XLIII

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Querido Diario:

Cada día el baile se acerca más. Sólo queda esta semana y otra más para el verano. No puedo creer que al fin vaya a graduarme.

     Hoy mandé la solicitud a la universidad para la beca, finalmente.

     Ayer en la noche Matt pidió que me quedara a dormir con él, y que hoy en la mañana podría salir con Jenna a la escuela. Al principio dudé un poco pero al ver la cara de perrito que había puesto me ablandé.

     Decidí que sería mejor no decirle a mi madre nada, de todas maneras seguro ni se darían cuenta si estaba o no.

     Luego fui a la escuela y volví a casa. Lo que no sabía era que mi madre no había ido a trabajar y al llegar, empezó con el interrogatorio. Lo normal es que hubiera estado molesta por el regaño, pero me hizo sentir bien que se hubiera preocupado por mí.

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