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La comida había transcurrido tranquila, los chicos conversaban sobre el tema que Yoongi prácticamente les había planteado sobre la mesa, y todos estaban de acuerdo en algo; el amor es tonto, absurdo y falso. Los chicos decían lo mismo, una y otra vez, como si quisieran recalcárselo a Yoongi, pero a pesar de esas palabras, Yoongi no podía dejar de pensar en todo momento lo que había escuchado. Después de que terminaron de comer, cada uno pago su respectiva comida, Yoongi les dijo que volvería a hablar con ellos, pero que lo haría separadamente, y que ya les estaría hablando para eso.

Ninguno se negó.

Después de aquello, Yoongi había regresado a casa con más preguntas que respuestas al respecto sobre su tema del ensayo, en cuanto llego a su hogar, no dudo en estar con su familia por unos momentos, quería distraerse un poco después de lo que había pasado, pero el hecho de que siguiera pensando una y otra vez en las palabras de esos chicos, no lo dejaba siquiera sentirse un poco distraído sobre el tema.

Ahora se encontraba en su habitación, apenas eran las cinco de la tarde y se sentía con las terribles ganas de cerrar los ojos para poder dormir largo y tendido por toda la tarde y la noche venidera, soltó un largo suspiro, mientras que Sarangi estaba recostado cómodamente sobre su abdomen, ronroneando levemente ante las caricias pequeñas que Yoongi le daba a su pequeña cabeza, Yoongi apretó sus labios con fuerza, quizás su tema estaba más perdido que nunca.

Mientras se dedicaba a mirar el techo y sentir la suavidad del pelaje de Sarangi en la punta de sus dedos, su teléfono celular interrumpió la silenciosa paz en su habitación, giro su rostro hacia la mesita de noche que se encontraba del lado derecho de su cama, y estiro su mano libre para darle alcance al dichoso aparato que estaba haciendo sonar una melodía de cascabeles insistentes, de inmediato miro la pantalla, percatándose de que se trataba de su amigo Jackson, rodo los ojos antes de deslizar su pulgar sobre la pantalla y así poder contestar, coloco el altavoz, y alejo el móvil de su rostro, colocándolo al lado de su cabeza.

—¡Yoongi! —la voz de su amigo no tardo en escucharse—. ¿Cómo te ha ido?

—Jackson —Yoongi soltó un largo suspiro—, dime que en verdad sabes quienes son los chicos más amados de la escuela.

Jackson soltó una suave risa.

—Por el tono de tu voz, parece que no te fue como esperabas.

—Y que lo digas —sonrió a la nada—, esos chicos son un desastre —Yoongi miro al frente, observando las orejas puntiagudas de Sarangi—, hubieras visto, casi se matan entre ellos cuando se vieron la cara.

—Suponía que algo así pasaría —dijo Jackson.

—¿Cómo que suponías? —Yoongi frunció el ceño.

—Bueno —hizo una pequeña pausa antes de soltar un ligero resoplido—, no te lo dije antes, pero algunos de ellos no se llevan tan bien que digamos.

—Tu advertencia llego demasiado tarde, Jackson —Yoongi volvió a soltar un largo suspiro—, casi tres horas tarde.

Sarangi elevo su cabeza y movió un poco su cola, Yoongi no pudo evitar mirar a su gato, al parecer algo le llamo la atención.

—Nunca es tarde, Yoongi —dijo Jackson—, además, ¿qué fue lo que paso? Te escuchas sumamente desanimado.

—Pasaron un par de cosas que me hicieron ver que esos chicos no parecen tener un buen concepto de amor —Yoongi dejo de darle caricias a Sarangi—, ¿en verdad son ellos los más amados?

—Lo son —dijo Jackson—, si te percatarás más de lo que hay a nuestro alrededor, te daría cuenta de inmediato que ellos siempre reciben toda la atención, todos los halagos, todos esos corazones, en verdad son amados.

—Pues al parecer ellos creen que no es así —hizo una pequeña pausa—, ¿sabes? Ellos están de acuerdo en que el amor es una porquería.

Y quizás lo sea.

—Lamento que ellos no te puedan ayudar del todo con esto, Yoongi —dijo Jackson—, fue una mala idea haberte dejado hablarles, recuérdame no darte información de alguien más —Yoongi soltó una suave risa al escuchar a su amigo—, y bueno, ¿planeas trabajar en tu ensayo solo o...?

—En realidad planeo hacerlo junto a ellos —Yoongi estaba decidido—, llámame loco, pero, me gustaría saber porque ellos consideran el amor como una porquería —volvió a acercar su mano al gato para acariciar su cabeza—, y me gustaría saber si acaso alguna vez ellos sintieron que el amor es real y bonito...

—Creo que lo mejor es considerar que a ti te meta a un manicomio —Yoongi rodo los ojos—, en verdad estas loco, pensé que al verlos discutir dejarías de hablarles.

—Sí, pero de alguna forma siento que cada uno de ellos puede darme la respuesta correcta de una u otra forma, ¿sabes? Siento que puedo inclusive sacar más de un concepto sobre el amor con ellos y —relamió sus labios—, eso en verdad me será útil para completar y hacer un buen ensayo.

—¿Te puedo detener ahora?

—Jackson —rodo los ojos—, no tienes porque hacerlo, ya he tomado una decisión y ellos en verdad se ven dispuestos a ayudarme, no tienes porque preocuparte por nada, sé como manejar esta situación, lo juro.

—Esta bien —dijo Jackson en un resoplido—, pero si sientes que algo se esta saliendo de control, no dudes en pedirme consejo, ¿está bien?

—Sí, mamá —dijo Yoongi fingiendo desinterés, Jackson le regalo una risa sonora al escucharle—, voy a colgar, tengo que pensar en lo que haré para que esos chicos me den sus razones para considerar el amor como un asco.

—Esta bien, suerte con eso, Min, y no te fuerces en comprenderlos, o te explotará la cabeza en el proceso.

—Trataré... —sin más, Yoongi tomo su teléfono celular, y corto la llamada, volvió a colocar el aparato móvil en su mesita de noche, dejándolo caer en un golpe sordo sobre la madera para después volver a mirar el techo y dejar que un largo suspiro se escapará por sus labios.

Tenía mucho trabajo que hacer, pero esperaba valiera la pena, no es que se preocupe por convivir con ellos, ninguno de ellos se veía como una mala persona, pero, de todas formas, necesitaba tomar apunte de todo lo que ellos pensarán y dijeran, porque todo le sería de ayuda, y quizás... quizás también podría ayudarles a ver que el amor no es tan malo como lo parece.

Yoongi no sabe nada de amor, ni siquiera de ese amor en las relaciones, pero siente que no puede ser tan malo como ellos lo plantean, así que no estaría mal ponerse a investigar un poco más acerca de los sentimientos de las personas que en verdad están enamoradas, aunque las opiniones eran muchas, y algunas inclusive dolorosas, tiernas, tristes, o llenas de euforia, Yoongi sabía que quizás él mismo podía llegar a una conclusión, pero no sería suficiente para escribir un ensayo completo, así que mientras esos chicos le ayudaban, él les ayudaría a ver el amor de distinta manera.

Sí, por el momento, se trataba de un buen plan.

Looking For LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora