SAMUEL (PARTE 2)

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N/A: A partir de este extra, los demás serán nuevos que recién publicaré en su debido momento. Gracias, voten estos extras, de alguna manera me apoyan.

EXTRA 4

— Samuel (Parte 1) —

—Aidan y ____—

—¿¡Qué!?— chilla mi hermana

—Shhh— musito cubriendo más mi cuerpo con las sábanas.

Joder. Me dio fiebre y dolor de cabeza.

¿Esto es normal?

—Mierda, Neferet... No...— me mira horrorizada— ¿Por eso estás así?

—No. Solo.. Supongo que es parte del proceso.

—¿¡Parte del proceso!?— se altera— ¿¡Cómo se te ocurre hacer eso!?— sus ojos se llenan de lágrimas.

—¡Es mi vida, Emma!— le doy la espalda para dormirme.

—¡Pero también es hijo de Aidan! ¡Te haces daño! ¡Le harás daño! — me mueve —No me ignores. ¿Sabes que puedes mandar al diablo tu matrimonio por eso? Aidan se puede resentir muy feo. Joder, vamos al hospital. Quizás si podemos hacer algo— su voz tiembla.

—No.— bufe de mala gana

—¡___ te irás mañana a Europa! ¡No puedes irte así! —rodea mi cama para ponerse frente a mi del lado izquierdo.

—Emma. Me das dolor de cabeza. —me retuerzo bajo las mantas cuando me duele el abdomen.

—Mírate.—frunce el ceño molesta— Si tu no le dices. Yo le diré. Y sabes que Aidan vendrá en una hora. Es mejor que vayamos a... a que vean lo que sea que te metiste.

Lo pensé muchas veces. Pero no quería. Pero Aidan vendrá y será peor. Y si sabe.. Joder, a veces Emma tenía razón.

—No tienes por qué volver a pasar esto sola... — se pone de cuclillas frente a mi— Está él. No está bien que hagas esto... No has pensado en... Quizás volver a ir a.. psicología o.. O terapia. — me mira triste—Con ella. Con Lauren. Te ayudará más que nunca...Eres la esposa de su hijo... Solo piénsalo.

Si lo hice. Claro que sí. Muchas veces. Pero me dan... muchos recuerdos que desearía olvidar. Sigo siendo tan inmadura, que me da miedo que me equivoque con mis propios hijos. Como lo estoy haciendo justo ahora.

—Chris querrá matarte si le digo que hiciste esto— me mira suplicante—, por favor. Vamos.

Suelto un suspiro y me quito las sábanas de encima y me empiezo a vestir con algo cómodo. Emma me ayuda por lo mismo que me siento débil.

—Me da miedo que empieces a sangrar— Emma me apura— No debiste tomar esas píldoras. ¿En qué carajos piensas? Es tu hijo. Y el de Aidan.

—Solo vamos si tanto quieres saber que puedes hacer— gruño insatisfecha.

***

—Querías abortarlo— Emma llora— ¡Estás loca, Neferet!

Ruedo los ojos y miro la aguja que está incrustada en mi antebrazo. Aidan va a matarme si se entera de esto.

—Menos mal llegamos a tiempo. Estabas por joderte a ti y a ese bebé.— me toma de la mano— Aidan tiene que saber sobre esto.

—No— niego rotundamente

Tu Mirada [Extras]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora