Confesión

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-Minghao, qué bueno verte. -exclamó Mingyu cuando se encontraron en la puerta.
-Sería bueno si nos viéramos en otras circunstancias, pero aquí estamos -le respondió el chino. -¿Entramos?-
-Sí, pasa. -respondió el más alto.
Se sentaron en la misma mesa que la vez anterior que estuvieron allí. De alguna manera creían que las cosas volverían a salir bien gracias a ese lugar.
-Voy a ser directo, Minghao -comenzó a hablar Kim una vez que pidieron el café. -Ese era Jeon Wonwoo, mi ex novio, que seguro lo conoces aunque sea de nombre. Salí un tiempo con él, hasta que la presión que le ponía su empresa hizo que se fuera a otro país en busca de una nueva manera de desempeñar su carrera. Pero todo eso lo supe por las redes sociales, ya que él se había ido de aquí sin siquiera despedirse de mí. -Mingyu le dio un sorbo a su taza. -Por lo que dijo el otro día, está de regreso en Corea y pidió que yo arreglara la venta sólo para poder verme, aunque lo que más hizo fue intentar estar conmigo a la fuerza. Hice lo mejor que pude para frenarlo por mi cuenta porque no me gusta ser agresivo, pero debí haber llamado a seguridad en el momento en que se puso intenso, no después de que nos vieras. Lo siento, en serio. Debería haber actuado diferente, pero pasó y de veras lamento cómo sucedieron las cosas.-
-Si no te hubiese visto, ¿me lo hubieses dicho?-
-Seguro creerás que te lo digo para quedar bien, pero claro que te hubiese contado. Sabes que no tengo secretos contigo.-
-No sé, nunca me hablaste sobre Wonwoo.-
-Creo que tenía cosas mejores que quería que conozcas de mí antes que hablar de la manera dolorosa en que me abandonaron.-
-No puedo culparte. No eres el único que quiso omitir su historia amorosa anterior.-
-¿Qué quieres decir?-
-Nunca te conté porqué decidí que el arte sería lo único que amaría en mi vida.-
-Siempre hay tiempo para hacerlo.-
-Cuando vine a vivir a Corea no estaba tan familiarizado con el idioma, entonces tenía bastantes problemas entendiendo y comunicándome con los demás, hasta que conocí a Jun, ¿te acuerdas de él? Teníamos unos 16, 17 años y era la única persona con la que podía mantener una conversación porque los dos hablábamos la misma lengua materna. Creo que no es raro que en una situación donde hay una sola persona en tu vida que te puede entender termines sintiendo cosas por ella, pero Jun estaba de novio con un tal Jeonghan. Todos los días los veía caminar por nuestro barrio y ser la mejor pareja de jóvenes que nunca vi, pero me molestaba no poder ser yo quien caminara a su lado. En fin, después de lo mucho que lloré sabiendo que mis oportunidades con él eran más bajas que mi nivel de coreano, comencé a tomar clases de pintura, fotografía y baile para distraerme de mis sentimientos y terminé encontrando mi pasión en la vida. El arte fue mi manera de expresar todo lo que no podía decir, ya sea porque no sabía qué palabras debía usar o porque tenía miedo de arruinar la mejor amistad que tenía.-
-Wow, Minghao. No me esperaba esto... ¿Jun lo sabe?-
-Se lo dije muchos años después cuando ya me daba igual si me mandaba al diablo o no. Pero se quedó conmigo y de alguna manera nos hizo más cercanos aún.-
-Realmente no...-
-No tienes que decir nada. -lo interrumpió Xu. -Sólo quería que lo sepas ahora que también sé de tu pasado. Pero eres la primer persona no involucrada a la que se lo cuento.-
-Eso quiere decir que...-
-Te perdono, Mingyu. Debe haber sido más doloroso para ti que para mí el hecho de que tu ex aparezca como si nada y te bese. Perdón por haberlo malinterpretado.-
-No, Hao. Nada de esto es culpa tuya.-
-Qué bueno que me llames así otra vez. -el chino sonrió. -Y a fin de cuentas no es tuya tampoco.-
-Igualmente yo tendría que...-
-Basta, Mingyu, no le des más vueltas. Aprovecha que te perdoné.-
-Gracias, Hao. Ahora me siento más tranquilo.-
The 8 tomó la mano del contrario. -¿Quieres ir a mi casa? -le preguntó.
-Claro que sí.-
Dejaron el dinero del café y salieron caminando de la mano.
-¿Qué quieres hacer? -preguntó el chino.
-Lo que sea, pero por favor no te sientes arriba mío esta vez. -se burló Kim.
-Creo que por un tiempo no lo haré. Ya quedé traumado. ¿Y si vemos una película?-
-Me parece una muy buena idea.-
-Yo elijo.-
-Bien. Pero la próxima me toca a mí, ¿sí?-
-De acuerdo. Vamos.-

Por error •Gyuhao•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora