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—¡Maldito hijo de puta!

La chica gritaba con furia mientras intentaba romper al menos un vidrio del lugar.

Hyejoo recibió una llamada de San mientras este estaba en la escuela. Cuando lo atendió se sorprendió al escuchar al chico llorando. Le contó entre pequeños gemidos de dolor lo que había pasado. La sangre de Hyejoo hirvió. Oh no, con unos de sus niños nadie se metía.

Fue hasta la escuela y esperó pacientemente a que llegue la hora de salida. Vió a Wooyoung entre toda la gente y sin pensarlo comenzó a seguirlo hasta su casa. Se escondió detrás de un arbusto una vez llegaron allí. El chico entró a la gran mansión y cerró la puerta.
Lo que sorprendió (Y asustó) a Olivia fue escuchar desgarradores gritos dentro del lugar luego de unos minutos. Pero estos desaparecieron rápidamente.

—¿Qué demonios ocurre ahí dentro?

Pasadas unas horas, vió como el padre de Wooyoung salía de la casa, se subía a un auto y conducía lejos. Aprovechó el momento para desquitar su ira.

Y ahí se encontraba, tirando piedras hacia el lugar mientras insultaba a cualquier ser viviente que se le cruzara por la mente. De vez en cuando golpeaba el buzón del correo, el cual tenía tallado el apellido Jung. Aquel apellido que Hyejoo comenzaba a detestar. Si tenía suerte, una de sus piedras daría en la cabeza del idiota que le rompió el corazón a Sannie.

—¡Espero que te pudras!—Iba a lanzar otra piedra cuando vió como una ventana se abría.

—¿¡Qué demonios crees qu... Hyejoo?—Wooyoung notó que la chica no estaba completamente consciente de lo que hacía. Se tambaleaba un poco y gruesas lagrimas brotaban de sus ojos. Le sorprendió verla así. Ignorando el horrible dolor que sentía en su espalda, piernas y caderas, salió de la casa para ayudar a la chica.

Una vez estuvo con ella, esta le dió una cachetada.

—¿¡Qué haces!?

—¿Por qué?... ¿Por qué le... Le hiciste eso a mi hermanito? ¿Por qué?—Wooyoung sabía de lo que hablaba. Su corazón se rompió escuchando los llantos desesperados de la chica.—¿Por qué lo arruinaste así? Él te amaba...—Dijo en un hilo de voz. El chico suspiró. Hyejoo se convirtió en alguien muy importante para él ese último tiempo, le dolía verla así.—Él era feliz. Tú lo hacías feliz... Y ahora lo arruinaste.

Sin darse cuenta, Wooyoung también había comenzado a llorar. ¿Por qué fue tan horrible como para dejar a San así? Luego de todo lo que él hizo. San siempre lo protegía. San le enseñó lo que era disfrutar de su adolescencia. San le enseñó a amar. San le enseñó a vivir.

—Lo lamento. Lo siento, yo...

—Vuelve con él.

—¿Qué? No, él me odia.

—No te odia, Wooyoung. Sannie te ama más que a nada. Eres todo lo que tiene. Vuelve con él, por favor. Me destroza verlo triste... ¿Sabes lo mal que la pasó cuando ese hombre te trajo a su casa? Se culpaba todo el tiempo por lo que pasó.—Wooyoung escuchaba todo atento. Intentando evitar que su mente cree una imagen mental de todo, pues sabía que si veía a San de esa forma se rompería.—Por favor, ven a casa conmigo y vuelve con él...

—Yo...—Miró a los ojos a la chica, quien suplicaba con la mirada que acepte.—Está bien...

(...)

—Oigan, ya lleg...—

—Oh, trajiste visita.—Dijo Yunho apareciendo en la sala.

Wooyoung e Olivia miraban lo que estaba ocurriendo en el sofá. San besaba, de una manera muy apasionada, a un chico castaño. De vez en cuando, San paraba para besar la nariz del muchacho.

Egoist || Woosan (REMAKE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora