Goodnight and goodbye.

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Tom se quedó dos días más, supongo que de eso se tratan los "Descansos largos" menos de una semana cuando se trabaja en esta industria.

-Podemos acomodar nuestras agendas para vernos más seguido ¿Qué opinas?

-Solo tengo unos pocos asuntos pendientes aquí y puedo quedarme en Atlanta hasta que termines de grabar Loki.

-Esa idea me parece bien, mereces un descanso- Me besó la mano.

Ya era nuestra rutina desayunar en la cama y fantasear acerca de nuestro futuro.

-Tengo un secreto que contarte-Me senté cruzando mis piernas.

-¿Qué pasa? ¿Esta todo bien?- Se acomodó los lentes y se sentó frente a mi en la misma posición.

-Amo ese gesto tuyo, el acomodarte los lentes- Crucé mis brazos en su cuello y lo besé.

-Amo besarte pero me pones nervioso- Me reí, y me volví a incorporar.

-Voy a sacar mi propia marca de maquillaje- Sus ojos se abrieron como platos y me abrazó.

-¡Me parece increíble! Estoy feliz por ti, bonita- Ese era su apodo para mí.

-Gracias guapo, estoy muy emocionada.

Pasamos la tarde en la cama, la mayor parte haciendo el amor y la otra parte decidiendo cosas de mi marca, pidiendo su opinión, platicando de nosotros, conociéndonos.

Hasta que llegó la noche, veía como empacaba sus cosas para irnos al aeropuerto, su vuelo salía a medianoche y aunque todavía faltaban unas horas no me hacía a la idea de despedirme de él.

Y ahí estábamos; en la sala de espera. 10:27 marcaba el reloj de pared. Parecía que nadie nos reconocía y agradecía eso, podíamos tener nuestra intimidad y más en este momento triste como era este.

-Se pasará rápido el mes, ya verás- Intentó darme ánimos.

-Lo sé, pero fueron días increíbles. No quiero despedirme de ellos- Lo miré a punto de lágrimas.

-Bonita- Tomó mi barbilla- Y habrá más días increíbles, no es el fin. Solo es una pequeña pausa, hablaremos todos los días.

-Me parece bien- Lo besé, de esos besos que no parecen tener fin.

La siguiente hora le conté de mi infancia y él de la suya. Acordamos que conocería a su familia después de que terminara de grabar su serie.

Ya era hora de abordar, él me miró compasivo.

-Cuando te di mi número pensé que tal vez sería algo casual, cuando volé hasta aquí pensé que solo sería algo casual y me estoy yendo ahora con una novia que no pensé tener, definitivamente me vuelves loco- Nos dimos un beso largo- Buenas noches y adiós, bonita.

Ni siquiera pude decirle nada, solo lo vi desaparecer en la línea de abordaje, mientras se despedía con la mano. Regresé a mi casa, sola, triste y melancólica.

Cosas de Tres.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora