Capítulo 22

394 22 4
                                        

—Debería irme ahora. Podrían darse cuenta de que no estamos en los dormitorios... —dije rompiendo el silencio segundos después de habernos separado.

El ambiente resultaba extrañamente incómodo. Ninguno de los dos se atrevía a hacer algo. Permanecíamos de pie frente a frente, pero nuestras miradas se habían desviado a diferentes puntos de la habitación.

—Esta noche... —Habló Hwang sin terminar su frase y sentí que el corazón se me iba a salir del pecho—. Habrá un toque de queda... Lo hicieron a propósito para que se eliminen a más jugadores, de esa manera dejarán a los más fuertes —explicó.

Me sentí un poco tonta al haber anticipado la situación en mi cabeza. 

—¿Cómo lo sabes? —cuestioné preocupada mientras intentaba ocultar mi rubor.

En la sala de monitoreo lo escuché. Saben que algunos de los jugadores tienen armas escondidas o utensilios con los cuales defenderse, van a provocar una pelea para dividirlos entre bandos.

—¿Pero por qué harían algo como eso? Son unos malditos psicópatas. No les parece suficiente asesinar a todas esas personas, ahora quieren que se maten entre ellos —hablé sintiendo total indignación.

—¿Por qué crees que todos regresaron al juego? No son tan inocentes como dices. Sabían perfectamente la clase de cosas en las que se estaban metiendo —su tono cambió a distante.

—¿Qué?... Tú bien sabes que los responsables de todo esto abusan de su poder, esa gente fue atraída con engaños desde un principio, les hicieron creer que ganarían dinero y resolverían sus deudas, se aprovecharon de gente desesperada —intenté justificar mi punto de vista.

—De todas formas no hemos podido hacer nada. Muchos de ellos mueren a diario —dijo con apatía.

—¿Qué haremos esta noche?... Sobre la purga... ¿No hay manera de que los guardias interfieran? Sabemos perfectamente que el señor Seong se encuentra ahí dentro, también me he percatado de que siempre está acompañado de un anciano, y hasta hace poco integraron a tres mujeres en su equipo. Al menos quisiera protegerlos a ellos —dije con la esperanza de obtener su apoyo.

—¿Y cómo esperas que hagamos eso? —mantuvo su expresión.

Pareciera que no tienes intenciones de salvar a nadie. Sólo te importa encontrar el paradero de tu hermano, al menos yo intento ayudar al resto —respondí molesta.

—Es lo único que has intentado hacer desde que llegaste aquí, pero dime... ¿A cuantos de ellos has salvado? —continuó.

De nuevo volvía a comportarse como un completo idiota. Entendía perfectamente su punto, era obvio que yo era una tonta por creer que algo bueno sucedería en un lugar como este. Pero al menos habría intentando ser menos directo.

—No sé por qué creí que ibas a ayudarme en esto... Sólo te ha importado una cosa desde el principio, sigues siendo igual de egoísta buscando tu propio bien —me di media vuelta para no verlo a la cara.

—Tienes razón... —hizo una pausa antes de continuar—. Soy un idiota egoísta porque no me importa salvar a todas esas personas... Sólo puedo pensar en salvarte a tí —respondió con tono firme haciendo que me estremeciera—. Puedes pensar todo lo que quieras de mí, seré un egoísta, idiota e incluso incompetente.Pero nada ni nadie me va a impedir mantenerte salvo, incluso si soy yo quien deba morir.

Quería que toda esta conversación terminara de una vez por todas, pero me limité a permanecer callada escuchando sus palabras.

●~Caught Up~● ○△☆☂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora