Soy Blair, Blair Hargrove.
Me mude hace poco con mi "familia" aquí a Hawkins, vengo de California así que cuando escuche que el pueblo de Indiana era pequeño y sin mayores escándalos, solo pensé en una palabra "tranquilidad"... Carajo que equivocada...
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-Blair ¡Blair!- Dirigí mi mirada a Max. -¿Estas bien?-
-Si... yo... me tengo que ir. Recordé que hoy tengo pijamada con Nancy, hace tiempo que no hacemos una- Le dije lo que se me ocurrió.
-¿Iras a aver a Mike?- Me vio con desaprobación.
-No, claro que no. Sigo enojada con él, pueden usar mis cosas si lo desean. Las quiero- Les di un beso en la mejilla a cada una.
Tomé un cambio de ropa de mi closet junto con mi walkie-talkie, los metí en una bolsa y salí de la casa. Me subí en mi bici para dirigirme a casa de Mike.
Llegué con bastante problema ya que la lluvia seguía demasiado fuerte, dejé mi bici en el pasto. Me acerque a la puerta y toque el timbre, nadie abrió así que lo hice de nuevo, nuevamente no me abrieron. Dirigí mi mirada hacia la puerta del sótano que daba hacia la calle, pero decidí que era mejor entrar por la puerta principal. Comencé a tocar la puerta con mis nudillos, al quinto golpe la puerta se abrió dejando ver a Ted Wheleer.
-Buenas noches señor Wheleer. ¿Está Mike?- Le pregunté con una sonrisa.
-¿No crees que es muy tarde para venir?-
-No. Nunca es tarde para visitar a las personas, a menos que estas mueran- Me vio con una ceja alzada y así estuvimos por un minuto hasta que Karen llegó.
-Ted, ¿quién es?- Su mirada se dirigió a mí y una enorme sonrisa se instaló en su cara. -Cariño, pasa esta lloviendo mucho y te puedes resfriar- Me tendió su mano y yo la acepte gustosa.
-Vengo a ver a Mike ¿Está aquí?-
-Por supuesto, en el sótano. Lucas y Will también se encuentran ahí-
-Muchísimas gracias- Corrí hasta la puerta del sótano y la toque ya que estaba cerrada.
-¡NO QUEREMOS CENAR, MAMÁ!- Se escucho el grito de Mike del otro lado de la puerta.
