Jungkook llegó a su casa del trabajo y había cenado con dos de sus personas favoritas. Faltaban unas horas para que el azabache deba partir y ninguno estaba listo para despedirse. Jungkook acompañó a su hija a su cuarto y ella se acostó, cubriéndose con las sábanas.
—Pórtate bien ¿Sí? No seas mala con Taehyung —dijo él, besando su frente—. Verás que todo va a pasar rapidísimo ¿Sí?
—Está bien... Buenas noches.
—Te amo.
—Yo igual.
Jungkook salió de la habitación de su hija, cerrando la puerta y notó que su novio no estaba en la planta baja. Subió las escaleras y entró a su cuarto, pero tampoco encontró al castaño allí. Vio que la puerta del baño estaba cerrada así que supuso que allí se encontraba el mayor. Se sentó en la cama y se quitó la remera, escuchó la otra puerta abrirse.
—Tae, ven... —susurró el azabache mientras se quitaba el cinturón, sintió los dedos largos y delgados del chico pasearse por su hombro y sonrió. Giró su rostro y se encontró con el de Taehyung, que no dudó en hacer contacto visual con él—. Ya nos veremos, el tiempo pasará rápido.
—No quiero que te vayas.
—No seas infantil, Jihyun lo manejó perfecto —Jungkook se acomodó, acostándose y sin dejar de mirarlo—. Hablaremos todos los días, lo prometo.
—Bueno... —Taehyung suspiró—. Lo siento, tienes razón. Me estoy preocupando demasiado.
—No tienes que preocuparte por nada, estoy muy enamorado de ti y jamás haría algo para lastimarte.
—Lo sé —Taehyung sonrió.
Jungkook lo tomó de la cintura y lo acercó, pegando sus labios entre sí y besándolo con parsimonia. Taehyung cerró sus ojos y cualquier pensamiento negativo se disipó al sentir la manera tan suave y amorosa con la que el otro lo besaba. El castaño se acomodó a horcajadas sobre su novio, quien pronto se encargaba acariciando su cuerpo por debajo de la tela.
—Ojalá no tuviese que irme —susurró Jungkook y pasó su lengua por el labio inferior del otro—. Quiero quedarme aquí, con ustedes, pero es muy importante.
—Shh, ya está... —Taehyung murmuró y volvió a besarlo, pero de una forma mucho más rápida e intensa, haciendo que un gemido salga de la boca del pelinegro.
Jungkook paseó sus manos por los glúteos del contrario y presionó sus piernas, sintiendo como éstas se estremecían y sonriendo al respecto. Taehyung acarició toda la anatomía superior de su novio, sintiendo su suave piel con la yema de sus dedos y queriendo grabársela de memoria en su mente.
El menor lo empujó sobre la cama y se colocó entre sus piernas, dejando besos y succionando su cuello, mandíbula y clavículas. Taehyung sonrió y dejó que Jungkook hiciese lo que sea con su cuerpo, sin importarle que le quedaran chupones, quería que Jungkook marcara cada rincón de su piel con su boca todo el tiempo. El azabache quitó la remera holgada de Taehyung y se sorprendió al ver que era lo único que llevaba puesto.
—¿Sabías que esto pasaría? —preguntó y el castaño asintió, haciendo que ambos suelten algunas carcajadas—. Eres un atrevido.
Jungkook bajó y delineó todo el abdomen del hombre debajo suyo con su lengua. Se encargó de llenarlo de chupones y besos, oyendo la respiración agitada de su novio y los suspiros temblorosos que se le escapaban de vez en cuando. Taehyung separó sus piernas y sintió como pronto la lengua de Jungkook fue a parar a una de sus zonas más sensibles, hundiendo su rostro entre su trasero y chupando con vigor.
Taehyung arqueó la espalda y tomó entre sus dedos unos mechones del cabello de Jungkook, tirando su cabeza hacia abajo e intentando sentir el mayor placer posible que su novio le brindaba. Abrió su boca y tiró su cabeza hacia atrás, presionando las sábanas con su otra mano.
—J-Jungkookie, oh... —jadeó—. Quiero que me folles ahora, no juegues...
—¿De verdad? —Taehyung asintió—. A sus órdenes.
