Capítulo 17

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Ubicación no revelada [Día de Navidad]

Hadrian sacó su varita, pero antes de que pudiera hacer algo, sintió el tirón de la aparición contra su ombligo. La habitación giró bajo sus pies y pronto sus alrededores fueron reemplazados por bosques de aspecto siniestro. Tan pronto como sus pies tocaron tierra firme, Hadrian apuñaló su varita en dirección a su secuestrador.

"¿Quién eres tú?" Hadrian siseó. Estaba agarrando su varita con tanta fuerza que sus nudillos se pusieron blancos. "Te juro que te atacaré si no me lo dices".

El hombre dejó escapar un sonido áspero similar a una risa, y Hadrian se encogió de hombros, Hazlo a tu manera .

El encantamiento estaba listo para salir de su boca cuando el hombre levantó las manos en una fingida rendición. Vacilante, Hadrian cerró la boca, pero no bajó la varita.

El hombre se quitó la máscara y Hadrian estaba furioso por dentro. Su expresión pasó de amenazante a enojada en una fracción de segundo. "¿Barty?" Escupió con incredulidad, "¿Barty Crouch?"

El hombre estalló en una sonrisa, aparentemente complacido. "Y aquí pensé que me habías olvidado".

Hadrian apretó los dientes y se frotó las sienes tratando de deshacerse de la vena que latía furiosa en su frente. "¿Estás completamente loco? ¿Qué estás haciendo aquí?" Entrecerró los ojos acusadoramente, "¿No se supone que deberías estar en Azkaban?"

Barty sonrió, la luz de la luna rebotando en sus afilados dientes. "¿Es así como saludas a un viejo amigo?"

Hadrian puso los ojos en blanco, "Perdóname". Hizo una pausa y sonrió con una pequeña y dulce sonrisa falsa . "Hola Barty, ¿cómo estás esta hermosa noche?"

"¿Fue tan difícil? Y para responder a tu pregunta, lo estoy haciendo bien".

"Barty, ¿qué estoy haciendo aquí?" —espetó Hadrian, golpeando el pie con impaciencia—. Tengo que volver a un baile de Navidad.

Barty sonrió, "Oh, sí, el famoso Baile de Navidad de Malfoy. Pero predigo que el baile no es lo único a lo que quieres volver. Digamos, esa era una chica muy buena que tenías colgando de tu brazo hace un tiempo".

Hadrian se sonrojó un poco y clavó el pie en el suelo, "¡Barty!" Él resopló con exasperación, "¡Ve al grano!"

"Lo siento lo siento." Se disculpó, aunque sus ojos llenos de diversión dejaron claro que no sentía remordimiento. Se aclaró la garganta, "Vine y te arranqué de la multitud en nombre de tu padre".

"¿Por que asi?"

Barty se burló: "Bueno, obviamente, el Señor Oscuro no puede simplemente entrar en un salón de baile repleto y decir que necesita la presencia de su hei-"

"¡No ese Barty!" Hadrian gimió, "Quiero decir, ¿por qué literalmente tuviste que secuestrarme?"

"Oh eso." Se frotó la nuca tímidamente, "Sabes que tengo un don para el drama".

"Una advertencia la próxima vez sería mejor, ¿no crees? ¡Pensé que era algún miembro de la Orden!"

El joven mortífago se ríe maliciosamente, "Vamos niño, el elemento sorpresa es la estrategia de ataque número uno. Además, son órdenes de tu padre".

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