𝐏𝐎𝐈𝐒𝐎𝐍 ; sirius black

𝗖𝗢𝗡𝗙𝗘𝗦𝗜Ó𝗡

Liza y Lily se encontraban en la Sala Común de noche, tomando chocolate caliente a la luz del fuego, Lily le pidió a la castaña una noche de chicas para charlar.

—Nunca me pides ésto, algo muy raro está pasando —afirmó Liza, su amiga parecía estar apenada, pensando lo que diría segundos después.

—Es que es demasiado extraño, ¿sabes? ¿Cómo haces para aceptar que el chico que odiabas derrepente te gusta?

Liza, que casi escupe el chocolate, abrió los ojos de par en par y dejó la bebida en la mesa, como si hubiese esperado esa pregunta toda su vida.

—Pues, supongo que llega un momento en el que ya no puedes negarlo más, créeme, tengo experiencia —empezó Liza, la pelirroja asintió con la cabeza varias veces, sabiendo de qué hablaba—. Y James realmente parece amarte, es decir, sus amigos tenían guardado un pastel desde primer año para cuando aceptes salir con él...

Lily frunció el ceño tomando un sorbo de chocolate caliente.

—Creo que no tenía que decirte eso...

—Está bien, me lo esperaba.

Las chicas rieron. Giraron alarmadas cuando ruidos de pasos se presentaron en la sala, era Sirius Black, con sus pelos despeinados.

—Ugh, tú de nuevo —bromeó Lily revoleando los ojos—. ¿Vienes a arruinar nuestra noche de chicas?

—¿Pero qué dices? Yo soy una chica más —dijo con un tono femenino sentándose en el sofá y tocandose el pelo como una diva.

—Eso sería raro —señaló su novia sonriente.

—Bueno, supongo que estoy sobrando, me voy —dijo Lily parándose y dirigiéndose al dormitorio.

—¡Lily! ¡Tu chocolate..! —Sirius la calló.

—Sh, una pena la verdad —dijo asiando la bebida que anteriormente era de la chica Evans.

—¿Qué hacías despierto?

—Estaba pensando en ti —confesó. Las mejillas de Liza se ruborizaron—. Amo causar ese efecto en tu cara.

—¡Eres un engreído!

—Un engreído al que amas —dijo apoyando su cabeza en el hombro de su chica.

—Ignorando el hecho de que casi te dejo estéril dos veces...

—¡Ni me lo recuerdes! ¿Cómo íbamos a tener hijos? —preguntó indignado. Liza lo miró sorprendida.

—¿Ya piensas en tener hijos?

—Se llamaría... ¡Sirius Junior!

—¿Y si fuese niña? Elizabeth Junior

—No, no me gusta Elizabeth —dijo Sirius haciendo una mueca, Liza le pegó suavemente.

—¡Hey!

—Es broma, loca.

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A la mañana siguiente, Liza se encontraba caminando por los pasillos de Hogwarts acomodándose la corbata de Gryffindor cuando Remus apareció a su lado.

—Hola Liza —dijo el chico haciéndola pegar un brinco.

—¡Remus! por Merlín —exclamó agarrándose el pecho.

—Adivina qué.

—¿Qué pasó?

—Hoy es noche de luna llena —comentó en un suspiro. Liza no sabía cómo reaccionar, ¿debería ponerse triste?

—Qué... mal... —dijo insegura. Remus la miró confundido—. Lo siento, sinceramente no sé qué decirte.

—Está bien, de todas formas siempre me controlo.

—Cualquier cosa llamame... O mejor dicho, aullame —bromeó señalandolo, pero al castaño no le hizo mucha gracia, Liza agachó la cabeza ante el poco efecto de su chiste.

—Bien, lo haré.

Llegaron al Gran Comedor y cada uno fue con su grupo, se sorprendió de encontrar a Lily con Pandora Lovegood.

—Buenos días, muchachas —saludó Liza, Pandora le regaló una sonrisa tierna, esa chica era muy dulce.

—Pandora, ¿no te dirán nada por estar en la mesa de Gryffindor?

—No... En realidad... Casi nunca estoy en mi mesa —dijo mirando a la nada. Liza asintió y se sentó.

—Marlene vino a hablarme —comentó Lily, la chica Scamander la miró fría, Marlene no hablaba con ella desde hace semanas—. Me habló de las materias, normal, ¿sabes? Me sorprendió.

Liza se encogió de hombros restándole importancia, realmente no era algo sumamente sorprendente, es decir, era algo obvio que se iba a poner del lado del hermano. Pero Lily no había hecho nada.

—Amo el budín —comentó Pandora con una sonrisa, Lily y Liza la miraron desententidas, esperando a que dijese algo más, pero no lo hizo.

—Hoy hay luna llena —dijo Lily contenta mientras revolvía su cereal, Liza asintió, sin dejar de pensar en Marlene—. ¿Qué te sucede?

—Nada.

—Pareces Pandora, sin ofender —dijo, la Ravenclaw sonrió y comió budín.

—No es nada, solo pienso en Marlene.

—Liza, es cuestión de esperar, ya te dije.

—Escuché a Ethan McKinnon mencionarte con sus amigos —dijo Pandora, captando la atención de las chicas.

—¿Qué? ¿Qué dijo? —preguntó la castaña desesperada.

—No lo sé... Escuché algo de dolida... y obsesión —dijo como si le costara recordar. Liza y Lily se miraron confundidas.

—Bueno Liza, olvidate, es un imbecil y no tienes por qué pensar en él —cortó rápidamente la pelirroja. Liza asintió tratando de no pensar en qué podría estar hablando de ella.

Sirius la hizo salir de sus pensamientos cuando la abrazó por el cuello y le dejó un beso en el cachete.

—Nos vemos en pociones, amor —aclamó Sirius, Liza se sonrojó y emitió una risa nerviosa.

—Voy a vomitar —comentó Lily fingiendo arcadas, haciéndola reír a Liza y a Pandora.

—Tú no dirías lo mismo si de James se tratase...

—¡Oh, cállate! ¡No sé para qué te cuento! —se quejó sonrojada. Liza la señaló burlona.

—Estás igual que tu pelo. Ja, ja.

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hola.. JAJAJAJA
supongo q volví, por un tiempo..
La verdad es que extrañaba escribir, así que actualicé aunque es un cap corto pero bueno, tenganme paciencia ya volveré a mi prime