PERDICIÓN © #3 [✓]

25 [EDITADO]

—Paul, mira lo que tengo por aquí —menciona la chillante voz de Olivia—. Camina, zorra —aprieta aún más el arma contra mi nuca y me da un rodillazo para que ingrese donde estaba mi hermano y padre.

Al entrar veo a Bruno tirado a un costado, no está inconsciente, está magullado y veo que sostiene su costado con dolor pero al verme sus ojos se abren de par en par, al igual que los de mi hermano. Darren está inconsciente junto a Bruno.

—Vaya, vaya.. —mi padre me observa de pies a cabeza y muerde su labio inferior—. Trajiste una prostituta, Fiore —coloca su mano sobre mi cintura y su nariz roza mi cuello.

—¡QUÍTALE LAS MANOS DE ENCIMA, CERDO! —Bruno grita y se levanta pero mi padre le apunta.

—¡TÚ CIERRA LA BOCA PORQUE TE LA CIERRO DE UN BALAZO! —gruñe Kuznetsov.

Veo a Luca detrás de mi padre, lo quiere golpear como nunca hizo en su vida.

Paul observa la habitación y frunce el ceño, así que dirige su mirada a Olivia.

—¿Y mi hermano? —cuestiona.

—No lo he visto —se encoge de hombros.

—Tú te encargas de mi hijo y El Diablo —ordena Paul—. Y yo me encargaré de esta preciosura —aprieta mi trasero pegándome a su cuerpo, exactamente a su entrepierna en cuanto su erección comienza a crecer.

—¡ES TU HIJA, ASQUEROSO DE MIERDA! —grita mi hermano y Paul me observa detenidamente.

En ese análisis que me hace aprovecho para meterle un puñetazo y luego dar una patada en su abdomen, la cual hace que su espalda choque contra la pared.

—¿Cómo que mi hija? —cuestiona con dificultad—. Yo no tengo ninguna hija —dice con total serenidad.

—Como quisiera que tú no fueses mi padre, cerdo hijo de puta —escupo con todo el odio que tengo en mi interior.

—Yo no tengo hijas —remarca cada palabra.

En ese momento decido dispararle pero me lanza contra una pared con toda su fuerza y mi arma cae al suelo.

—¿Acaso te crees más inteligente que yo, Copito? —me sostengo de la pared algo aturdida y vuelvo a levantarme.

Observo a Bruno y comienza a caminar en pie lentamente. También veo que Darren se reincorpora y corre hacia Paul para atacarlo pero Olivia lo frena con un disparo en la misma pierna que le había dado en el anterior encuentro.

—¡Maldita sea, Olivia! —exclama Darren entre dientes.

Yo camino hacia Paul, Olivia intenta detenerme pero la empujo contra la pared provocando que quede completamente aturdida.

—¿Recuerdas cuando me desnudabas mientras dormía, me tomabas fotos y se las mostrabas a tus socios? —veo como Bruno tiene la intención de acercarse y tomar mi arma—, ¿Acaso te olvidaste de la primera vez que me vendiste a Misha?, esa fue la segunda vez que me violaron porque la primera lo hiciste tú —hablo entre dientes—. Tenía seis años y tú arruinaste la infancia de una niña, ¡DE TU PROPIA HIJA! —siento como las lágrimas amenazan con salir pero las contengo.

—¿Kylie? —cuestiona asombrado y simplemente sonrío con odio.

—Sí, padre —digo la última palabra con asco.

Se acerca a mí y por acto reflejo voy hacia atrás causando que él suspire.

—¿Por qué estás aquí, Kylie? —observa atentamente mis ojos.

—Vine por ti —él comienza a reír.

—¿A matarme? —eleva sus cejas y cuestiona risueño.

—¿Y a que más sino? —lo observo seria.