Jake tenía la vida difícil , era un padre adolescente que recién había tenido un bebé y eso le asustaba , no tenía a sus padres y aunque tenía a su mejor amigo y madre de este con el le aterraba hacer las cosas mal
-Ire a la farmacia a comprar fórmula , no tarda en que a Jungwon le de hambre-
Aviso mientras tomaba las llaves de la casa de Eunji y un paraguas por las fuertes lluvias
-Ve con cuidado , yo cuidó a Wonie no te preocupes-
Jake dudaba de que Heeseung dejara su juego para poner atención a Jungwon pero asíntio de todas formas
Las lluvias eran muy fuertes para sacar al bebé de un año y unos meses
Era un veinticuatro de junio , bastante extraño que lloviera pero aun asi eso no preocupaba al omega quien caminaba tranquilamente por las calles de la lluviosa ciudad
No le preocupaba hasta que después de salir de la farmacia avanzo unas cuadras y un ruido muy familiar para el resonó en sus oidos
Era el llanto de un bebé
Jake observo a todos lugares pero para su sorpresa no había ningún omega con sus bebés , la calle estaba solitaria aquella noche
Camino unos pasos mas diciéndose a si mismo que de tanto escuchar los llantos de su bebé está alucinando, pero el ruido se vuelve aun mas fuerte
Entonces los instintos de Jake se alarman y su lobo quien parecía dormido le da una orden que le sorprende
-Caja. Cachorro.-
Jake mira inmediatamente una caja unos pasos mas lejos que el y corre hacia ella mientras la cubre con su paraguas
La abre con delicadeza y ahi mismo encuentra un bebé ,que a sus ojos no parecía pasar del mes de nacido inclusive podía ser mucho menos
-Por la luna-
¿Quien podía dejar un bebé en esas condiciones en medio de la calle?
Tomó rápidamente al bebé quien se había mojado mucho por la lluvia y lo escondió entre su abrigó mientras corría nuevamente a su casa
Tenía que apurarse porque debía llevar al hospital al bebé , si este agarraba una enfermedad podía morir
Cuando estuvo frente a la casa ,abrió la puerta y entro casi corriendo dirigiéndose a la habitación
Heeseung al sentir su aroma de preocupación no dudo en seguirlo con Jungwon en sus brazos
-Y ese bebé?-
-Lo encontré en una caja en lluvia ¿Puedes llamar a tu madre?-
Heeseung asíntio mientras sacaba su teléfono y cumplía lo que decía el menor
Después de unos minutos donde tanto heeseung como Jake se encargaron de calentar al bebé quien lloraba desgarradoramente llegó Eunji
-Ese es el bebé?- pregunto la alfa y ambos chicos asintieron -Vamos lo llevaré al hospital-
Y de esa forma terminaron en el hospital a las dos de la mañana , para su suerte el bebé no había sufrido ningún daño y solo tenía un leve resfriado
-Sunoo estará bien- dijo Heeseung con una sonrisa
-Sunoo?-
-El bebé no tenía ningún nombré y yo le di uno, Sunoo le queda muy bien-
-Chicos no creo que podamos dejar al bebé en las casas de adopción , los crímenes por el robo de bebés me preocupan-
Eunji habló y los dos mas jóvenes la miraron
-Me lo quedaré y lo cuidare-
Heeseung miro a su madre y habló
-Madre tu estás muy ocupada con la empresa y Sunoo es un bebé cachorro , no creo que puedas cuidarle - el alfa habló- Si quieres puedo quedarme con el -
-Ni hablar Heeseung , tu debes concéntrate en tu sueño de ser cantante- dijo la alfa
-Bien me lo quedaré yo , se cuidar a los cachorros y soy el único libre -
Los dos alfas miraron a Jake como si un cuerno le hubiera salido por la frente
-Ninguna palabra mas , ya tomé la decisión , cuidare de Sunoo y ustedes me ayudarán-
Después de discutirlo por horas Jake ganó y desde ese día en adelante Sunoo fue parte de la familia
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Hola , este fue el último extra , espero que le haya gustado
Les recuerdo que publique un libro acerca de Jungwon y Sunoo si quieren pueden ir a leerlo , se llama sweeties y ya esta publicado
Por cierto ya que concluí la historia acepto adaptaciones , solo hábleme por mensaje directo y pregunten 🥰
Bueno eso fue todo , tengan un excelente día
-beom-
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Sweet Omega - Jakehoon
Hayran KurguJake es padre soltero de dos pequeños cachorros, nunca necesito un alfa y estaba bien solo hasta que un día Park Sunghoon se cruzo en su vida y todo dio un giro de ciento ochenta grados
