Trato de sacar las llaves de mi sujetador pero me duele demasiado cada parte de mi cuerpo, el dolor es tan fuerte que no soy consciente de sí estoy o no respirando.
Como puedo tomo asiento y recuesto mi espalda contra la pared para tratar de respirar de forma cesada.
Luego de colocarme mi camiseta, como de costumbre, voy hacia la cama y cubro mi cuerpo con la manta. Bruno estaba hablando con su madre abajo. Me estaba quedando dormida hasta que oigo como se abre y cierra la puerta.
Unos minutos más tarde, el otro lado de la cama se hunde a mi lado y el olor a agua fresca mezclado con menta que desprende Bruno llega a mis fosas nasales.
-¿Cómo está Antonella? -cuestiono con la voz un poco adormilada.
-Triste...pero sé que ella estará mejor, es cuestión de tiempo -suspira- ¿Te desperté?
-No..estaba a punto de dormir.
No dice nada, cuando pienso que se había quedado dormido, iba a hacer lo mismo pero cuando estaba conciliando el sueño siento como Bruno se pega a mi cuerpo mientras que pasa su brazo sobre él, y deja descansar su mano bajo mis pechos.
-Bruno, apártate...es suficiente que tenga que dormir en la misma cama que tú pero no me toques -voy a quitar su brazo pero es más rápido y lo atrapa entre su mano.
-Por favor...solamente por hoy -susurra en mi oído- Prometo que será solo hoy...necesito...necesito a alguien cerca -aflojo mi mano dentro de la suya y coloco mi mano sobre la suya.
-Solo hoy.
Coloca su nariz en el hueco que quedaba entre mi cuello y hombro, y deja un suave beso allí
Sonrío con ese recuerdo y cierro mis ojos con fuerza.
-Espero que puedas perdonarme, Bruno -susurro.
|| ... ||
Abro mis ojos al sentir una fuerte bofetada en mi rostro.
-Despierta, cumpleañera -me quejo y vuelve a abofetearme-. Si te comportas, te sacaré a dar un paseo, hija -le dedico mi peor mirada.
-Gracias -sonrío con falsedad-, pero no quiero dar un paseo contigo -digo con brusquedad.
-No es una invitación, es una orden -me río y recibo otro golpe de su parte-. Te gusta muchísimo que te golpeen -dice burlón.
Le observo con odio a la vez que aprieto mis labios y asiento.
-¿Cuándo es el puto paseo? -pum, abofetada.
-Cuida tu vocabulario -habla entre dientes-. Primero, debes comer este trozo de pastel -chasquea los dedos y aparece una mujer con una bandeja en la cual había pastel de chocolate-. Muy feliz cumpleaños, Copito. Disfrútalo -sonríe.
Veo que en la bandeja hay dos tenedores, así que tomo uno y se lo entrego a Paul.
-Come conmigo, padre -murmuro-. Debes celebrar el cumpleaños de tu hija junto a ella, como cuando era niña -sonrío de lado.
Él se lleva un trozo de pastel a la boca y mastica bajo mi atenta mirada; en cuanto estoy segura de que no tiene nada malo también me llevo un trozo de pastel a la boca y disfruto del dulce sabor de este.
-Tuviste cáncer -asiento-. Como tu abuela.. -le observo-. La familia de tu madre representa la estupidez que hay en ti. Tú eres muy parecida a tu madre en cuanto a su fuerza de voluntad -llevo otro trozo de pastel a mi boca-. Una lástima que vayas a terminar igual que ella por sus mismas estupideces -comienza a reír pero su risa se ve interrumpida por un fuerte quejido.
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PERDICIÓN © #3 [✓]
Novela Juvenil-¿Vas a matarme acaso? -elevo mis cejas-. Que valiente de tu parte. Sí, de seguro será mejor matarme sin que yo sea capaz de poder defenderme -bajo mi mirada-, sé que temes que pueda derrotarte, Petrov. -Tú nunca matarías ni a una mosca, Cobra -me r...