… podía escuchar sus voces, pero no recuerdo exactamente nada.-me miro confundida- cuando... Estaba en coma.
Bea: ¿Qué?
Austin: Yo también te amo, recuerdo que la habías dicho-la había escuchado, sí ¿o acaso había sido un sueño?-
Bea: ¿Podías escuchar?
Austin: A veces, como dije no recuerdo todo.
Bea: Me alegro tanto de que estés despierto… no tienes de que preocuparte estarás bien.-acarició mi mano mientras sonreía - debes descansar ¿okay? Yo… llamare al doctor.-señalo la puerta y camino lenta y torpemente a esta, me miro una vez más y luego desapareció de la habitación-
Narra Bea:
Bea: Alex… ¿Dónde están los demás?-pregunte, él se puso de pie y me miro-
Alex: Les dije que fueran a comer, estaban muriendo de hambre, entonces, les dije que me quedaría contigo aquí mientras ellos comen… ¿estabas llorando?
Bea: Debo decirte algo.-mordí mi labio- Austin despertó.-su mandíbula amenazaba con caerse al piso-
Alex: ¿Qué? No estoy para bromas…-hizo una pausa- no es una broma ¿no es cierto?-negué con la cabeza y él se echó a reír- ¿Enserio? ¡Jesús!-llevo sus manos a su cara y luego se abalanzo a mí para abrazarme- Dios gracias, oh por dios, me dará un infarto.
Bea: Si, despertó, despertó… hay que llamar al doctor, luego entraremos a verlo.-el asintió limpiando sus lágrimas de emoción-
Alex: Si, eso.-contesto caminando-
(***)
Doctor: El estará bien, es un milagro que haya despertado. Ahora solo tiene que descansar y cuidarse, todo está bien por ahora.-sonreí e hice un movimiento con mi cabeza-
Bea: Gracias doctor. ¿Podemos pasarlo a ver?
Doctor: Claro que si pueden pasar, si me disculpan… es hora de almorzar-asintió con la cabeza y luego comenzó a caminar. Hice un gran esfuerzo para que Alex no se subiera a la cama de Austin y comenzara a saltar, lo primero que hizo en entrar a la habitación fue abrazarlo o bueno, algo así parecía-
Alex: Jesús Austin, creí que… no importa, maldita sea te he extrañado.-Austin sonrió y dirigió su mirada a mí y luego volvió a mirar a Alex-
Austin: Créanme que yo también los he extrañado.
Alex: ¿Cómo fue? ¿Has estado en el cielo? ¿Eras un fantasma?-mire a Alex frunciendo el ceño-
Bea: ¡Alex! ¿Qué estás diciendo?
Alex: Lo siento, siempre quise saber a dónde ibas si estabas en coma.
Austin: No recuerdo, Alex…-hizo una pausa, como si algo hubiera pasado por su mente- ¿Y mamá?-pregunto-
Bea: Salió a comer hace un rato…-mordí mi labio- ella ha estado aquí desde tu accidente.-murmure-
Austin: ¿Deberás?-asentí con la cabeza- La extraño.-sonreí sin mostrar mis dientes-
Bea: Y ella a ti, Aus.-el celular de Alex comenzó a sonar y él se dio vuelta para sacar este de su bolsillo-
Alex: Es Lola… le diré que has despertado.-sonrió y camino hacia la puerta, salió de está dejándonos solos a Aus y a mí-
Austin: ¿Y… ha pasado algo interesante estos últimos días?-pregunto rompiendo el incómodo silencio-
Bea: Mmm… algunas cosas.-sonreí y tome mi cámara de un mueble- Mira, tomamos algunas fotos… para cuando despertaras pudieras verlas.-camine hacia él y me senté en la silla que estaba al lado de su camilla. Él se acomodó un poco sobre la cama e hizo una mueca de dolor- ¿Estas bien?
Austin: Si, solo que… no es nada.
Bea: ¿El doctor te explico cuáles son tus… ya sabes, tus golpes?
Austin: ¿Hablas de una costilla fisurada y un tobillo fracturado?-me miró fijamente-
Bea: Si eso, te contare más o menos lo que se Aus.-deje la cámara sobre la mesita de luz y lo mire- Según Alex me conto hace semanas atrás, un vecino vio el accidente ¿lo recuerdas?
Austin: Quise cruzar y un auto me choco.-contesto mirando hacia la nada-
Bea: Si lo recuerdas. Según un doctor, el manubrio… fue el que fisuro tu costilla.-arrugo su nariz con un gesto de desagrado-
Austin: ¿La moto?
Bea: Bien… estaba destrozada.
Austin: ¿Qué quieres decir con estaba?-pregunto, me miro fijo y sonreí-
Bea: Mi padre tiene un amigo que trabaja en un taller entonces yo…
Austin: No Bea.-me interrumpió y asentí- No ¿Enserio?
Bea: Le conté tu historia, digo, lo del accidente entonces no nos cobró nada, Austin, debía aprovechar la oportunidad.-el sonrió y bajo su mirada-
Austin: ¿Por qué lo hiciste? Creí que me odiabas.
Bea: No te odiaba, solo estaba enojada, pero… me di cuenta de cuanta falta me hacías, Aus.-el volvió a mirarme- A veces las personas cometemos errores y no nos damos cuenta, hasta que algo malo pasa entonces en ese momentos si nos damos cuenta del error que hemos cometido.
Austin: Gracias, enserio, tal vez ni siquiera lo merezco…
Bea: Tal vez tu no lo hayas visto, Austin, pero mientras tú estabas en coma… ese pasillo de haya afuera estaba lleno de gente y solo por ti, tal vez ahora este vacío solo porque es hora de almorzar pero no te das una idea de las todas personas que te quieren.
Austin: ¿Y tú estás en esa lista?-murmuro mirándome, una sonrisa tímida curvo mis labios-
Bea: Yo estoy en esa lista.-afirme-
