Wang y Zhan son los primogénitos y herederos de sus respectivos clanes, enemigos naturales que deben unirse en una cruzada para salvar a sus padres y pueblos, la condición para encontrar el objeto que los salvara a todos es simple, "no te involucres...
- Madre, creo que este no es el verdadero príncipe de Yiling.
Desde un rincón Ayanga y Wang observaban y esperaban el momento oportuno para sumarse a la batalla.
- Sí, eso parece.
Habló Ganeka con decepción.
- Que contrariedad, deseaba tanto por fin matar a tu medio hermano.
Todos se observaron asombrados y confundidos entre sí, mientras que Wei Wuxian continuaba imperturbable.
- ¡Bienvenido al juego Patriarca de Yiling!
Ganeka extendió los brazos con una malvada sonrisa en su rostro y un resplandor enceguecedor cubrió todo el lugar justo antes de la gran masacre.
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Capítulo 21:
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Aquel nocivo resplandor abarcó cada rincón de la fortaleza en donde se libraba la batalla, con aquella malévola fuerza, incontables vidas, tanto de su propio ejército como las de sus enemigos, fueron arrastrados a la oscuridad eterna, demostrando con ello, que nadie estaba a salvo de su inagotable furia y su asombroso poder.
- Ya vendrá... ya verás...
El cielo que se había tornado rojo por mucho tiempo, repentinamente volvió a ser de un azul oscuro sin luna ni estrellas que contemplar para embellecer la muerte, sobre los ojos de los cultivadores menores, Lan Sizhui y Lan Jingyi, un firmamento negro acompañaba la espera, mientras derrotados sobre un mar de sangre, ambos se tomaban las manos esperando a que alguien pudiera detener lo inevitable.
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Wei Wuxian se levantó rápidamente después de haber sido lanzado violentamente por el poder de Ganeka contra la rocosa pared de la cueva.
- ¿Creí que deseabas matarme? – Ganeka rio estruendosamente – bien, debo decir que, dudo mucho que eso vaya suceder mi querido Patriarca.
Con sus ojos brillando de un dorado penetrante, Ganeka volvió a juntar poder demoniaco entre sus dedos para atacar nuevamente a un lastimado Wei Wuxian, quien, había dejado caer accidentalmente su dízi tras ser derribado por el ataque de la malvada diosa y se encontraba completamente vulnerable.
Iracundo, Lan Wangji intentó correr hacía Wei Wuxian para protegerlo, sin embargo, sobre él, los demonios Wen Xu y Wen Chao, bajo la fuerte influencia de Ganeka, lo atacaban sin darle la mínima oportunidad de llegar a su amado.
<<Wei Ying>>
Un poco más al norte, las posibilidades de ayudar se minimizaban, Ganeka se había encargado personalmente, de liberar a sus demonios más poderos para mantener entretenido a cada uno de sus enemigos, por su parte, Lan Xi Chen se enfrentaba al poderoso demonio Wen Ruo Han y a su derecha, Jiang Cheng se enfrentaba al mismísimo primogénito de la malvada diosa, el recién resucitado, Jin Guangyao.
