𝐏𝐎𝐈𝐒𝐎𝐍 ; sirius black

𝗣𝗥𝗢𝗕𝗟𝗘𝗠𝗔𝗦

—¡Potter, Black, Lupin, Pettigrew! —gritó Minerva McGonagall, luego dirigió su mirada a las dos chicas—. ¿Evans, Scamander? ¿Qué...?

Sus palabras quedaron en el aire al ver el desastre que habían hecho en el salón de pociones. Minerva se llevó una mano al pecho espantada.

—Lo sentimos, Minnie —dijo Sirius.

—¡LOS SEIS ESTÁN EN GRANDES PROBLEMAS! —vociferó, Liza creyó haberse quedado sorda por un minuto.

—¡Lily y yo no tuvimos nada que ver! —se defendio.

—A decir verdad me sorprende que ustedes estén con este par de chicos... —dijo mirandolas bajo sus pequeños lentes.

—Evans no tuvo nada que ver, profesora —soltó James. Liza lo miró incrédula.

—Gracias, amigo.

—Scamander tampoco —añadió Sirius golpeando el hombro de su amigo.

—Bueno, si es así... Evans y Scamander pueden irse —informó Minerva. Las chicas le agradecieron a la profesora y caminaron lejos de allí, se seguían escuchando los gritos—. ¡EN CUÁNTO A USTEDES...!

—Potter es un completo idiota —comentó Lily una vez que doblaron un pasillo y ya no se escuchaba la voz de Minerva.

—Nah. No creo que lo haya hecho él solo.

—Da igual. Es un idiota.

Habían llegado a la sala común. La pelirroja dijo la contraseña y entró rápidamente.

—Tenemos hora libre. Iré a estudiar —anunció Lily. Liza frunció el ceño y rió, la pelirroja siempre estaba estudiando, si se casa con James realmente deseaba que su hijo no heredara esa obsesión.

La castaña se quedó parada en el medio de la sala común pensando, se sintió un poco mal por los chicos, probablemente tendrían que estar limpiando el desastre que hicieron. Liza decidió que los iba a ayudar, asi que giró sobre sus talones y sigilosamente se escabulló hacia el salón de pociones. Mientras todos los gryffindors iban al patio o a la sala común.

Definitivamente allí estaban, limpiando. Para su parecer, se veían muy graciosos.

—¿Scamander? ¿Qué haces aquí? —James fue el primero en verla.

—Vengo a ayudarlos. Siempre limpio en mi casa —dijo con orgullo.

—¿No te castigarán? —preguntó Remus preocupado.

—Es culpa de ella, nadie la obligó a venir —dijo Sirius harto.

—Iba a decir eso, claro que sin sonar como que quiero pegarle a alguien —dijo Elizabeth poniendo los ojos en blanco.

—Scamander, ¿nos estás ayudando porque la siguiente clase es Cuidado de Criaturas Mágicas? —preguntó James elevando una ceja.

—¿Lo es? —preguntó Liza esperanzada, James asintió confundido porque la chica desconocía el horario—. Es que taché esa materia en mi horario, me enteraba por Lily —agregó.