Algunos dicen que el amor no muere.
Ese es un problema para Brian.
Él tampoco muere.
Roger y John, sí.
...
🦇Vampire AU | Highschool AU | History AU
🦇Esta historia la había ya subido en mi perfil, pero no me gustó cómo la estaba narrando, así que...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
♟ John P.O.V. ♟
Siendo honesto, esperaba que este receso fuera muuuucho más tedioso. No solo Roger no está en la ciudad, pero mi familia tampoco, y justo por eso todos se enfocaron en asegurarse que esté muy bien acompañado.
No me malinterpreten, les ruego. Yo amo a Freddie, no tanto como a Rog, efectivamente, pero lo amo tanto como se puede amar a un mejor amigo. Es el hermano mayor que nunca tuve y siempre quise tener.
A diferencia de mi adorado novio, Freddie es mucho más discreto al momento de preguntarme qué tal he estado con mis nervios. Es ansiedad, dijo la psicóloga a la que me llevaron, pero en un intento de que no suene tan oficial y no me sienta enfermo, la llamamos nervios. Nervios que producen mal sueño, que a veces me quitan el apetito y me han vuelto mucho más delicado, según mamá. Es, supuestamente, un efecto colateral y respuesta a la enfermedad de papá. Fueron a Londres a tratarlo, y por eso me dejaron aquí. No eran vacaciones para ellos, sino una oportunidad para escapar a un sitio donde le diesen un mejor tratamiento.
Sin embargo, llevo con estas pesadillas desde antes, solo que fueron empeorando estas últimas semanas. Por algún motivo que no entiendo, eso sí, me he sentido mejor que nunca desde la última noche que Roger se quedó conmigo, y el efecto ha perdurado. Freddie insiste en que es su compañía, pero yo quiero mejor pensar que es una mezcla de la compañía y preocupación de ambos. No pude pedir un grupo de amigos más perfecto.
Si bien sus acercamientos, muy diferentes, son igual de desquiciantes.
Donde Roger no me para de hostigar con preguntas cada que me encuentra bajoneado, Freddie opta por quedarse callado y proponer cosas para distraerme, lo cual suena mucho mejor, si no fuese porque siento sus potentes ojos oscuros examinando cada pequeño movimiento que hago. Él sabe cómo leer e interpretar lo que digo y lo que no. Roger me contó que Freddie viene de una familia que conocía bien las artes místicas de la medicina holística y los embrujos de la magia blanca, y honestamente le creo. Freddie es de esas personas quienes quieren armar tu carta astral y leerte la fortuna en la palma de la mano, y lo peor de todo, ea por su personalidad confiada o porque en serio sabe, suele tener la razón.
Por eso, cuando propuso una partida de ajedrez de la nada, quise decir que no... pero como me encanta jugar ajedrez me fue imposible negarme dado el aburrimiento que me consumía. Ahora heme aquí, calculando mi siguiente movimiento con los ojos de Freddie encima mío, analíticos como de costumbre y nada discretos como le gustaría creer.
—¿Y ahora qué?
—¿De qué hablas, cielo? — dice, fingiendo demencia. Mueve su alfil con elegancia hacia el otro lado del tablero, y taclea uno de mis caballos; para estar distraído conmigo, presta más atención que yo, aparentemente.
—Lo estás haciendo de nuevo, me estás mirando con esa cara de "voy a adivinar lo que estás pensando". Y no, no estoy pensando en nada más que cuánto desearía que dejes de mirarme así.
