My love

Epílogo pt.1

Papá y Sam

Desde que tengo memoria, no he sido feliz.

Los pocos momentos felices que recuerdo, son con mi madre, a pesar de todo siempre trató de hacerme feliz.

Talvez fue por eso que papá hizo eso.

—Escúchame Sam, las mujeres como tu madre no sirven para nada, las mujeres no tienen poder, ni voto, ellas están para servirnos ¿Entiendes eso?

Estaba mudo, mis lágrimas no dejaban de caer por la impresión, mi madre, la única persona que me había amado  estaba frente a mi, en el suelo, muerta.

Supongo que todo comenzó desde ese día.

Cuando fui creciendo mi padre se enorgullecía de mi, era fuerte e inteligente, muchas chicas de de mi salón estaban tras de mi y según mi padre eso me hacia un verdadero hombre.

Había crecido con la enseñanza de que todos estaban debajo mio, nadie era mejor que yo, solo mi padre.

Un día, inocentemente le conté a mi padre sobre la persona que me gustaba, era tímido, siempre me ayudaba y siempre estaba dispuesto a hacerlo todo por mi, sin creerse mas que yo.

Mi padre me dijo que esa era la mujer ideal, pero que no confiara mucho pues las mujeres eran engañosas.

Talvez si me hubiera callado y no lo hubiera corregido, el lindo Jeongin hubiera cambiado mi forma de pensar y ahora seria un hombre completamente diferente.

Ese día recibí la paliza de mi vida, me internaron en un hospital y tuve claro que mi padre me mataría si seguía viéndome con Jeongin.

Nos mudamos y mi padre me obligo a estar con muchas mujeres para corregir mi "desviamiento".

Todos los días recordaba a Jeongin y a Mamá, pero a los ojos de mi padre esas personas ya no existían.

Al cumplir los dieciocho lo decidí, las mujeres no me desagradaban, podría hasta decir que soy bisexual, pero simplemente la imagen de Jeongin no se iba de mi cabeza.

Así que puse en marcha mi plan.

—¿Tu cocinaste esto? —escuche su voz molesta y supe la razón.

—No, realmente fue Miriam —mi padre sonrío y comenzó a comer.

—Ella parece ser una buena mujer, aunque ya sabes,   hazle saber su lugar —asentí y vi ansioso como tomaba el té.

—¡Mierda esto es asqueroso! —era tarde pues ya había tomado todo el contenido—. ¡Debes darle un buen golpe a esa mujer por hacer algo tan asqueroso! —de la nada comenzó a toser y sostener su pecho.

—No lo haré, por que ella no hizo nada de esto, fui yo, así como tu mataste a mamá —comenzó a respirar con dificultad y por primera vez me sentí superior a el  ver sus ojos llenos de miedo, era impresionante—. ¿Tienes miedo? Tu me criaste así, es todo tu culpa, aun recuerdo el miedo en los ojos de mamá —empezó a botar sangre por la boca y la expresión de miedo en su rostro me dio risa—. Espero te pudras en el infierno como la mierda que eres.

Lo observé en cada momento  viendo como su vida se iba mientras se ahogaba en su propia sangre, disfruté como veía la vida irse de su cuerpo, hasta que dejó de convulsionar y su cuerpo estaba tendido frente a mis pues, en un momento se había caído de la silla.

Tomé el cuerpo y lo arrastré hasta el sótano, lo llené de gasolina al igual que el resto de la casa, saqué lo necesario y cerré la casa asegurándome de que nadie pudiera entrar hasta que todo se hiciera cenizas.

Caminé hasta la entrada externa del sótano y dejé caer un fósforo encendido, en poco tiempo todo ardía en llamas, quedé fascinado por las llamas, como parecían llevarse todo solo dejando un rastro de muerte a su alrededor.

Me contuve a mi mismo de acercarme y me fui, le hice creer a todo el mundo que había escapado de casa por los malos tratos de mi padre, y deje todo el lugar como si hubiera sido un ajuste de cuentas, fui cuidadoso nadie debería descubrirme.

Estuve viajando por unos días, buscando hasta que finalmente lo encontré.

Miré por la ventana de mi auto como Jeongin se despedía de su madre para ir a trabajar.

Encendí el auto y lo seguí.

En total serán 3 partes, creo jsjs.

~JJ se despide ;3