Son Chaeyoung es una jóven coreana de 16 años que estudia en una secundaria de Corea del Sur, sufre bullying por parte de un grupo de compañeras de su clase porqué segun sus bullys es muy masculina. Pero Chaeyoung se termina enamorando de una de sus...
Estaba devastada, me alegró mucho la compañía de Jeongyeon pero sentía como mi corazón se había roto. Ella aunque se haya confesado diciendo que supuestamente la traía "loca" pero sus acciones dicen todo lo contrario. Como dicen las acciones dicen mas que las palabras y besando a BamBam me dijo todo.
Es verdad que me rompió el corazón pero todavía siento que me gusta, odio que me guste. Me hizo sentir culpable diciendo todas esas cosas de que se sintió celosa y mal porque besé a Jihyo pero ella se besó con Nayeon y BamBam, aunque estaba ebria igualmente me siento mal. No creo que la vaya a perdonar tan facil, quiero obtener venganza. No quiero hacer nada fuerte pero solo quiero hacerla sentir celosa, pero esta vez no me va a poder reclamar nada y agarrarme de la peluca porque yo no me voy a dejar agarrar de gila, tampoco me va a poder reclamar nada por el hecho de que se estaba besando con BamBam y de que no somos nada, ella solo es mi bully.
Hoy es lunes y son las 3 de la mañana, yo debería de estar durmiendo pero estoy pensando en lo mal que me hace estar enamorada de Mina y de las posibles venganzas que podría hacer, no quiero herirla mucho pero si lo hago tampoco es que me tenga que preocupar mucho ya que ella se besa hasta con un perro pero si yo me doy un beso con una sola chica ya me reclama como si hubiera cometido un delito.
Sentía sus cálidos labios recorrer mi cuello con besos y sentía como su mano recorría mis muslos hasta llegar a mi intimidad.
-Ahhh~ Mina- Dije, ya no aguantaba que solo juegue conmigo, realmente la necesitaba.
Empezó a mover sus dedos por encima de mis bragas haciendo que sienta aún más placer.
"¡CHAEYOUNG!" Escuché.
"¡CHAEYOUNG DESPIERTA QUE TIENES CLASES!" Escuché por segunda vez haciendo que me despierte.
-SON CHAEYOUNG DESPIERTA O SI NO TE DESPIERTO A LOS ESCOBAZOS- Escuché gritar a mi madre de nuevo.
-¡YA BAJO A DESAYUNAR MAMI!- Le grité a mi madre, me había despertado de el mejor sueño que tuve hasta ahora, no puedo negar mis sentimientos hacía Mina aunque los niegue.
Me duche y cuándo me miré al espejo grité como si hubiera visto un fantasma.
-¿¡POR QUE GRITAS LOCA!?- Me dijo mi madre, había gritado como si me hubieran pegado un tiro en la teta.
Literalmente era como ver un fantasma por lo blanca que estaba y las ojeras que tenía, tenía mas ojeras que ganas de vivir.
Pero igualmente me vestí como toda diosa que soy y no iba a dejar que todo este asunto de Mina me agarre de los pelos.
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No se de dónde saco toda esta confianza si literalmente de las ojeras que tengo parece que me pegaron dos veces en cada ojo.
Cuándo salí de casa vi a Mina salir de su casa, nunca antes nos habiamos cruzado pero se veía muy demacrada, tenía las mismas ojeras que yo o más, estaba aún mas pálida que yo y por como caminaba parecía que no tenía fuerzas ni ganas de ir a la secundaria.
