CAPÍTULO 3

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Holaaa, me he confundido pensando que hoy era Lunes😂, pero no importa, les dejo el capítuo extra💖

Muchisimas Gracias por todo el apoyo en verdad le he estado poniendo mucho empeño, 💖espero les este gustando mucho en verdad.⭐️

Si es así ¿ Me ayudarías con un voto ? ⭐️

Nos vemos muy muy pronto.💖💖

Los rayos del sol pegan en la ventana iluminando mi habitación, me maldigo por haber olvidado cerrar la cortina ya que los rayos del sol pegan directo en mí rostro, había terminado de hablar con Ada hasta tarde, muy tarde y a decir verdad había pa...

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Los rayos del sol pegan en la ventana iluminando mi habitación, me maldigo por haber olvidado cerrar la cortina ya que los rayos del sol pegan directo en mí rostro, había terminado de hablar con Ada hasta tarde, muy tarde y a decir verdad había pasado un buen momento. 

Me remuevo en mi cama una vez más, hoy es mi ultimó día de descanso, mañana tendré que entrar a trabajar de nuevo a la tienda del señor Barclay.

Tomó mi teléfono para revisar mi bandeja de correos la cuál todavía sigue vacía, solo espero que sea seleccionado para el puesto de la empresa Davies, menos mal y podía negociar mi turno con el señor Barclay, no puedo quedarme sin empleo, sobre todo cuando tengo una renta que pagar por mi primo y por mí.

Además de solventar los gastos extras del apartamento, dar la mitad de la universidad de Seung, Emily ya había hecho mucho por nosotros como para dejarle todos los gastos.

Aun que con el empleo de la estúpida familia Davies tendré más que suficiente. Pero ese no era mi objetivo principal.

- ¿Tú limpiaste esto? – Escucho la voz de la pelinegra a lo lejos, lo que hace que me levanté de un golpeé por alguna extraña razón recordando que Ada se encuentra cruzando aquella puerta.

-Bueno, Dean me ayudo es lo que menos podía hacer despúes del desastre. -  cuando escucho su voz suave y firme un impulso hace que me levante de la cama al instante.

Ada...Una chica bastante peculiar.

La imagen de ella siendo cargada en mis brazos para recostarla en el sofá, porque se había quedado dormida con su rostro recargado en el ventanal viene a mi mente, la textura tan suave de su piel en mis dedos y sus piernas...Sin duda lo que más había llamado mi atención.

A mi punto de vista me resulta bastante atractiva, su cabellera color canela resaltaban aquellos ojos pequeños color miel, una miel bastante interesante, su cuerpo es completamente diferente a lo que he visto aquí en Londres.

Cadera pronunciada, tenía un toque sensual, curvas algo generosas, dudaba por unos instantes que fuese de aquí, su estatura promedio y es que en verdad me pregunto si realmente es Londinense.

-Qué vergüenza lo siento. – su amiga se disculpaba y me sorprende escuchar como le ha cambiado la voz un poco más gruesa.

No tardo más que dos segundos en ponerme las chancletas para salir de la habitación y como el apartamento es un huevo prácticamente solo tengo que poner un pie fuera de este para ver la escena.

Mi Peor DecisiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora