CAPÍTULO CUATRO

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Tome una gran bocanada de aire y salí de mi departamento, mordía las uñas de mis dedos ¿Debería hacerlo?.

Asentí. Si debía hacerlo.

Toque la puerta varías veces hasta que se abrió, era Aidan quien solo sonrió nerviosamente. Me quedé sin habla, era simplemente hermoso. Aun no podía creer que viviese frente a mi departamento.

— ¿Te puedo ayudar en algo?.

Volví a la realidad — Si, de hecho si — sonreí — Quiero... ¡Tu autógrafo! — Exclamé haciendo que este se asustara un poco — Bueno, mi amiga es una gran fan tuya y le dije que...

Me tomo de los hombros — ¿Le dijiste que yo vivo aquí? — su cara se notó más pálida.

Esa cercanía que teníamos me hacía sentirme en las nubes, Aidan Gallagher está agarrando mis hombros.

— N-No.

Suspiró — Bien — me soltó.

— ¿Entonces me lo darás? — sonreí.

Asintió — Claro. Solo déjame buscar un bolígrafo y algo en que escribir... Aguarda.

Cerró la puerta. ¿Por qué carajo cerró la puerta? ¿Tiene algo que esconder?. Claro, a esa chica linda.

Me puse de puntillas y mire a través del agujero que tiene la puerta, no se miraba nadie, solo Aidan hablando con esa chica un poco molestó, oh creo que alguien se enojo con ella.

Sonreí, pero de repente quite mi sonrisa al ver que Aidan se acercaba a ala puerta.

La abrió — Toma — me entró un pedazo de papel.

Lo tome, logrando rozar sus fríos dedos con mis dedos cálidos. Fue una corriente electrónica tan increíble, que espero no haber sido la única en sentirla.

Le sonreí — Gracias, ella estará feliz.

— Y gracias a ti por no decirle a nadie que vivo aquí — me devolvió la sonrisa y lentamente cerró la puerta.

Chille de emoción después de quedarme mirando a la puerta por algunos segundos. Entre a mi departamento y bese aquel papelito que estuvo en las manos de Aidan.

...

Aidan Gallagher

Bufé con fuerza al cerrar la puerta, de verdad que estaba harta en todos los sentidos.

— ¿Qué pasa? — preguntó Wyatt saliendo del baño.

— Es esa chica, es una fan mía. Vino a decirme que quería un autógrafo para su amiga ¿Piensa que soy estúpido? — Me senté a lado de Trinity — Es increíble.

Wyatt se acercó — Es solo una fan, ellas son lindas con sus ídolos...

Lo interrumpí — ¡Pero tu no la tienes las veinticuatro siete! — Exclamé frustrado.

— Tranquilo, seguro se le pasará.

— Eso espero, por que estoy bastante harto de esta situación. Ella, ¡Ah! — toque mi cabeza.

Trinity sonrió — Yo pienso que es lindo que se ponga de esa manera contigo.

Lo mire confundida — ¿Qué?.

— Vamos Aidan, es obvio que le gustas, ella no es fea... Digo...

La interrumpí — ¿Lo dices en serio? Ella, esta loca. No saldré con una loca jamás.

Alzó una ceja — Nunca digas nunca — tosió falsamente.

— Te odio.

Sonrió — Lo sé, tengo que irme. Nos vemos luego.

Asentí — Bien, te cuidas.

Me despedí de Trinity, ellas es una gran amiga que tengo de hace mucho tiempo. Tenemos una gran confianza, no salgo tanto con ella ya que podrían empezar a especular una relación y las fans se pondrían locas.

Wyatt me miro con una sonrisa al ver que salió Trinity.

— ¿Qué es tan gracioso?

— ¿Por qué no admites que te gusta Trinity?

Negué — Tal vez por que ¿No me gusta? ¿No lo habías pensado? — me levanté — No tengo cabeza para una novia en estos momentos.

— Entiendo, ella es linda.

— Si, pero sabes que no es mi tipo.

— ¿Y tu vecina fan loca si? — río.

— Ella menos. Es una fan loca más.

— Nunca sabes, terminé enamorándome de mi fan — guiño un ojo.

Lo mire extrañado, tome el vaso de cristal donde tenía un poco de agua y tome un poco de la misma.

Moon Chaffee. Eres solo una fan más.

Espero que esta historia les esté gustando, por favor si es así háganme saber.

Yo estoy muy feliz con ella.

Obsesión | Aidan GallagherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora