Capitulo 20

358 60 44
                                    

[Título: El hijo pródigo]

El alba se asomó desde el este pintando de colores magníficos el cielo. Los pajarillos despertaron de su descanso y estiraron sus pequeñas alas, listos para un nuevo día. El viento sopló con primor, temeroso de hasta causar el más mínimo daño a los habitantes que surcan en sus mejillas.

El día no se hizo esperar, y en un edificio ubicado en las afueras del distrito Fengtai, las familias se incorporaban a un imponente día. Los hombres del hogar despiertan al lado de sus parejas, abrazados compartiendo miradas de amor y buenos deseos para su día. Los niños aún no despiertan, aprovechando hasta último instante antes de que sus madres les despierten. Se lo merecen, sufrieron durante una semana y el descanso es su recompensa.

Por otro lado, en el apartamento 103 la situación es diferente. En una de las habitaciones un joven rubio, con tapones en sus oídos, no está dispuesto a levantarse todavía. Sin embargo, en la habitación contigua se cuenta otra historia. Un par de hombres yacen enredados entre sí, sus piernas y brazos se sostienen con recelo, cubiertos por lisas sábanas color verde. Uno está sobre el pecho del más joven aún dormido mientras que el joven, que ya despertó, está encandilado mirando al mayor que tiene sobre sí.

Todo es tan perfecto. Despertar al lado de la persona más importante para ti sin duda vuelve cualquier día una maravilla. El perfecto cuadro de arte que se expondría en el museo de Louvre.

Y todo se vuelve incluso más hermoso cuando finalmente el pelinegro abre sus ojos. Sus magníficos y expresivos ojos. Al inicio parece desorientado; sin embargo, al encontrarse con la ardiente mirada de su pareja, Xiao Zhan emboza una encantadora sonrisa que contiene una alegría inocua. Este gesto le acelera el pulso a quien lo observa.

-Buenos días, bebé- besa la frente de su amante.

-Buenos días - hace una pausa y desciende la mirada con vergüenza- amor...- Finalmente lo dijo, fue casi un murmullo. Apenas audible, casi pasa desapercibido por el menor. Pero no, logró oírlo. Oyó cuando finalmente su pareja se animó a llamarle por un apodo, diferente al de León.

Wang Yibo está mucho más feliz, con Zhan a su lado no importa qué. Todo parece incluso convertirse en algo aún más perfecto.

-Dilo de nuevo- ordena conteniendo su euforia.

-...Amor- dice esta vez mas alto.

-Otra vez-

-Amor- repite, esta vez con mayor seguridad al mirar la alegría de su pareja. El castaño se muerde el labio inferior y estrecha en sus brazos a su mayor. Le es imposible contener el desbocado sentimiento de amor, adoración y felicidad que le provoca el mayor.

Pasan un tiempo de esta manera, dándose mimos, caricias y besos. Derraman miel con cada mirada y palabra que sale de sus labios. Hasta que finalmente el estómago del mayor gruñe del hambre. Ambos deciden levantarse.

Wang Yibo quiere todo el paquete de estar en una relación, así que toma una de sus camisetas. Wang Yibo siempre ha usado camisetas hasta dos tallas más grande de las que debería usar. Por lo que, al dársela a su pareja, el borde de la camisa le queda una cuarta arriba de las rodillas. Zhan no sabe las intenciones lujuriosas por las que se le da esta prenda, pero la usa porque sabe que usar las camisas de su pareja es algo íntimo y especial. Así que se la deja, a pesar de que sus piernas están expuestas.

Exacto, expuestas. Al pensar que aún esta Wen Han en casa, Yibo frunce el ceño. "Quizás deba pensar en mudarme" piensa y lo deja como un pendiente en su cabeza. Entonces va hasta su armario y saca un par de pans negros y se los entrega a su pareja. Por supuesto, Zhan no se cuestiona y los utiliza.

Amor en Redacción [AR] ★YiZhan★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora