•*'¨'*•.¸¸ love grows:
⇢ ❝ there's something about her hand holding mine
it's a feeling that's fine
and I just gotta say
she's really got a magical spell
and it's working so well
that I can't get away ❞
╰─── ❪ wh...
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04: YOU'RE NOT A GOD, YOU KNOW THAT, RIGHT?
[ PRESENTE — AMAZONIA ]
APOLLO SE ENCONTRABA SENTADA EN LA ANTEULTIMA BANCA. Sersi estaba informando a Druig sobre todo lo ocurrido en los últimos días, desde el terremoto, la muerte de Ajak hasta la falsa misión que habían cumplido todos estos años. El ojiazul escuchaba todo con atención, prestando atención a los detalles en silencio. Cuando la nueva líder había terminado de explicar todo, este se tomó un par de segundos para responder.
— Me diste muchas malas noticias de golpe, mi lady. — Este se encontraba adelante de todo, recargado sobre una mesa, mientras que los demás eternos se encontraban desparramados por la habitación en distintos universos. Mientras que Sersi buscaba convencer a Druig de que los ayudase, Gilgamesh intentaba no dormirse recibiendo golpes de Thena cada tres minutos. Karun, el mayordomo de Kingo, se encontraba grabando toda la secuencia. Apollo estaba a nada de rostizar la cámara de este. Se había pasado grabando todo el viaje desde Escocia y ya no podía tolerarlo.
— ¿Nos ayudaras?
— Me alegra que... — Comenzó a hablar Druig, sin embargo, se vio interrumpido por una llamada telefónica proveniente del teléfono de Sersi. Apollo se llevó dos dedos presionados en el tabique, cerrando los ojos con fuerza. ¿De esta manera creían que Druig aceptaría ir con ellos? Había intentado hacer a los eternos entrar en razón, no había posibilidades de que este aceptase abandonar al pueblo que había protegido por siglos. Nadie la había hecho caso y ahora se encontraban en esa posición donde Druig sabía que tenía el control y se estaba haciendo rogar. Apollo detestaba eso, como estaba jugando con ellos y la astucia que este manejaba para manipular a su necesidad.
— ¿Todos recuerdan este bosque? Es hermoso. Fue el ultimo lugar donde todos vivimos juntos. — Sus ojos se desviaron por un momento sobre Apollo, ambos recordando como había terminado esa noche. Si no hubiese sido por Ajak, se hubiese encargado de rostizar a Druig como pollo para cenar. Sin embargo, la líder le había indicado que se detuviese centímetros antes de que comenzase una batalla a muerte entre ambos eternos. La tensión era palpable en el ambiente. Habían pasado miles de años y aún así ambos recordaban perfectamente esa noche. No eran los únicos, los demás miembros del grupo estuvieron tratando a Apollo como si de una bomba de tiempo a punto de explotar se tratase.
El ojiazul continuó hablando mientras se movía por la habitación, hasta llegar a Karun, quien lo observaba aterrado ante sus palabras y lo imponente que podía resultar Druig a veces. No necesitaba gritar o enfadarse para marcar su territorio, su postura cargada por la superioridad era más que suficiente. — Protegí a esta gente durante veinte generaciones del mundo exterior y de ellos mismos. Los de tu clase, amigo mío, un día serán responsables de su propia extinción. ¿No crees?
