Fueron los brazos de ella los que te abrigaron
en el frío de aquella ciudad.
Y fueron sus besos los que te hicieron vivir de verdad.
Todo porque ella aún tiene vida.
Y no está ni marchita, ni rota.
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Dieciocho
PoetryLo que escribo no son frases. Lo que escribo no sólo son poemas. Lo que escribo son las voces de mi cabeza que nunca cierran la boca. Esta historia está protegida con Safe Creative bajo el código de identificación: 1410142335493. Prohibida su copia...