Viktor Volkov, hijo de una familia de alfas acomodados en Rusia, como su linaje lo marcaba fue criado como un alfa en toda regla, firme y de gran valor, a los 18 años decidió participar en un programa de intercambio y quien lo diría termino en una ciudad llena de basura como comisario de policía, no se quejaba le pagaban bastante bien y tenía mucha suerte en el casino, su vida era tranquila dentro de lo que se podía esperar para alguien de su profesión le gustaban las cosas simples, un buen vaso de vodka frío, un libro, el café negro y la paz de su casa y compañía de su gata, su casa era su refugio, su hogar donde podía encontrar paz después de tan caóticos días, el nunca se consideró un alfa con un lívido particularmente alto sin embargo últimamente se sentía como un puto crio, es decir se calentaba con mirar a cierto individuo, nunca se intereso particularmente en los omegas, de hecho nunca se involucró con uno, todos sus encuentros habían sido con betas, de hecho nunca entendió porque sus compañeros perdían la cabeza por los omegas, o por lo menos no lo entendía hasta que ese maldito olor a cerezas y cigarrillo llegó a su nariz, se sentía como un imbécil por quedarse mirándolo, era más que obvio que aquel omega estaba fuera del alcance de cualquiera, pero no pudo evitar imaginarlo de maneras muy poco sanas.
Llegó a su casa después de un día agotador, como siempre su gata Mika fue quien le recibió, tras darle de comer fue a la ducha, el entrenamiento matutino había sido duro y más haberlo sentido encima de el, Conway no era ligero, pero tampoco era tan pesado, su mente divagaba y lo hizo durante todo el día, esa necesidad insana de tenerlo en su campo de visión en cada momento lo estaba carcomiendo, lástima que estaba muy consciente de su posición así que sería algún tipo de crush o una mierda de esas, salió de la ducha y podía escuchar claramente el movimiento del departamento de junto, sabía que tenía un vecino nuevo, no había tenido la oportunidad de conocerlo aún, pero ya tendría tiempo, camino lentamente por su cocina y tras servirle comida a su gata se dirigió a su balcón, necesitaba aterrizar un poco, la lectura estaba ayudando, o a lo mejor sería que era su segunda botella de vodka, realmente no le importaba ahora solamente sentía un tipo de paz extraño que prefería conservar al levantar la vista de su libro quedó en shock ahí estaba el, el causante de sus malestares, con su desnudo y bien definido torso al aire, joder, Dios lo odiaba definitivamente, sin querer se le quedó mirando, estaba cubierto de cicatrices, pero la que le llamo la atención fue en el cuello allí donde debería estar la marca de su alfa se encontraba una cicatriz enorme que al parecer tardaría demasiado en cicatrizar, lo vio volver al interior dl departamento y el se quedó ahí mirando a la nada y analizando, ahora que lo recordaba, Rodríguez había dicho que el era viudo, eso sin duda debió haber sido duro para el omega, el no sabia mucho de enlaces ni de marcas, pero una de las cosas que se enseñaban en biología elemental era "la marca" que generaba un enlace único entre alfa y omega, una unión más allá de lo legal, la marca tenía sus propias reglas, y variaba en cada relación, pero una cosa era común, un omega vinculado una vez que su alfa moría, tenia pocas probabilidades de sobrevivir, sin embargo aquí estaba el, este omega era un titan sin dudarlo, agitó la cabeza para quitar esos pensamientos y volvió dentro, quizás necesitaba dormir.
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-Jack...cariño...Jack?-abrió los ojos con la respiración agitada y miró hacia el reloj de pared recién instalado, era casi hora de despertar, se sentó en la cama y se llevo las manos a la cabeza intentado controlar su respiración, malditas pesadillas, sin quererlo casi su mano bajo hasta su cuello, ahí estaba esa cicatriz, era enorme y horrible, pero era lo mejor que pudo quedarle luego de que su marca comenzara pudrirse- carajo- habló en voz alta, la habitación oscura y el silencio le rodearon y por un instante se sintió pequeño, odiaba esos momentos, no quería sentirse débil, lo odiaba, el nunca lo fue después de todo, se paró y fue directo a la ducha, miró su teléfono y ahí estaba el reporte del día anterior de Michelle, sonrió mirando las fotos de sus hijos, Gustabo con la cara llena de pintura y horacio con un dibujo sonriendo a la cámara, pronto estarían ahí con el, sin embargo no podía no sentirse inseguro con tenerlos alrededor de nuevo, cuidarlos solo, el no sabía bien como ser padre por si mismo, pero lo intentaría, aunque primero debería comprar comida, tener la despensa vacia con niños no era buena idea.
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La comisaria de los Santos era un circo, en eso estaban de acuerdo todos, Volkov estaba parado frene a una pareja de idiotas que no podían articular dos frases coherentes, con una vena palpitando en la sien, suspiro frustrado y vio a su jefe llegar con sus gafas de sol, su atención se desvió de inmediato es que no era para menos- iros a tomar por culo, tengo trabajo que hacer- les dijo a los tipos y los dejó hablando solos, fue tras el mayor
-señor, buenos días, tiene los informes en la mesa, el alcalde ha pedido una reunión con usted para elaborar un plan de contingencia, los verdes están saliéndose de control- dijo serio
-buenos días Volkov- hablo casi con pereza- verdes? Que nombre patético para una pandilla- bosteza- dile al viejo que la reunión será en la tarde, ahora reviso los informes y no sabá que los comisarios eran secretarias- se burló- sal de aquí y organiza a los simios de la malla y que se pongan a trabajar, los cadetes están a tu cargo, así que espero un informe detallado de desempeño para el viernes- lo miró fijo y Volkov sintió una especie de escalofrió recorrerle, asintió y salió de la oficina, organizó la malla y su pareja de patrullaje sería Rodríguez, que lo saludó con pereza y al parecer el cuerpo adolorido -Joder tío el entrenamiento de ayer me dejo torcido- hablo el español- y el Box de hoy, el super va a matarnos- suspiró, Volkov conducía y se animó a hablar
-Rodríguez, usted me había comentado algo sobre el historial del jefe, lo recuerda?-
-ah si, viudo y poco más además de que al parecer es un puto terminator dice poco, no me digas que estas interesado, digo después de todo el tio no huele a alfa y tampoco creo que le venga mal tener en quien distraer sus frustraciones, si sabes a lo que me refiero- habló jocoso el de barba
-no diga estupideces Rodríguez, es nuestro jefe y considero una falta de respeto que se refiera a el de esa forma-
- pero si hasta lo defiendes, venga ya hombre, si no fuera porque no es mi tipo también estaría babeando como tu, digo tiene un culo impresionante, y es atractivo, aunque vaya tela el carácter- dijo riendo, Volkov se quedó callado, a el el carácter del americano no le parecía del todo malo....quizás si estuviese solo un poco colado por su jefe....
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Volvi, perdonen la ausencia, el trabajo me deja agotada, gracias por seguir aquí, espero que esten listos para el duo desastre en miniatura
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Cherry Cigarettes 《VOLKWAY》
Fanfictionlos alfas son fuertes y fieros, los omegas dulces y delicados...oh bueno con sus excepciones Volkway Conway bottom