Nova Blanco, fotografa del Daily Planet, mejor amiga de la impulsiva Lois Lane.
Clark Kent, hombre misterioso, con mucho secreto oculto.
Ambos coinciden en el artico canadiense, ambos ven algo el uno del otro dandose cuenta que no son tan bicho rar...
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La capsula seguia fuera de control mientras que en la nave se estaba desarrollando una pequeña conversacion entre la conciencia de un padre con su hijo, aunque no duro mucho debido a que el hijo salto de la nave para salavar ha cierta fotógrafa. Nova gritaba aterrada hasta que la puerta de la capsula fue arrancada haciendo que una ola de tranquilidad la envolviese al ver a Clark.
Sin dudarlo abrazo al hombre por los hombros enrollando sus piernas en la cintura, el hombre los giro para que la explosión de la nave no afectara a la mujer. Nova escondio su rostro en el hueco del cuello de Clark, cuando la rubio fresa sintio que ya estaban quietos aparto su cara del cuello del hombre mirando su rostro.
-Aquí estarás asalvo.- aseguro Clark, aún seguian en la misma posicion, Nova no desenrrollo sus piernas de la cintura del hombre y eso al parecer a él no le molestaba para nada-. ¿Estas bien?
-Si...- se quedaron mirando queriendo besarse, pero no se pudo ya que el hombre miro detrás de la mujer, dejo a Nova en suelo para salir volando hacia donde se encontraban las naves del general Zod dejando a la mujer en pleno campo.
Clark, después de luchar para que las naves de Zod se retirasen y el general del ejercito terrestre afirmara que no era una amenaza se echo a volar hacia la casa de la mujer que lo habia criado cercionandose de que estuviera bien.
-¡Mamá!¿Estas bién?- en la voz de Clark se notaba la angustia y el miedo que tenia.
-Estoy bien.- la mujer respondio ante la pregunta angustiada de su hijo, ando hasta él con albunes en su brazo izquierdo mientra que con el derecho abrazaba el cuello de Clark-. Bonito traje, hijo.
-Lo siento mucho.- se disculpo el hombre al ver la casa destrozada.
-No te preocupes, son solo cosas que se pueden remplazar.- la señora bajo con cuidado los escalones del porche dejando a su hijo ahí.
-Pero tu no mamá, dijo Zod que el códice puede devolver la vida a mi pueblo.- tenso la mandivula al saber todo lo que conllevaba devolver la vida al pueblo de Kripton, su pueblo.
-Eso es bueno, ¿no?.- cuestiono la madre entrecerrando sus ojos hacia el hombre debido al sol.
-No creo que esten interesados en compartir este mundo.- el de la capa roja miro hacia el suelo, a los segundos se escucho el ruido de las sirenas. Se giro al escuchar como una voz muy conocida le llamaba, Nova, la cual se acercaba trotando a donde estaba madre e hijo.
-Se como detenerlos.- informo la rubio fresa recordando las explicaciones que le daba Jor-El mientras que combatia contra los soldados en la nave.
(...)
-Tenemos un plan señor.- informo Nova mientras que a su lado aterrizaba la nave, en la que Clark habia viajado de pequeño, en el campo cerca del centro de mando.
