El Rey en El Norte

Salón Del Trono

A las dos meses, Rhaegar Targaryen secuestró a Lyana Stark en el torneo que se celebró en Harrenhall, ella era la prometida de Robert Baratheon, aunque ese compromiso no le gustaba ni a Brandon Stark ni a su hijo.

Rickard Stark el abuelo de Marcus Stark le explicó a su nieto e hijo el motivo de ese matrimonio entre Lyanna Stark y Robert Baratheon, haciéndoles ver que ese matrimonio sería fructífero para el Reino del Norte, ya que mejoraría la relación entre el Norte y las Tierras de la Tormenta.
Aunque Rickard Stark creyese firmemente en su nieto, sabía que él camino para levantar el Norte de sus cenizas no sería fácil, por lo tanto desde su punto de vista las alianzas eran un medio para un fin, aunque eso significase hacer ciertos sacrificios, como era el caso de su hija Lyanna Stark.

Desde su punto de vista Robert Baratheon era un buen pretendiente, porque él era el Señor de Bastión de Tormentas y de Las Tierras de la Tormenta, un caballero y un excelente guerrero.
Pero su hijo y nieto no estaban de acuerdo con su decisión, y no lograron hacer que él cambiase de opinión.

En el Norte los miembros de las casas nobles, tanto hombres como mujeres, tenían la libertad de elegir con quién podrían casarse, pero habían veces que si el jefe de la familia lo decidía, se podría arreglar un matrimonio de conveniencia, era raro el hecho, pero habían veces que se hacía. Como era el caso de Robert y Lyanna.

Este giro de los acontecimientos hizo que Rickard y Brandon Stark tuviesen que ir a Desembarco del Rey, a pedir la devolución de Lady Lyanna Stark al Rey Aerys II, pero este sentenció a muerte a ambos hombres y a todos los norteños que los acompañaron, ya que según el Rey eran culpables de traición a la corona por atentar contra la vida del príncipe Rhaegar Targaryen, cosa que no era cierto.

Ese acontecimiento fue un duro golpe para el Reino del Norte ya que no solo habían perdido a su gobernante, sino a su heredero, además de que fue un duro golpe para Marcus y su madre Ashara.

Marcus Stark no solo había perdido a su abuelo, sino también a su padre, y él era muy unido a ambos. Ashara Stark había perdido a su marido, la persona que más quería y con la que había elegido pasar el resto de su vida juntos.
A pesar de los acontecimientos ella era consciente que venía tiempo difíciles para el Norte, ahora más que nunca debía estar del lado de su hijo apoyándolo, ayudándole en todo lo que ella pudiese y protegiendole a toda costa, ya que él ahora no solo era la cabeza de familia de la Casa Stark, sino el gobernante legítimo del Reino del Norte, él ahora era el Guardián del Norte.

Marcus Stark había mandado llamar a todos los Lores de las grandes casas del Norte, a reunirse con él en el salón del trono del Norte de Invernalia. Porque el Rey Aerys II había ordenado que Marcus Stark acudiera a Desembarco del Rey a hincar la rodilla, de no hacerlo sería considerado como traidor al Rey de los Siete Reinos, lo que supondría la guerra del Norte contra los seis reinos restantes.

En la sala del trono de Invernalia se hallaba sentado sobre el trono Marcus Stark, a su izquierda se encontraba su madre Ashara Stark junto a su tío Benjen Stark, a la derecha de él se encontraba el Maestre Luwin y Ser Rodrick, unos escalones más abajo del trono se hallaban los pupilos de su padre, Ser Noth Cerwyn a la izquierda y Ser Beren Tallhar a la derecha, que hasta apenas tres semanas atrás fueron nombrados caballeros, por su padre antes de marcharse a la capital, con el objetivo de proteger a su hijo y futuro Lord Stark.

Adelante del trono unos peldaños más abajo, se hallaban de pie todos los Lores de las casas del Norte.

Lord Jorah Mormont (su tío), Lord Harrison Karstak, Lord Jon Umber, Lord Wyman Manderly, Lord Galbart Glover, Lord Howland Reed, Lord Barbery Dustin, Lady Aurora Clint, Lord Rodrik Ryswell, Lady Cassandra Hornwood, Lord Jonelle Cerwyn, Lady Eddara Tallhart y por último Lord Rose Bolton.