Enamorada de un Kingsman

Despedida

Narra Victoria

La noticia que Harry me dió me sorprendió bastante. Nunca hubiera imaginado o sospechado que era un agente secreto, pensé que eso sólo pasaba en las películas. Pero no y aquí estaba acostaba sobre el pecho del mejor agente de Kingsman.

—Hay algo más que debo contarte– dice Harry sacándome de mis pensamientos y levanto mi cabeza para verlo— Iré a una misión en Francia dentro de dos días

—¿Qué harás?

—Impedir que secuestren al presidente– me dice tranquilo

—¡¿Qué?!– me siento en la cama sin creer lo que me dijo

—Iré con Eggsy. No tienes que preocuparte, no es la primera vez que tengo una misión de esta magnitud– se sienta también, frente a mí y toma mis manos— Todo saldrá bien– besa mi mano e intenta calmarme

—Harry, prométeme que te cuidarás

—Claro que sí, mi amor– me besa y vuelvo a acostarme en su pecho

***
Harry tenía el día libre antes de ir a la misión porque es tradición de Kingsmans dar veinticuatro horas libres a sus agentes antes de ir a una misión.

—¿Qué quieres hacer hoy?– me pregunta mi novio cuando acabamos de desayunar

—Tengo ensayo con el grupo de baile– hice puchero y él sonrió con ternura

—¿Te demoras?

—Cinco horas

—Pasaré por ti cuando acabes e iremos a cenar– acepto y limpiamos los platos

Harry me deja en el estudio de baile. La verdad es que sólo serán tres horas, pero tengo pensado hacer unas compras sorpresa para la despedida de Harry.

Los ensayos transcurrieron normalmente y al terminar, salí de prisa al centro comercial más cercano a comprar unos gemelos para que Harry use con sus elegantes trajes. Sé que le gustarán. Después de mi compra express volví al estudio para aparentar que nunca salí de allí y esperar que venga Harry.

—Vicky, pensé que ya te habías ido– dice mi compañera Marina al verme en la puerta del estudio

—Fui a comprar algo

—Tengo mi auto, si quieres puedo llevarte

—Oh, no te preocupes. Mi novio vendrá por mí

—¿En qué momento la soltera más codiciada de la cuidad encontró novio?– pregunta muy curiosa y casi incrédula mientras cruza sus brazos

—Hace un mes

—¿Por qué no me lo contaste?

—Lo siento, pero es que eh estado ocupada

—No hay cuidado, pero al menos preséntamelo cuando llegue– asiento y luego de cinco minutos llega Harry muy puntal. Baja del auto irradiando elegancia y encanto. Es un deleite a la vista

—Buenas tardes, Victoria. Te traje estas rosas– me las entrega y le sonrío como colegiala enamorada

—Gracias, mi amor– digo y por fin vuelvo a besarlo, pero somos interrumpidos por la tos falsa de mi amiga— Harry, ella es mi compañera y amiga Marina Brody, Marina él es mi novio Harry Hart

—Mucho gusto– dice Harry estrechando la mano de Marina

—Lo mismo digo. Victoria no me contó que salía con todo un galán de Hollywood– me sonrojo y Harry lo nota

—Más bien con un caballero de la reina– dice Harry y sonrío cómplice entendiendo su broma— Si nos disculpas, Mariana, ya debemos irnos

—Oh, claro. Un gusto conocerte– dice mi compañera y nos despedimos

—Tu amiga parece ser una buena persona– comenta Harry encendiendo el auto

—Lo es. Me agradó desde que la conocí

—Si a ti te agrada, a mí me agrada más– dice y toma mi mano para besarla

Al parecer se volvió costumbre que él tome mi mano al conducir mientras yo lo miro intentando entender por qué es tan perfecto y en la suerte que tengo de haberlo encontrado.

Pensé que iríamos a un restaurante, pero Harry me lleva a su casa porque tiene una propuesta para mí y creo saber que es, ojalá tenga razón y me pida mudarme con él.
Al entrar, pude distinguir el olor de pizza recién horneada y además el Sr. Pickle Jr. se encontraba recostado frente a la chimenea junto con el Sr. Brown.

—¿Qué hace aquí mi mascota?– me acerco para tomarlo en mis brazos y darle un beso

—Lo estuve pensando y quiero que vivas conmigo, así que si no tienes problema...– saca una copia de las llaves de su casa— ¿Qué dices, Victoria?

—¡Obvio que si!– lo beso y luego comemos la pizza que él preparó

Después de cenar, los besos y caricias comenzaron a hacerse presentes y subimos a la habitación. Quería darle una buena despedida a Harry por lo que además de los gemelos, compré una sexy y linda lencería de su color favorito, azul marino.

—¿Victoria, cómo es que cada día me enloqueces más?– me pregunta completamente excitado al verme en tan provocadora ropa

—No quería que te vayas sin tener una buena despedida– digo inocente

—Si las despedidas serán así, entonces me iré todas las semanas– reí y él atrapa mis labios para morderlos

Besaba mi cuerpo como si fuera la última vez que lo haría y yo me dejo llevar por el placer que sus labios causan y le devuelvo el favor, con mi ya experimentada boca (gracias a Harry).

Me coloco encima de él y comienzo a mover mis caderas en círculos para provocarlo más, Harry no resiste mucho y me penetra. Pone sus manos en mi cadera para dar más profundidad a los movimientos.

Mis pechos rebotaban, así que él los atrapó en su boca para devorarlos mientras yo daba saltos cada vez más rápidos hasta que sentí a Harry llegar adentro de mí, seguido de mi.

***
A las 8 de la mañana Harry ya se encontraba en Kingsman. Antes de irse me repitió que no había nada de que preocuparse y que todo saldría bien, además de prometerme que me llamaría todas las noches y que volvería sano y salvo.

Se iría por tres noches, por lo que aproveché para llevar mis cosas a su casa e instalarme mejor.