Plan

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"No tengo ganas de salir, Dom, no ahora" murmuró el rubio acurrucándose más y ocultando su rostro en su cuello, evitando a toda costa el contacto visual.

La morena suspiró despacio y se dio un momento para acariciar su cabello dorado con cuidado, tratando de consolarlo pues, si bien Roger no lo había comentado en voz alta, ella sabía que estaba deprimido por no poder ir a la feria. Dominique quería que fuese una sorpresa, pero a estas alturas, tras tres horas de intentar convencer a Roger de salir de la casa, se estaba quedando sin tiempo antes de que el concurso empezara, y debía decírselo a ver si reaccionaba mejor.

Ella apostaba a que sí.

En efecto, tal y como se lo dijo a Brian, Roger estaba deprimido. Michael lo había ido a dejar esa mañana en su casa a la hora del almuerzo, y Roger lucía más muerto que vivo cuando su padre, cargado de una actitud pasivo-agresiva, lo sacó a rastras del carro y lo depositó no tan gentilmente en los brazos de la chica diciendo que 'estaba un poco enfermo, nada contagioso', y se fue. Era la primera vez que Roger se quedaba en casa de ella sin que su padre fuese invitado a comer también, pues los Beyrand estaban tristes de que Michael se quedara solo en casa mientras Winnie y Clare 'visitaban a su familia en el sur'. Dom insistió en querer un momento a solas con su novio ese día, y sus padres aceptaron, pero se preocuparon en el comedor al ver lo pálido y callado que estaba el rubio mientras observaba su comida sin apetito.

En complicidad con las mentiras de su padre, Roger se forzó a sonreír y les comentó que estaba un poco enfermo, mientras se disculpaba por no haber probado bocado. La mamá de Dom le ofreció una sonrisa, negó ante las disculpas, y le preparó una humeante taza de té que dejó en velador de Dom mientras los chicos se acomodaban en la cama para ver una película.

El plan era simple, o eso fue lo que Dom creyó en inicio. En teoría, iban a comer en su casa, ver una película, salir a dar un paseo y dirigirse a casa de Debbie, donde ella tenía preparado un conjunto muy suyo y muy distinto al atuendo que usaría él, para que Roger pueda salir hacia la feria sin ser notablemente reconocido por el intimidante hombre que los seguía. Debbie tomaría el lugar de Roger, aunque le tomó a Dominique eras convencerla sin querer entrar en tanto detalle del por qué. Al final, Debbie terminó enterándose de la historia entera, pues sus capacidades de interrogación eran invencibles. Accedió, poco convencida pues en calidad de ex, Roger no era su persona favorita, pero no encontró nada malo en dejar que el chico pueda escabullirse vestido como ella para ir a ver a Queen tras bambalinas, mientras ella y Dom pretendían ser la pareja y veían el concierto.

Pero en la práctica, el rubio no tuvo ganas de comer, ni de ver la película y peor de salir a pasear. Estaba determinado a quedarse acostado sin hablar, abrazando a Dom con tal insistencia como si tuviese miedo que se fuese y lo dejase solo. No había tenido un momento de paz desde hace rato, y confiaba en ella para protegerlo de todos los males en su vida. Por ello, Dom no pudo hacer mucho más que acceder y mostrarse atenta y presente para él, y el hecho de que Roger le pidiese verbalmente que se queden en casa era un avance. No tan grande, pero un avance, pues al menos le estaba dirigiendo la palabra.

La morena regresó a ver el reloj otra vez, impaciente. Dado el cambio de planes le pidió a Debbie que pasara por su casa, puesta el traje que le prestaría a Roger para que quien sea que se había estacionado fuera de su casa viera a la chica vestida así y la identifique con amiga de Dom, y sintió un gran alivio al notar la camioneta de su amiga dando la vuelta hacia su casa desde la ventana. Pegó un brinco para ir a abrirle la puerta, y cuando regresó con ella, encontró a Roger todavía tirado en la cama, boca abajo y en el mismo lugar donde cayó cuando se levantó.

"¿Qué le pasa?" preguntó Debbie dejando su cartera en la cama, algo confundida y nada discreta al ojear al rubio de pies a cabeza. Roger solo abrió uno de sus ojos y la miró con desinterés antes de dirigir su atención a Dom, quien se sentó a su lado para guiarlo a que se siente, cosa que el rubio hizo oponiendo algo de resistencia.

God Knows | MaylorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora