Kaze to taiyō (yaoi)

4.

-Jirō-

Agh... El idiota de Senkitchi se ha hecho más fuerte en estos últimos años. Me cuesta que el aire llegue a los pulmones de lo fuerte que ha sido el golpe que me ha dado en la tripa.

Se ha ido de la cocina sin mediar palabra el muy borde. Supongo que tenga que prepararse para las clases y esas cosas, así que no debería molestarle, pero quizás se haya pasado un poco en su ataque.

Salgo de la cocina como puedo y con el cuerpo aún un poco dolorido y me dirijo al baño. Apesto un poco y no me vendría mal relajarme durante un rato en la bañera.

El baño, como el resto de la casa, es de un blanco desgastado. La casa es algo nueva, pero me sorprende lo bien cuidado que está todo. En cuanto entro percibo el suave olor a jabón. La bañera, de un blanco impoluto, parece más moderna que el resto del baño. Seguramente tuvieron que cambiarla cuando se mudó Senkitchi.

Me acerco a la bañera y abro el grifo a tope. No me gusta que el agua salga demasiado caliente así que regulo la temperatura hasta que sale templada.

Mientras espero a que se llene un poco me quito la ropa y la dejo doblada en el suelo. Cuando el agua está empezando a rebosar un poco me meto lentamente en la bañera intentando mojar todo.

Hacía muchísimo tiempo que no me daba un baño en condiciones, de hecho, creo que desde que mi padre me echó de casa, no he podido ni dormir en una cama de verdad.

No puedo evitar pensar en todo lo que está pasando y en como ha cambiado Senkitchi. Parece que ya no queda mucho de la dulzura que le caracterizaba hace unos años. Es más, todavía no he oído ni una sola vez el sonido de su risa desde que estoy en su casa.

Me pregunto por qué habrá cambiado tanto. Pensándolo bien es normal que no sea la misma persona que hace siete años, pero no deja de ser un cambio radical.

Mis recuerdos están llenos del Senkitchi del pasado, de lo adorable que era y de lo mucho que le quería y lógicamente, no puedo para de hacer comparaciones.

Mis párpados empiezan a ser más y más pesados y acabo echándome una cabezadita antes de salir del baño.

No me da tiempo a dormirme del todo cuando oigo como la puerta se abre lentamente. Senkitchi ha entrado en el baño y se ha quedado quieto, supongo que mirándome. Después de dudar si acercarse a mí o no, se pone de cuclillas a mi lado y comienza acariciarme el pelo.

Flipando

Estoy demasiado emocionado y mi corazón empieza a latir un poco más rápido. Mierda, se va a dar cuenta de que no estoy dormido... Hago como que me comienzo a despertar, y cuando estoy a punto de bostezar, Senkitchi me empuja hacia abajo haciéndome una ahogadilla.

Me pilla totalmente por sorpresa y no puedo evitar atragantarme.

-¡Acaso eres retrasado! Casi me matas, idio...- creo que he tragado la mitad del agua de la bañera y no dejo de toser violentamente.

-Eso te pasa por bañarte y quedarte dormido en la bañera de otro sin permiso, así que ya lo sabes para la próxima.

Ag... Me lloran los ojos de toser tanto. Este tío es idiota, tengo que pensar como devolvérsela algún día.

Mientras me "muero" Senkitchi me mira con una expresión de superioridad desde el umbral de la puerta.

Está se la devuelvo sí o sí.

-No hacía falta que fueras tan brusco, joder. -intento quitarle peso al asunto y cambio de tema rápidamente. Quiero provocarle un poco.-Bueno, has disfrutado lo que has visto?