Capítulo doce

327 39 0
                                    

Rose terminó de colocar la tapa de la cámara instantánea que le quitó a Izz y la encendió, le robó dos cámaras que en realidad no era robo porque el azabache se las regaló pero igual era divertido decirlo así, el rubio se adentró a la habitación llevando con él las guitarras que acababa de cambiarles las cuerdas, Axl le apuntó con la cámara sacando una fotografía, el ruido hizo que el menor le volteara a ver dejando de lado los instrumentos.

Se acercó al ojiverde viendo como tomaba la foto que salía de la ranura, esperó varios minutos hasta que la imagen se descubrió, el menor se le quedó viendo con una mueca mientras que el pelirrojo mantenía su sonrisa al ver la imagen del contrario distraído, dejó las cosas de lado sobre el colchón.

—. Debo cambiarte las vendas antes de ir con tu padre. — Le avisó notando como el gesto de Cobain cambiaba a uno preocupado, no quería que se pusiera así pero no había opción.

—. Sigo creyendo que no es necesario, si me dieron el trabajo en la biblioteca puedo seguir ayudando yo y decirle que sigo en la cafetería, ¿No? — Se le quedó viendo al mayor cuando salió de la habitación, el pelirrojo regresó con el botiquín y unas vendas limpias sentándose a su lado.

—. ¿Le vas a pedir facturas? — Empezó a quitar la tela que cubría las heridas del rubio con cuidado, la dejó a un lado, por inercia sus pulgares rozaron con las marcas sin tocar las suturas, ¿Por qué sentía un nudo en su garganta cada vez que las veía? Kurt sintió un revoltijo en su estómago.

—. Yo... No podría... Deja de tocarlas, se ven horribles. — Pidió apartando sus brazos, Axl de verdad sentía tristeza al no ver realmente un cambio significativo aún, pero debía ser paciente, a penas llevaba dos terapias.

—. Entonces no cambiaré de opinión. — Tomó el bote de agua oxigenada y una gasa, tomó de nuevo sus brazos limpiando las heridas, evitando tocar las suturas, cuando terminó le colocó pomada y vendó de vuelta sus antebrazos.

—. Axl... — Intentó convencerlo pero el pelirrojo estaba demasiado firme, vio como dejaba todo de lado y tomaba de nuevo la cámara para encenderla.

—. Ven. — Lo jaló hacia él y le abrazó para estirar el brazo con el que sostenía la cámara, tras haber capturado una foto bajó la misma y soltó al rubio para poder tomar la imagen que salía de la ranura.

—. No vas a dejar que te contradiga respecto a eso, ¿Verdad? — Los orbes de color esmeralda se fijaron sobre él, se sintió intimidado a pesar que no era la intención del mayor.

—. No, ya habíamos hablado sobre eso. — Se le quedó viendo a la imagen plasmada en aquel material especial para la cámara, todo estuvo silencioso por varios segundos, Cobain esperaba algo más pero no sabía qué realmente. —. Debemos irnos, deja las vendas en la lavadora y yo iré por mis cosas, tu padre sabe que vamos, ¿No?

El menor recogió las vendas asintiendo, salió de la habitación dejando solo al colorín, Axl se levantó sacando su billetera de su bolsillo, guardó la fotografía dentro de esta y la regresó a su bolsillo saliendo de la habitación, fue a la sala a buscar su mochila, ya la tenía lista desde temprano para no olvidar nada.

El menor apareció por el pasillo acomodando sus vendas, fueron a la puerta saliendo del departamento, se encaminaron hacia el ascensor presionando el botón que indicaba recepción, Kurt no tardó en abrazarse al brazo de Rose cuando los números iban bajando, suponía que era normal que le tuviera miedo a Erin, después de todo ella provocó su última crisis con palabras crueles.

Pasaron a recepción notando como Erin se les quedaba viendo con una mueca de disgusto, el rubio se encogía en su lugar y evitaba voltear a verla, cuando por fin estuvieron fuera del complejo se encaminaron al borde de la acera para poder pedir un taxi, uno apareció no mucho después y ambos subieron a los asientos traseros.

—. ¿Cómo fue que pasó lo de tu hermana? — El ojiazul se quedó inmóvil por varios segundos, nadie le preguntaba sobre su hermana, todos tenían miedo de saber qué pasaba en su vida, pero el mayor tenía curiosidad.

—. No creas que mis padres fueron irresponsables hasta ese punto, ambos teníamos nuestras vacunas al día, pero nunca supimos qué fue lo que pasó porque luego de regresar de su fiesta de quince años apareció muy enferma, pasaron casi cinco días en que empezó con fiebres y dolor de cabeza, estuvo así casi diez días para luego perder sus reflejos... La parte difícil fueron los dolores y la parálisis flácida que terminó haciendo que nos diéramos cuenta que era grave, mi madre ya había fallecido y mi papá no sabía qué hacer, yo ya me había ido de la casa... Cuando se recuperó creí que todo había terminado hasta que hace dos años empezó con síntomas de síndrome pospoliomielítico. — Tras esa explicación sintió sus orbes llenarse de lágrimas, cada vez que tenía que recordar esos duros meses de su hermana en tratamientos le rompían aún más el alma.

—. ¿La llevaron al médico? — El taxi se detuvo frente a la dirección, era una zona de casas pequeñas de muy mala apariencia, pagaron al conductor al bajarse del transporte.

—. Sí... Pero, Axl, ¿Qué puedo hacer? El polio no tiene cura, ella tenía sus vacunas y aún así... No quiero perderla, perdí a mi madre y si me quedó sin mi hermana... No podría seguir... — Su voz se rompió mirando hacia la vivienda, se cubrió la boca con la palma de su mano esperando que ninguno de los vecinos le viera.

—. Hey, tranquilo, estoy seguro que ella puede seguir adelante, no pienses en negativo o siempre llegarás a la misma conclusión. — Le tomó por las mejillas buscando sus orbes azules desbordándose en llanto, Kurt sintió un poco de alivio ante el tacto del mayor.

—. Las conclusiones siempre me hacen asumir que me voy a quedar solo... — Retuvo un sollozo sorbiendo su nariz, Axl acarició sus mejillas con su pulgares y negando con su cabeza.

—. No pienso dejarte solo, vamos, ¿Si? — El menor asintió cuando el pelirrojo apartó sus manos de su rostro, se encaminaron a la entrada de la casa y Cobain le dio unos golpes a la vieja madera que conocía a la perfección.

—. ¡Kimberly! ¡Apresurate, por dios! — Se escuchó la voz de un hombre gritando con molestia, Axl hizo una mueca ante la brusquedad que utilizó, cuando la puerta se abrió sintió su corazón partirse en mil pedazos, Kimberly era la hermana del rubio y llevaba órtesis en sus piernas y apoyo de unas muletas.

Tenía síndrome pospoliomielítico, no solo síntomas.

໒❛ 𝟒 𝐌𝐎𝐑𝐀𝐍𝐓 ♡ ❫ ◗  ʚ₍ᐢ 𝙠𝙪𝙧𝙩𝙖𝙭𝙡 ᐢ₎ɞ ᵕ̈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora