3. El pelinegro

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Narradora: Valeria

Ayer pasamos dos horas abriendo puertas para ver si era de la llave que encontré pero desgraciadamente perdimos el tiempo, pero no me rendiré, tal vez esta llave no sea de allá del museo y me lleve a un escondite secreto... Si ya se, veo muchas películas pero es enserio me siento cerca, cerca de encontrarle las respuesta a muchas preguntas que tengo.

Bueno, hoy amanecí con unas ganas de comer en la casa de Esteban, claro porque es mi amigo, no es porque no sepa cocinar ni me da miedo encender la estufa... Bueno, si, me da miedo y no se cocina, pero para esto tengo a unos amigos quienes tienen unas madres muy bondadosas.

Esteban está un poco triste ya que mi hermana se fue, el estaba loco por ella, no entiendo que le vio pero bueno, cada uno se fija en lo suyo y yo me fijé en la mamá de mi amigo quien me acaba de dar un plato de comida la cual se ve exquisita.

—Gracias— chille de la alegría y está rió. 

—Te estás muriendo de hambres, te conozco— Me pellizco el cachete y se fue sonriente a la cocina

Comí como animal, la verdad, si me moría de hambre, no como desde ayer en la tarde, ¡no cené!

—¿Y vos?— entra Estaban al comedor, me mira sorprendido y yo le sonreí con la boca llena

Se me olvidó contar que el no sabia que yo estaba aquí, entre con el permiso de la señora quien a partir de hoy es mi nueva madre.

—¿Que haces aquí?— cuestiona sorprendido

—Estoy comiendo ¿no ves?— Dije y me concentre en mi plato, este se sienta delante de mi con un puchero en su cara, rodé los ojos y dejé la comida aún lado—. Esteban, ella no te quería no puedes estar toda tu vida con esa cara de funeral

—Se fue y no le dije que la amaba— Dijo triste

—Tu no la amas, tu amas a Kloe, entiéndelo— Dije harta y este negó con todo su ser

—No, yo no estoy enamorado de Kloe y ya deja de decir eso— Dijo enojado y se fue a dónde supongo es su cuarto

Seguí comiendo mi deliciosa comida, ignorando lo que estaba pasando ¿Que que estaba pasando? Pues el hermano mayor de Esteban se sentó a mi lado y no deja de mirarme.

—No puedo comer cuando me miran fijamente—Dije molesta y este río.

Cómo me cae mal este tipo, siempre detrás de mi, ¿Que no entiende que no me importa tener nada con él?

—Eres hermosa, ¿Sabías?— Dijo con voz seductora y me dieron ganas de vomitar

—Robin, ya se que soy hermosa y gracias, ahora por favor, te lo ruego, ¿Puedes mirar a otro lado para poder comer como Dios manda?— Dije y este río de nuevo

¿¡Tengo cara de payaso o que?!

—¿Y si no quiero?— reto

Iba a decirle que pasaría si no me dejaba en paz pero paso que:

—Déjala comer en paz— Dijo Estaban enojado

—¿No tienes nada que hacer?— dijo Robin, me di la vuelta y seguí comiendo mi rico desayuno

—No ¿y tú? Bueno, aparte de molestar a Vale— dijo serio y Robin volteo a verme

—Me tengo que ir muñeca— Dijo con voz un poco ronca y me dio un beso en le mejilla para luego desaparece de mi vista, me quedé sorprendida por ese beso en mi mejilla, debería irme a lavar.

—Mañana desayuno en la casa de Kloe, aquí no vuelvo mas— dije y Estaban quería reír pero no lo hizo y se sentó a mi lado

—¿Porque?¿No te gusto la comida?— cuestionó la señora y le sonreí

—No es por eso, su comida es exquisita— dije y sonrió

—El problema es tu hijo que se la lanza de coqueto, la beso en la mejilla— le dijo Esteban y la señora negó entre risas

—Para acá puedes venir todos los días si gustas— En mi cara se formó la sonrisa más grande del mundo

—¡Gracias!- grite feliz y mire a Esteban quien me guiño el ojo y empezó a comer al igual que yo

Le conté a Esteban sobre la llave misteriosa que encontré y bueno me dijo que si necesitaba su ayuda no dudará en pedirla. 

El es el mejor amigo de mundo.

Después de una mañana muy divertida jugando video juegos en el cuarto de Esteban, me aburrí y este se estaba preparando para salir.

—¿Me acompañas hoy al juego?— cuestionó con un pequeño puchero y rodé los ojos

—Si, pero solo porque  no tengo nada que hacer y mi mente necesita despejarse un rato- Este me sonrió y me jalo del brazo para salir de la casa, antes le grite a la señora diciéndole gracias y que mañana volvía

La gente me da un dedo y yo tomo la mano completa.

Llegamos al campo de fútbol y habían muchos chicos conocidos, en realidad, los conozco a todos, en este pueblo todo el mundo se conoce, es un lugar tan pequeño que las personas se ven mil veces al día.

Me senté en las gradas y me quedé ahí mirando como los chicos calentaban su buen trabajado cuerpo, sin camisa y sudados... ¿Que me pasa?

—¿Estas bien?— Está se sienta a mi lado

—No puedo dejar de mirarlos y no quieres leer mis pensamientos— dije sin quitar mi mirada de los chicos quienes corren por toda la cancha

—Sabia que este día llegaría— dijo orgullosa y la mire confundida-, por favor, Valeria- Negué

—Te he dicho que no, no quiero novio no tendré novio, no necesito novio y menos amante; no gracias, no me hace falta— dije fastidiada, seguí mirando a los chicos y está bufo

—Si te hace amiga, si te hace— la ignore

Me percate de un chico a quien no conozco, un pelinegro, piel morena y con un buen cuerpo ¡Valeria!...

Nunca lo había visto por aquí y menos jugando fútbol... Debe ser el nuevo que llegó.

—¿Quien es ese?— apunte al pelinegro quien estaba haciendo abdominales

—Eh... —Trago saliva—...es el nuevo— dijo como nerviosa, es como si no quisiera decirme

—¿Cómo se llama?— esta no quería voltear a verme, la conozco y es porque sabe algo que no me puede decir

—Jacke— respondió nerviosa y la dejé en paz para analiza a ese tal Jacke.

La práctica había terminado y los chicos estaban en medio del campo charlando o no se mirándose las caras, cuando empezó a llover de la nada, todo el mundo salió corriendo en especial Kloe y Esteban, esos dos corrieron y me dejaron ahí sentada, me levanté y me fui caminado a mi casa, me encanta la lluvia y los demás tontos pareciera que le tuvieran miedo.

¡Son de azucar o que?

Cruzando en una esquina choque con un chico el cual venia como corriendo y caí al piso sentada.

¡Aush!

¡Mi trasero! 

Levanté mi mirada y era el pelinegro; Jacke, este me miraba fijamente, me comía con la mirada....


La Piedra De La VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora