Enamorado de un Fantasma 2.0 Un amor para siempre♥ ©

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(Aarón)

El tiempo pasó y la graduación llego. Si, por fin, y Salvador fue el elegido para dar el discurso. El cual fue realmente muy emotivo.

Después de la ceremonia Salvador, Neri, Daniel y yo fuimos a cenar con nuestros padres y ahí brindamos y convivimos muy a gusto y los 4 hicimos una promesa, que quizá sonara como de chicas pero daba igual, nosotros seriamos amigos para siempre y que apoyaríamos a Salvador con su restaurante, el acepto.

Una semana después de la graduación, comenzamos a buscar empleo, Salvador no quería perder el tiempo y como buenos Halcones (así decidimos apodarnos) llenamos solicitudes y fuimos a varias entrevistas, fue difícil y cada quien encontró trabajo en un restaurante diferente, pero encontramos y fue lo bueno.

Hubo días en que Salvador se deprimía demasiado y no sabíamos cómo ayudarlo, lo dejábamos llorar, pero no lo dejábamos solo, temíamos que pudiera tentar contra su vida, gracias a Dios nunca lo hizo. Pero por lo regular, el esperaba a que estuviéramos solo los dos para hablar sobre Nicole. Y yo lo escuchaba atento. Un par de veces fui con él al cementerio y veía como le hablaba, como si realmente lo escuchara, le platicaba sus avances, como le iba en su trabajo, y hasta de Neri, Daniel y yo.

Y una vez me permití ir yo solo a visitar la tumba de Nicole —Hola Nicole, tanto tiempo— dije y deje el ramo de rosas que compre sobre la tumba —Bueno, quiero decirte que le haces mucha falta a Chava— me reí —Bueno eso creo que lo sabes ya, quiero que sepas que los chicos y yo lo hemos ayudado, pero le faltas mucho y en ese sentido no sé cómo ayudar— suspire y me senté a lado de la tumba —Ya no he visto Nefertiti, la última vez que la vi fue en la graduación, pero no hable con ella, se siente culpable por no llegar a despedirse de ti, ¿sabes? pero sé que... sé que quizá lo preferiste así— me quede callado un rato y luego escuche pasos, levante la mirada y hablando de la reina de Roma —Aarón, que sorpresa ¿Qué haces aquí?— era Nefer, me levante y sacudí la tierra de mis pantalones , me sorprendí realmente de verla —Hola Nefer, pues, me nació venir a visitar a Nicole— me encogí de hombros, ella sonrió. Nefertiti era un chica linda, debo admitir que me agradaba —Bueno, creo que será mejor que me valla— dije un poco apenado, ella se sonrojo un poco —No, si gustas quédate conmigo— lo pensé y sí, me quede con ella, después le invite un helado y platicamos, ya habían pasado casi 5 meses de la graduación y más de un año de la muerte de Nicole, fue agradable pasar el rato con ella. Quedamos de salir después con nuestras respectivas parejas. Pero después me di cuenta que no le pedí su número de celular. Así que bueno, no volví a saber de ella y tampoco se lo comenté a Salvador porque supuse que se pondría nostálgico.

La vida se estaba pasando tan deprisa...

Un año transcurrió y el día de su cumpleaños, Salvador me llamo como a eso de las 6, se supone que celebraríamos pero el no quiso —Aarón, ya tengo el local— me sorprendí —¿De verdad? Ahora entiendo porque no quisiste ir a celebrar tu cumpleaños— él se rio —No, no fue por eso y lo sabes... Bueno mañana quiero que vengan a verlo— sí, sabía que no quería celebrar su cumpleaños porque se acordaba de Nicole, del primer regalo que le dio, de su primer beso, eso era triste, así que le dije que sí y me dio la dirección. Al día siguiente todos estuvimos incluida su mama y empezando por la ubicación, estaba perfecto, el local era espacioso. Me gustaba.

Salvador estaba realmente emocionado y hace tiempo que no lo veía así. Realmente me alegre por él. Y nos dijo que aproximadamente en medio año todo el restaurante estaría listo que los tres ya teníamos trabajo asegurado de por vida.

Brenda y yo seguíamos juntos y fui emocionado ese mismo día a contarle la noticia, ella se alegró por mí y por Salvador porque ella igual vivió todo este proceso, ya teníamos tres años de novios y la amaba mucho. ♥

Mi amigo era muy reservado en cuanto a los detalles del restaurante, no sabíamos ni el nombre, ni el tema nada... solo nos dijo que consiguiéramos el personal necesario para un restaurante de cinco tenedores, Salvador iba a lo grande. Y eso hicimos, contactamos a varios de los ex compañeros, conocidos y familiares con experiencia. Varios aceptaron y otros no, pero si conseguimos el personal para la inauguración.

Un mes antes, nos dio toda la información para hacer la propaganda e ir a la radio; el restaurante se llamaría "El Ángel" sabía perfectamente porque lo llamo así, y el tema seria blanco y negro.

Lo que más me sorprendió fue la propuesta de Salvador —Aarón— estábamos jugando FIFA 15 como en los buenos tiempos —Si, dime— suspiro y pauso el juego —Quiero que seas mi padrino para la inauguración del restaurante— lo mire y le di un golpe amistoso —Sabes que sí, ya, me estaba empezando a preguntar si no me elegirías a mí— dije en broma, pero el gesto si me conmovió, porque había pensado que quizá Braulio seria el padrino —Eres mi mejor amigo, y gracias Aarón, gracias en serio— luego le pregunte que si solo sería yo y dijo que no, pero no me quiso decir quién sería el otro padrino.

11 de Abril, la inauguración. Salvador nos citó a las 2 de la tarde, pero la inauguración seria hasta las 3. Nos pusimos a afinar los detalles y las primeras en llegar fueron nuestras novias bueno solo la de Neri y la mía porque Daniel había terminado con Esmeralda hace poco, pero nos dijo que la recuperaría, Neri y yo la invitamos, esperando que arreglen su situación. 2:40 llego la que supuse seria la madrina, no me pregunten como lo supe, solo al verla lo sentí. Nefertiti. No sé por qué mi corazón se aceleró un poco, se veía muy bonita en su vestido de coctel color uva, estaba acompañada por Juan Carlos, su novio, nuestras miradas se cruzaron y ambos sonreímos.

A las 3 en punto, Salvador nos llamó porque ya sería la inauguración, me situé a su lado izquierdo con Brenda a mi lado y Nefertiti a su lado derecho con Charly, dio su discurso agradeciéndonos y hablando sobre su padre y Nicole y la promesa. Todo fue muy emotivo.

Una vez que termino, Nefertiti y yo procedimos a cortar el listón rojo y su cercanía me puso algo nervioso. Luego pasamos a conocer el interior del restaurante y todo fue prefecto.

Brenda me abrazo en cuanto fui a su lado —Estoy tan orgullosa de ustedes, yo quiero una amistad como esa— me beso dulcemente en los labios —Te amo Breen, y yo soy tu amigo y novio ¿no?— se rio y fuimos a que degustara algo.

La vida nos estaba sonriendo a todos, mi amigo Salvador por fin tenía un poco más de alegría en su corazón.

Bien dicen que "Después de la tormenta llega la calma".