"La Oscura Verdad"

I hate myself

               "Lo bueno de estar en el infierno, es que encuentras demonios como tu."

  Observo mi habitación, son solo cuatros paredes blancas,una ventana que tiene barreras de cárcel y una sola puerta donde puedes entrar y salir. Una cama, si se puede llamar cama, es una colchoneta encima de una cama de hierro,que encima de la cabecera tenía esposas en cada lado de la cama, me imagino que cuando los paciente entran en crisis los esposan con eso. Una mesa y una silla, tipo escritorio. Eso es todo lo que hay en mi nueva habitación, a comparación del cuarto del castigo, esto era mucho mejor y más cómodo. Me senté en la cama y de inmediato rechino, entonces me doy cuenta que cualquier tipo de movimiento que haga en esta cama, rechinaba y no es un sonido agradable. Me acuesto y  rechino la cama, decidí dormir  un rato, ya que falta mucho para la cena y me duele mucho el cuerpo. 

-Extraño tanto mi habitación.-Dije resoplando.

Cerré los ojos y me imaginé que estoy en mi  habitación, imagino que me levanto y  veo por la ventana, al asomarme, veo que está  lloviendo y huele a tierra mojada, uno de mis olores favoritos. Me siento tan bien  y tan relajada que no quería abrir los ojos, solamente quiero volver a mi casa, encerrarme en mi habitación y contemplar mi ambiente. 

Deje de pensar en mi habitación y me imaginé estar  recostada  en el jardín de mi casa mojándome con la lluvia, puedo sentir el frío de las gotas al mojar mi cuerpo  y ver el hermoso cielo lleno de nubes grises y dispuesta a inundar el jardín de mi casa con sus gotas frías. Esto es realmente relajante y refrescante. Entonces todo comenzó a volverse negro y a desaparecer, entonces el sueño se hizo presente y me quede dormida.

 Escucho alguien decir mi nombre, pero el sueño domina mi cuerpo.

 -¡Despierta Fanny!.-Grita en mi oído y salto de la cama, cayendo de inmediato al piso.

-¿Que pasa?.-Dije levantándome del piso.

Al abrir lo ojos, veo que estan las tres chicas que conoci hoy en el almuerzo.

-¡Dios mio!... Pensamos que estabas muerta.-Dijo Clara. 

-Tienes el sueño pesado.-Mencionó Mari.

-Estas muy pálida y muy fría...-Tomó aire y siguió.-Tenemos rato, tratando de despertarte y no dabas una señal de vida.-Dijo preocupada.

-No tengo el sueño pesado, lo que pasa es que estaba muy cansada.-Las mire y seguí.-En el cuarto del castigo, no se duerme bien y ni se come bien.

-Tienes razón, lo sentimos.-Dijeron unísono.

-Tranquilas... ¿Que hacen aqui?.-Pregunte mirando al piso.

-No te has dado cuenta,que ya anocheció y es hora de cenar.-Dijo Mari mirando la ventana.

De inmediato miro hacia la ventana y tiene razón, ya había oscurecido. El monstruo que vive en mi barriga, se queja y las chicas lo escuchan.

-Y veo que ya tienes hambre.-Dice Clara riendose junto con las demás.

-Si..-Dije apenada.

-Vamos al pabellón de los Hombres, a buscar a los chicos y luego vamos al refugio.-Dijo Lara, caminando hacia la puerta.

-Esta bien.- Dije y me levante de la cama, abandonando mi habitación con las chicas.

Vamos por el pasillo y hay un silencio absoluto para ser una clínica psiquiátrica. Me imagino que es porque la mayoría están cenando. Cruzamos por una esquina y en eso abrimos una puerta, en cual deja ver un hermoso jardín y lo grande que es el lugar. Lo atravesamos, veo que hay una puerta que dice, "Pabellón de los Hombres".  No entendía porque estamos aquí, ni se, cual es el motivo de ir al refugio con los chicos, cualquiera piensa en algo sexista. En eso escucho una voz masculina que me saca de mis pensamiento y me doy cuenta que es un joven de mi edad.De ojos café, cabello rizado y de tess morena.