T/N Y LOS EVANS

WHAT IF...?

– Aquí está la lista de los cuidado que debes tener con ellos– explicó amablemente la señora. – Cuídalos mucho, son mis bebés.

– Los cuidaré más que a mí propia vida– dije – no se preocupe.

– Nos vemos mañana mis bebés– se despidió de sus dos hijos.

– Nos vemos y mil gracias de nuevo– se despidió y se marchó.

Trabajaba de niñera aunque odiara los niños, ¿Por qué? Enlistaré las razones.
1. Necesito dinero
2. Es lo mejor que puedo hacer
3. Es en lo único que me dejaron trabajar.

Cómo ya lo dije odio a los niños, pero los hermanos Evans eran unos niños muy encantadores y tiernos.

– T/N– me jaló de la blusa el mayor de ellos. Chris.

– ¿Qué sucede terroncito?– pregunté agachándome para quedar a su altura.

– Teno hamble– dijo con su voz tan tierna y mirándome con esos hermosos ojitos azules

–  ¿Qué quieres comer?

– Nugetts de pollo– dijo con alegría.

– ¿De dinosaurio?– pregunté divertida.

– ¡Sii!– chilló.

– De acuerdo, vamos por tu hermano.

Fui a la cuna dónde debería estar el mejor y no estaba. La sangre se me congeló, debería estar ahí, su madre va a matarme.

Entré en desesperación y empecé a buscarlo.
De pronto escuché una risita abajo del mueble.
Rodé los ojos y fui a ver, como lo suponía, el pequeño Scott estaba escondido ahí viéndome con esos ojitos lindos azules y su pequeño hoyuelo en su mejilla mientras tenía un chupón en su boquita, cuando me vió empezó a reír aún más y Chris empezó a reír también.

Para tener 3 y 1 años eran inteligentes.

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Basta, personalmente me gustó este capítulo. No puedo con tanta ternura de imaginar a los pequeños bebés.