Sucesos inesperados - Parte 1

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5 de junio de 2001.

Desde hacía 1 mes Hermione Granger, anteriorme Weasley, se encontraba viviendo en un hotel cerca de las playas del mar mediterráneo. No era ni por lejos lo que ella había planeado hacer siendo que se había casado con su amigo de la infancia Ron hacía 1 año, pero no podía dejar a un lado sus sueños solo por seguir casada.

FLASH BACK
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Despertando la mañana de un domingo en brazos de su pelirrojo esposo.

Hola, cariño - lo besó suavemente mientras Ron despertaba. - buenos días.

Buenos días, esposa - le devolvió el beso.

¿Quieres desayunar? - le dijo mostrándole una charola con jugo de calabaza y deliciosas tostatas con miel.

¿Qué quieres? - levantó la ceja porque era muy sospechoso que su esposa le dejara tomar el desayuno en la cama.

Nada... Bueno, si es algo que quiero que hablemos, es... Me aceptaron en el empleo para investigador de campo sobre historia de la magia - dijo ella muy emocionada esperando la reacción de su esposo que la miraba muy molesto.

Te advertí que no aplicaras, sabía que si lo hacías lo conseguirías y te verías en la obligación de rechazarlo - dijo Ron muy molesto porque su esposa lo hizo a sus espaldas.

¿En la obligación de rechazarlo? - dijo ella algo contrariada porque esperaba al menos poder conversarlo.

Sí, ya lo habíamos hablado y te dije que si seguías con eso no llegaríamos a ningún lado - dijo Ron.

Pero puedo ir, hacer mi trabajo y mantenerme en contacto contigo, visitarte cada 2 semanas y... - decía Hermione tratando de darle opciones a su esposo.

Y nada, no irás o se acaba nuestro matrimonio - ella se quedó con la boca abierta y los ojos llorosos y salió de la habitación para alejarse de él por un momento.

Pasaron los días y ella no le dirigía la palabra a su esposo que estaba indignado por la situación que ella misma había creado, meditaba en cual sería la decisión correcta y lo supo cuando a su mente llegó una pequeña, pero fuerte frase - sigue a tu corazón. - seguir a su corazón era lo que debía hacer.

Por fin, después de casi 3 semanas de meditar lo decidió. - iré - dijo una noche a Ron sin más argumento.

¿Estás segura de eso? - dijo Ron.

Sí - dijo decidida.

¿Estás consiente de que echarás a la borda nuestro matrimonio por esta aventura? - dijo él molesto por su decisión.

No es una aventura, Ron, es parte mi vida y de mi felicidad - dijo ella tratando de contener las lágrimas.

Claro, irás por ahí vagando de un lado a otro sin importarte lo que yo sienta al respecto. - reclamó Ron.

Y... ¿A ti te ha importado en algún punto de esto lo que yo siento, lo que yo quiero, lo que me hace sentir plena? - dijo ella llorando.

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