Jungkook se arrodilló sobre la cama y volteó a Taehyung contra el colchón de ésta, alzando sus caderas y sosteniendo su cintura con una mano, de manera fuerte. Mojó dos de sus dedos en un envase de lubricante y pronto los introdujo a ambos, viendo como Taehyung dejaba caer su pecho contra la cama y apretaba la almohada debajo de su rostro.
—Oh, Jungkook, mierda.
El nombrado comenzó a mover su mano de manera veloz, mientras con la otra masajeaba y presionaba los glúteos del chico, dando ligeros golpes sobre éstos. Taehyung cerró sus ojos con fuerza y ahogó los gemidos en la almohada, mientras sentía como los dedos del otro lo hacían sentir en el cielo.
Jungkook sonrió, satisfecho y luego quitó sus dedos, para colocarse un condón de manera rápida y enterrarse profundamente dentro del interior del otro, que pegó un ligero grito debido a la combinación de dolor y placer que recibió su cuerpo. Jungkook se inclinó y pegó su abdomen a la espalda de Taehyung, mientras que colocaba su brazo contra el cuello de éste y provocando que su cuerpo se eleve ligeramente y su respiración se dificulte.
—Muévete, muévete... —suplicó el mayor y mordió su labio con fuerza cuando comenzó a sentir las embestidas bruscas que el otro le daba. Se sostuvo de su brazo y mordió éste, intentando que los gemidos que salían de su boca no se escuchen, debido a que no estaban solos en la casa.
—¿Te gusta así? —preguntó Jungkook y el otro asintió, sollozando en voz baja. La mano de Jungkook que antes estaba en el cuello del castaño, fue a parar a su boca y la cubrió.
Lo penetró profundamente, sintiendo como el interior del otro lo recibía de manera apretada y deliciosa. Besó su cuello y sus hombros, saboreando el dulce sabor de su piel y embriagándose con el olor que esta emanaba. Taehyung se sostuvo de la cabecera de la cama y tiró su cabeza hacia adelante, mientras Jungkook lo enpujaba hacia abajo y continuaba embistiéndolo con fuerza.
—J-Jungkook, Jungkook... —Taehyung sollozó—. M-mierda, mierda.
El nombrado se apoyo contra la cama y sentó al mayor encima suyo. Él intentó recuperar el aliento para luego tomar la erección de Jungkook entre sus dedos e introducirla dentro suyo. Se movió hacia adelante y atrás, inclinándose para probar los labios del azabache que apretaba sus caderas y clavaba sus uñas en ellas. Taehyung comenzó a dejar chupones en las clavículas de su novio e hizo lo mismo en su abdomen, sin dejar de moverse.
—Lo haces bien, sigue así —ordenó Jungkook y Taehyung sonrió, comenzando a saltar sobre el miembro del contrario—. Oh, dios.
—Jungkookie —gimió—. T-tócame, tócame.
Las manos del menor acariciaron la espalda del otro y lo empujó hacia sí, moviendo sus caderas hacia arriba y penetrándolo brutamente, mientras Taehyung clavaba sus uñas en los hombros de Jungkook y gemía contra éstos. Jungkook acarició las piernas del chico y con otra mano comenzó a masturbarlo, sintiendo como su cuerpo temblaba.
—¡Mgh! —Taehyung gimió, apretando las sábanas y sosteniéndose nuevamente de la cabecera—. No pares, por favor, por favor...
Jungkook abrazó la cintura de Taehyung con un brazo y continuó empujando su pelvis hacia arriba, haciendo que el sonido de sus pieles chocando sea estruendoso y los cuerpos de ambos se estremezcan.
—¡Ah!
Y en pocos segundos ambos llegaron al orgasmo, sintiéndose totalmente extasiados y exhaustos. Taehyung se dejó caer y los dos intentaron recuperar el aliento, mientras sus pechos subían y bajaban por la agitación del momento. Jungkook sonrió y lo miró, acomodando su cabello.
—¿Estás bien?
—Ajá... —el castaño lo miró y sonrió enormemente—. Te extrañaré.
—Yo igual.

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Daddy's fear.
FanfictionJungkook es un hombre cuyo mundo gira en torno al trabajo y a su hija, pero su vida da un giro cuando la pasa a buscar por la escuela y conoce a su nuevo maestro: un chico de sonrisa rectangular y risa contagiosa. [kooktae]