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140. THE WITCHER

GERSKIER

Las semanas fueron pasando y con ello los inviernos. Geralt hacía mucho que no sabía nada del que era su bardo. Lo había perdido hacía mucho por explotar la ira contenida en su dirección. Y aunque quiso buscarlo, no solo porque era omega y hombre, para protegerlo no había dado resultado. Había dejado de ir a Kaer Morhen en los inviernos, ya que quería aprovechar todo el tiempo en la búsqueda del bardo. Todos los rumores lo tuvieron dando vueltas de una punta a otra, encontrando a Ciri por el camino y llevándose con él para protegerla. Y ese era el único motivo por el que volvía a la fortaleza, la niña necesitaba ser entrenada y él no era el mejor profesor. Geralt bajó de Roach antes de ayudar a Ciri a bajar de la yegua. Al brujo no le hizo falta llamar a la puerta, esta fue abierta por Vesmir que lo miró feliz antes de hacerle una pequeña reverencia a la princesa. Cirilla respondió ligeramente avergonzada acercándose a Geralt y cogiendo su mano para estar cerca del brujo.

- Me alegra verte después de tantos inviernos.- Dijo dejándole pasar.- Por suerte para ti has elegido el invierno que solo reunirá a dos de tus hermanos, así que estaremos tranquilos.- Dijo Vesmir cerrando la puerta viendo como la princesa miraba todo sorprendida.

- ¿Quién?- Preguntó Geralt más tranquilo, uno de los miedos que había empezado a tener era que Cirilla se tuviera que relacionar con sus hermanos más jóvenes, esos serían malas influencias para su niña de la sorpresa.

- Lambert y Eskel.- Dijo simplemente el brujo mayor, Geralt asintió entrando a la yegua y cogiendo sus cosas antes de caminar a la habitación de ambos.

Vesmir le indicó a Geralt que la princesa podía usar el cuarto contiguo al suyo, así podría tenerla controlada, pero tendría su propio espacio. Y aunque a Geralt no le gustó perder de vista a la niña, aceptó eso. Los tres bajaron al comedor, mientras Geralt se mantenía en silencio, odiándose por no estar buscando a su bardo. Cirilla avasalló a Vesmir con preguntas sobre la historia de los brujos, la fortaleza y sobre la historia de Geralt. Cuando entraron el Brujo se detuvo en la puerta sorprendido, hacía por lo menos cinco inviernos que no venía a la fortaleza, y estaba realmente sorprendido por el cambio de sus hermanos, pero sobre todo el tema que su bardo estaba sentada al lado de su hermano Eskel, Jaskier estaba riendo mientras acariciaba el pecho del brujo de la cicatriz. Cuando ambos cruzaron la mirada pudo ver como la sonrisa y la felicidad de Jaskier se fue apagando por segundos, llamando la atención de sus dos hermanos. Eskel lo miró serio antes de abrazar la cintura de Jaskier pegando más a él, el bardo inconscientemente apoyó su cabeza en el hombro de este, sintiéndose protegido. Geralt gruñó antes de sentarse al lado de la peliblanca que seguía hablando emocionada con todo.

- Cállate.- Le dijo a la niña de mal humor, esta lo miró con una ceja alzada antes de resoplar rodando sus ojos y volviendo a conversar con Vesmir.

Geralt gruñó molesto antes de ver como Eskel bajaba un poco su cabeza y hablaba en el oído del bardo. Este asintió con suavidad levantándose y esperando que el brujo lo hiciera para coger la mano del brujo y salir de allí rodeado por el brazo de este. Geralt no los perdió de vista ni un segundo, solo la puerta cerrándose evitó que les pudiera seguir. En su cabeza solamente rondaba una pregunta, y era como se había llegado a encontrar. No quería pensar que Eskel lo estuviera obligando o algo por el estilo, conocía a su hermano y al bardo, eso no era posible.

- ¿Te estarás preguntando cómo se conocieron?- Dijo Lambert mientras bebía de su jarra de cerveza, Geralt lo miró esperando que siguiera con esa explicación.- Jaskier llegó a nosotros malherido y con necesidad de ayuda. Lo sanamos y protegimos, dejándole pasar un celo tranquilo.- Dijo Lambert sin mirar aun a su hermano, pero habiéndose ganado las miradas de los otros dos de la mesa.- Eskel y yo nos quedamos juntos para protegerle durante una temporada, nos explicó lo que había pasado contigo.- Dijo mirando con rabia a Geralt que tragó saliva incómodo.- Pero llegó el momento que Eskel y yo comenzamos a pelearnos demasiado, así que por el bien del omega decidimos que lo mejor era que se fuera con Eskel, él lo protegería mejor que yo.- Dijo totalmente sincero consiguiendo que Geralt comenzará a entender la relación que Jaskier y Eskel tenían.- Están enamorados Geralt.- Dijo finalmente Lambert totalmente herido, ya que él también se enamoró del bardo el tiempo que estuvieron juntos.- No interfieras, ya le has hecho suficiente daño.- Dijo antes de levantarse golpeando la mesa y saliendo del comedor.