El corazón repartido en dos.

414 61 6
                                    

POV Lisa

El sentimiento de sentirme nerviosa y a la vez agradecida por ver a Rosé de nuevo me invadía por completo y no podía dejar de verla, no estaba siendo consiente del tiempo que llevaba viéndola así, pero es que simplemente no quería dejar de verla, no podía creer lo que estaba pasando, no podía creer que fuera ella la que estuviera frente a mí, y tenía miedo de que esto fuera un sueño más, de esos que me hacían sentir mal cuando apenas había ocurrido lo del accidente. 

- Lisa, ¿estas bien? - Preguntó Jisoo mientras me miraba como tratando de descifrar mi expresión, cosa que me hizo salir de mis pensamientos para voltear a verla a ella y asentir. - Bien - Continuó diciendo - Antes de irme quisiera pedirte una cosa- Dijo, y yo no podía dejar de pasar de mirarla a ella a pasar a mirar a Rosé en repetidas ocasiones. 

- ¿Ajá? - Dije, para darle a entender que podría decirme lo que quería. 

- ¿Le podrías pedir a Rosé que deje que me vea?- Dijo con ilusión. 

- ¿Y-yo? - Respondí 

- Si, tu tienes que pedirle que deje verme y entonces ella aceptará, claro - Respondió rápidamente

- O-okay - Dije para aclararme la voz y volver a mirar a Rosé, quien había pasado de tener una expresión de preocupación a una divertida por lo que había dicho Jisoo - Ro-Rosé, ¿podría verte Jisoo? - Dije mirándola atentamente. 

- Claro - Dijo ella y mi corazón se terminó por paralizar. 

- ROSIE, ESTÁS AQUÍ - Gritó Jisoo para luego abalanzarse sobre ella. 

- Hola, Jisoo - Dijo ella entre risas. 

- Ha-hablaste - Dije aún conmocionada por todo lo que estaba pasando. 

- Por supuesto. Está muerta, no muda, ¿sabes? - Respondió Jisoo como si fuera lo más obvio del planeta tierra. 

- jajajaja, Hola, Lisa - Dijo Rosé 

- H-Hola - Dije yo con la boca ya abierta sin poder creer que me estaba hablando, ella me estaba hablando, y no podía creer que lo que tanto soñé estaba pasando. 

- Bueno, las dejaré solas para que hablen - Dijo Jisoo - Tranquila, Lisa, y cualquier cosa solo márcame, ¿está bien?. - Dijo y yo solo asentí - Por si las dudas, repito, trata de escucharla y no te desmayes - Terminó por decir para comenzar a caminar hacia el elevador. 

- Trataré no hacerlo - Dije con un hilo de voz. 

Una vez Jisoo se despidió y las puertas del elevador se cerraron, los nervios habían comenzado a aumentar y los latidos de mi corazón cada vez se estaban haciendo más fuertes. 

- Lisa... tranquila. - Comenzó a hablar Rosé, pero aún no podía verla directamente sin sentir que me iba a desmayar - Lisa, mírame. Todo está bien, solo vamos a hablar, ¿está bien? - Dijo mientras se comenzaba a acercar a mi, y cuando ya estuvo enfrente se agachó para tomar mis manos entre las suyas y obligarme a mirarla - Todo está bien - Repitió y yo solo asentí, mientras sentía como una paz inmensa comenzaba a invadirme. 

- ¿Cómo haces eso? - Dije mientras veía como volvía a su lugar en el sofá frente a mi. 

- Cosas del otro mundo, supongo; eso y que te conozco bien - Respondió levantando los hombros.

- Gracias... - Dije ya más tranquila - Bueno, ¿qué tienes por decirme? - Pregunté para que comenzara ir al grano antes de que el efecto de paz se fuera nuevamente. 

- Bueno, realmente no sé como comenzar o como contarlo para que puedas comprender - Comenzó a explicar - pero creo que siempre se comienza por el principio, ¿no? - Dijo y yo solo asentí animándola a continuar. 

¿Cómo te olvido?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora