―Oh, hola, Yasuda. ―Saluda Mitsuya con la misma serenidad que lo caracterizaba. Tenía una sonrisa adornando su rostro― ¿Qué te trae por aquí?
Hakkai se quedó congelado, el hecho de tener a una chica frente a él lo atemorizaba. Mitsuya logró notar esto, tenía muy presente el miedo de su querido Kai-chan, por lo que le sonrió en un gesto de comprensión.
―Hola, ¿Hakkai? Imagino que tú eres el Hakkai del que Mitsuya no ha parado de hablar, ¿no?
Hakkai, en una postura rígida, desvió la mirada para no mostrar el sonrojo que asomaba en su rostro debido a la vergüenza y a la presión que se auto-ejercía para intentar hablarle. Su mente le ordenaba que dijera algo, aunque fuese por cortesía, pero fue en vano.
Al notar que Hakkai no estaba pudiendo hablar, Taka-chan decidió responder por él, antes de que Yasuda se sintiera mal.
―Sí, él es Hakkai. Mi Hakkai. ―Mitsuya le guiñó el ojo a Shiba intentarlo molestarlo un poco, con cierta "maldad" queriendo avergonzarlo un poco más aún. Hakkai se sonrojó un poco más, y frunció el ceño, pues trataba de concentrarse en forzarse a decir algo.
―Oh, entiendo. Yo... venía personalmente para pedirte un favor, te lo digo sin rodeo alguno, Mitsuya-kun. ―Confesó Yasuda,miraba de vez en cuando a Hakkai, preguntándose qué podía estar pasando por su mente.
―¿Un favor? Adelante, cuéntame. ―Le contestó Mitsuya mientras que Hakkai se llevaba las manos a sus bolsillos, empuñando fuertemente sus manos producto de la frustración que sentía por no poder hablarle a la amiga de su amado. Sentía que estaba quedando pésimo, y dejando mal a Taka-chan. Aquello le angustiaba.
Mitsuya se percató de aquello, pues él siempre era atento, y se aproximó a Hakkai.
―Bueno, es que este viernes se celebrará una fiesta, y necesito que vayas.
El chico la miró un poco confundido, y llevó su mano al bolsillo de Hakkai, poniendo su mano sobre la contraria para intentar tranquilizarlo. El cuerpo de Hakkai se destensó un poco,
―¿Qué pasa con Peh-yan? Creí que iban juntos a todos lados ahora que son pareja.
Yasuda miró al piso, frunciendo el ceño. Aparentemente estaba enojada.
―Ese Peh-yan... seguro me descuidará, ya sabes que no suelo ir a fiestas y desde que estoy con él no me queda de otra que acompañarlo, pero... ¡Ya sabes lo que pasó la última vez!
Mitsuya niega con la cabeza, riendo levemente.
―¡Es en serio, Mitsuya-kun! No te rías...
Mitsuya notó que la mano de Hakkai se relajaba un poco, por lo que aprovechó de entrelazar los dedos de ambos. Aquello hizo que Hakkai se calmara un poco más.
―Lo sé, sé que es en serio, lo que me hace reír es que la relación de ustedes dos va evolucionando, pero hay cosas que no cambian. En fin. Aceptaré, pero con una condición, Yasuda.
―Claro, Mitsuya-kun. ¿Qué es?
Taka-chan miró a Hakkai, sonriendo.
―Quiero ir con Hakkai a esa fiesta. ―Sentenció Mitsuya. Aquello hizo que Hakkai volviera a tensarse un poco. El grisáceo vio aquello como una buena oportunidad para el contrario para empezar a soltarse un poco y poder hablar con chicas. Básicamente, porque sabía que aquello acomplejaba a Hakkai.
―Claro, puedes ir con Hakkai, eres bienvenido, y me alegra conocerte.
―Huh... Sí... igualmente. ―Logró hablar Hakkai, sonando un tanto aterrador. El nerviosismo hacía que se vea más intimidante aún.
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Flores y Pasteles | Hakkai x Mitsuya, Tokyo Revengers.
FanfictionMitsuya va a empezar a trabajar en un extravagante local donde venden flores y pasteles. El chico le pide a Hakkai, nuestro protagonista, que le ayude a cuidar a sus hermanas mientras él estaba trabajando. Sumérgete en esta historia de amor y pasión...